Hay humo en tus ojos: proselitismo vs. estrategia
Campana de largada, pero pisando hielo fino. A veces trizado y de resistencia incierta, como son los emprendimientos políticos, un golpe de dados sobre el futuro. A cinco meses del cierre de listas para las PASO nacionales, 26 de junio, lo intoxica todo el dominio del proselitismo por sobre la claridad estratégica. Los asesores de campaña, vendedores de humo e ilusiones, matan la ansiedad de los protagonistas con cócteles ansiolíticos, como apariciones extravagantes en escenarios veraniegos, o con sesiones de fotos. Les convencen de que el futuro lo determinan esas imágenes, o el mito de la atropellada final, la de los últimos 200 metros finales de las carreras de caballos, y que hay que gastarla toda allí. Ilusiones que pavimentan el fracaso: no hay nada más estable que el electorado criollo, que vota siempre más o menos lo mismo, de un seleccionado de candidatos y partidos, que son los que sí cambian. Son el elemento volátil de un negocio – la política – en donde hay fruición por la aventura, y que por lo general sólo produce catástrofes. Cambian porque fracasaron, pero el público es el mismo y vota de manera paciente de la misma forma. Quien no entiende esto, no entiende nada, o está en la estafa. Como quienes aseguran con envaramiento sospechoso que los candidatos aparecen por sorpresa en el último tramo de las campañas. Dan el ejemplo de Kirchner en 2003, ignorando que era un actor con 20 años de protagonismo que, encima, llegó atado al carro del duhaldismo bonaerense. O el de Macri en 2015, olvidando que venía desde 2003 cabalgando elecciones y que fue socio de las victorias de la oposición al peronismo, en las legislativas de 2009 y 2013. Sí es cierto que la sorpresa la dan las encuestas, que le habían puesto la banda presidencial de Julio Cobos antes de 2011, y después no tuvo ni para anotarse en las presidenciales que ganó Cristina. Las mismas encuestas le aseguraron la banda a Sergio Massa para 2015 un año antes, y después no tuvo ni para entrar en el ballotage. “When your heart’s on fire/You must realize/Smoke gets in your eyes” (”Cuando tu corazón está ardiendo, debes darte cuenta de que el humo entra en tus ojos”), recomiendo esa balada de autoayuda que hicieron famosa Los Plateros (“Humo en tus ojos”).
Campana de largada, pero pisando hielo fino. A veces trizado y de resistencia incierta, como son los emprendimientos políticos, un golpe de dados sobre el futuro. A cinco meses del cierre de listas para las PASO nacionales, 26 de junio, lo intoxica todo el dominio del proselitismo por sobre la claridad estratégica. Los asesores de campaña, vendedores de humo e ilusiones, matan la ansiedad de los protagonistas con cócteles ansiolíticos, como apariciones extravagantes en escenarios veraniegos, o con sesiones de fotos. Les convencen de que el futuro lo determinan esas imágenes, o el mito de la atropellada final, la de los últimos 200 metros finales de las carreras de caballos, y que hay que gastarla toda allí. Ilusiones que pavimentan el fracaso: no hay nada más estable que el electorado criollo, que vota siempre más o menos lo mismo, de un seleccionado de candidatos y partidos, que son los que sí cambian. Son el elemento volátil de un negocio – la política – en donde hay fruición por la aventura, y que por lo general sólo produce catástrofes. Cambian porque fracasaron, pero el público es el mismo y vota de manera paciente de la misma forma. Quien no entiende esto, no entiende nada, o está en la estafa. Como quienes aseguran con envaramiento sospechoso que los candidatos aparecen por sorpresa en el último tramo de las campañas. Dan el ejemplo de Kirchner en 2003, ignorando que era un actor con 20 años de protagonismo que, encima, llegó atado al carro del duhaldismo bonaerense. O el de Macri en 2015, olvidando que venía desde 2003 cabalgando elecciones y que fue socio de las victorias de la oposición al peronismo, en las legislativas de 2009 y 2013. Sí es cierto que la sorpresa la dan las encuestas, que le habían puesto la banda presidencial de Julio Cobos antes de 2011, y después no tuvo ni para anotarse en las presidenciales que ganó Cristina. Las mismas encuestas le aseguraron la banda a Sergio Massa para 2015 un año antes, y después no tuvo ni para entrar en el ballotage. “When your heart’s on fire/You must realize/Smoke gets in your eyes” (”Cuando tu corazón está ardiendo, debes darte cuenta de que el humo entra en tus ojos”), recomiendo esa balada de autoayuda que hicieron famosa Los Plateros (“Humo en tus ojos”).