Luego de que el mercado paralelo del dólar repuntara por una mayor restricción a los retiros de divisas mediante tarjetas de crédito, el precio blue retomó el rumbo bajista, aunque con menos profundidad: ayer el blue cedió cinco centavos, hasta quedar en $8,88. En tanto, el dólar oficial operó en terreno opuesto, subió un centavo, a $5,29, lo que significó un alza de 10 centavo en lo que va del mes.
El Banco Central (BCRA) es quien controla este segmento, y últimamente aceleró el ritmo de devaluación tanto para favorecer la competitividad como para acortar la brecha entre ambos mercados, que ayer se ubicó en el 66%, cerca del mínimo de dos meses de 60% que tocó la semana pasada.
Si bien el miércoles anterior la caída del blue se perfilaba hacia los $8 –un nivel que contentaba al gobierno–, el jueves y el viernes la tendencia se revirtió y el blue volvió a coquetear con los $9. No obstante, en la city aseguraron que la recuperación “está latente”. A su vez, el “contado con liquidación” se mostró levemente por debajo de los cierres previos, a $8,47.
Por su parte, el organismo monetario “dejó ir” a la divisa estadounidense en el terreno formal a medida que compra dólares para recomponer las arcas. Aunque esta semana el BCRA no tuvo mucha suerte en esta materia, en lo que va de mayo acumula por lo menos unos u$s450 millones.
Según operadores de la city, ayer la entidad compró sobre el final unos u$s35 millones; sin embargo, desde el BCRA informaron que la intervención dio un saldo neutro.
El dólar mayorista subió medio centavo en la última rueda, a $5,275, lo que obligó a las pizarras a encarecerse un centavo más.
“Ambos mercados estuvieron tranquilos, pero el blue estuvo más acotado, se vieron menos operaciones”, comentó el operador de una mesa de dinero. Igualmente alertó que “la suba está latente porque no bajó mucho”.
El punto máximo al que llegó el blue fue el 8 de mayo, cuando tocó los $10,50. A partir de ese momento comenzó una baja contundente de diez ruedas que terminó el miércoles pasado, cuando llegó a $8,43. Al día siguiente trascendió que las tarjetas de crédito recortaban aún más los límites de adelantos en efectivo y la demanda de los ahorristas hizo subir unos centavos al blue, pero el precio no superó los $8,95 en el cierre del viernes.
Hoy el dólar marginal se encuentra en un valor intermedio, cercano al mínimo de la semana pasada y al borde de los $9. Quedó abierta la puerta para que tome cualquier rumbo.
En cuanto al futuro del dólar oficial, en el Rofex los valores de contrato para este viernes tuvo una postura de venta en $5,276, mientras que para junio se operó a $5,36 y a fin de julio $5,458.
Por otro lado, el volumen en el mercado spot se recuperó respecto del lunes, pero no sobresalió: se operaron u$s180 millones en el Siopel y u$s80 millones en el MEC.
Las reservas, en tanto, finalizaron en los u$s38.709 millones.
El Banco Central (BCRA) es quien controla este segmento, y últimamente aceleró el ritmo de devaluación tanto para favorecer la competitividad como para acortar la brecha entre ambos mercados, que ayer se ubicó en el 66%, cerca del mínimo de dos meses de 60% que tocó la semana pasada.
Si bien el miércoles anterior la caída del blue se perfilaba hacia los $8 –un nivel que contentaba al gobierno–, el jueves y el viernes la tendencia se revirtió y el blue volvió a coquetear con los $9. No obstante, en la city aseguraron que la recuperación “está latente”. A su vez, el “contado con liquidación” se mostró levemente por debajo de los cierres previos, a $8,47.
Por su parte, el organismo monetario “dejó ir” a la divisa estadounidense en el terreno formal a medida que compra dólares para recomponer las arcas. Aunque esta semana el BCRA no tuvo mucha suerte en esta materia, en lo que va de mayo acumula por lo menos unos u$s450 millones.
Según operadores de la city, ayer la entidad compró sobre el final unos u$s35 millones; sin embargo, desde el BCRA informaron que la intervención dio un saldo neutro.
El dólar mayorista subió medio centavo en la última rueda, a $5,275, lo que obligó a las pizarras a encarecerse un centavo más.
“Ambos mercados estuvieron tranquilos, pero el blue estuvo más acotado, se vieron menos operaciones”, comentó el operador de una mesa de dinero. Igualmente alertó que “la suba está latente porque no bajó mucho”.
El punto máximo al que llegó el blue fue el 8 de mayo, cuando tocó los $10,50. A partir de ese momento comenzó una baja contundente de diez ruedas que terminó el miércoles pasado, cuando llegó a $8,43. Al día siguiente trascendió que las tarjetas de crédito recortaban aún más los límites de adelantos en efectivo y la demanda de los ahorristas hizo subir unos centavos al blue, pero el precio no superó los $8,95 en el cierre del viernes.
Hoy el dólar marginal se encuentra en un valor intermedio, cercano al mínimo de la semana pasada y al borde de los $9. Quedó abierta la puerta para que tome cualquier rumbo.
En cuanto al futuro del dólar oficial, en el Rofex los valores de contrato para este viernes tuvo una postura de venta en $5,276, mientras que para junio se operó a $5,36 y a fin de julio $5,458.
Por otro lado, el volumen en el mercado spot se recuperó respecto del lunes, pero no sobresalió: se operaron u$s180 millones en el Siopel y u$s80 millones en el MEC.
Las reservas, en tanto, finalizaron en los u$s38.709 millones.