Argentina
El Gobierno rechazó un crédito del Banco Mundial que intentó condicionar las empresas contratistas
El crédito por u$s100 millones tenía por destino financiar obras de AySA para el saneamiento de la cuenca Matanza-Riachuelo. El Gobierno resolvió seguir adelante con el plan con recursos propios y no aceptar condicionamientos.
Los planes de saneamiento junto con los del sector energético tienen desde el 2003 máxima prioridad
El Gobierno nacional resolvió dejar a un lado en la licitación internacional por convocarse para ejecutar obras de infraestructura sanitaria y ambiental proyectadas por AySA a todas aquellas empresas que mantengan planteamientos litigiosos con la Argentina.
Esa decisión adoptada por las autoridades dejó en consecuencia caída la negociación que se mantuvo con el Banco Mundial en relación con el otorgamiento de una línea crediticia por u$s100 millones enfocada a trabajos por ejecutarse sobre la cuenca Matanza-Riachuelo.
En esa licitación aspiraban a competir una “lista larga” de empresas entre las que figuraba la firma Degreemont, integrante del Grupo Suez, ex concesionario de Aguas Argentinas.
Esas obras que ahora se encararán con el exclusivo aporte financiero del Estado nacional comprenden un conjunto de proyectos que suman u$s1.007 millones. Entre esas grandes obras figura la construcción del futuro emisario subfluvial Riachuelo, una planta de tratamiento de líquidos cloacales en Dock Sud y un conducto colector por instalarse sobre la margen izquierda del Riachuelo que actuará en tiempo seco (sin lluvias), destinado a capturar to-dos los efluentes que puedan converger hacia el curso del Matanza- Riachuelo.
Cabe recordar que el retiro de la concesión de la ex Aguas Argentinas concretado el 21 de marzo de 2006 configuró junto con la renegociación de la deuda externa (2005) y la renacionalización de los fondos previsionales (2007) una de las primeras apuestas fuertes del Gobierno que asumió el 25 de mayo de 2003, presidido por el ex presidente Néstor Kirchner.
Esas decisiones apuntaron al reposicionamiento de las decisiones soberanas del Estado y a conferir absoluta prioridad a temas como el saneamiento, que ayuda a impulsar vigorosamente los planes de inclusión social. En una reciente reunión organizada por la Organización Latinoamericana de Operadores de Agua y Saneamiento (OLAES), el titular hasta fines del 2012 de esa flamante entidad regional y también presidente de AySA, Carlos Humberto Ben, hizo notar que la decisión adoptada por las autoridades frente a la relación que se mantiene con el Banco Mundial no entrañará ninguna restricción a la marcha de los proyectos de saneamiento que se ejecutan sobre la cuenca Matanza- Riachuelo.
Esas deprimidas áreas del conurbano en las que habitan casi tres millones de personas, que soportan desde hace décadas un impresionante grado de deterioro ecológico, están beneficiándose con el 75% de los montos de inversiones que AySA tiene en desarrollo para extender sus redes de agua y cloacas, así como en la concreción de plantas de tratamiento de líquidos cloacales.
Así lo destacó Ben al reseñar que en su todavía breve vida AySA concretó obras valuadas en $5.500 millones, mientras que actualmente están ejecutándose trabajos que insumirán otros $2.000 millones. En la reunión de la OLAES realizada en el Hotel NH Provincial de Mar de Plata a la que asistió el gobernador Daniel Scioli, la ministra de Infraestructura, Cristina Álvarez Rodríguez, recordó que las obras de ese sector implican un proceso de construcción de ciudadanía con fuerte inclusión social.
ERNESTO DE PAOLA edepaola@buenosaireseconomico.com
El Gobierno rechazó un crédito del Banco Mundial que intentó condicionar las empresas contratistas
El crédito por u$s100 millones tenía por destino financiar obras de AySA para el saneamiento de la cuenca Matanza-Riachuelo. El Gobierno resolvió seguir adelante con el plan con recursos propios y no aceptar condicionamientos.
Los planes de saneamiento junto con los del sector energético tienen desde el 2003 máxima prioridad
El Gobierno nacional resolvió dejar a un lado en la licitación internacional por convocarse para ejecutar obras de infraestructura sanitaria y ambiental proyectadas por AySA a todas aquellas empresas que mantengan planteamientos litigiosos con la Argentina.
Esa decisión adoptada por las autoridades dejó en consecuencia caída la negociación que se mantuvo con el Banco Mundial en relación con el otorgamiento de una línea crediticia por u$s100 millones enfocada a trabajos por ejecutarse sobre la cuenca Matanza-Riachuelo.
En esa licitación aspiraban a competir una “lista larga” de empresas entre las que figuraba la firma Degreemont, integrante del Grupo Suez, ex concesionario de Aguas Argentinas.
Esas obras que ahora se encararán con el exclusivo aporte financiero del Estado nacional comprenden un conjunto de proyectos que suman u$s1.007 millones. Entre esas grandes obras figura la construcción del futuro emisario subfluvial Riachuelo, una planta de tratamiento de líquidos cloacales en Dock Sud y un conducto colector por instalarse sobre la margen izquierda del Riachuelo que actuará en tiempo seco (sin lluvias), destinado a capturar to-dos los efluentes que puedan converger hacia el curso del Matanza- Riachuelo.
Cabe recordar que el retiro de la concesión de la ex Aguas Argentinas concretado el 21 de marzo de 2006 configuró junto con la renegociación de la deuda externa (2005) y la renacionalización de los fondos previsionales (2007) una de las primeras apuestas fuertes del Gobierno que asumió el 25 de mayo de 2003, presidido por el ex presidente Néstor Kirchner.
Esas decisiones apuntaron al reposicionamiento de las decisiones soberanas del Estado y a conferir absoluta prioridad a temas como el saneamiento, que ayuda a impulsar vigorosamente los planes de inclusión social. En una reciente reunión organizada por la Organización Latinoamericana de Operadores de Agua y Saneamiento (OLAES), el titular hasta fines del 2012 de esa flamante entidad regional y también presidente de AySA, Carlos Humberto Ben, hizo notar que la decisión adoptada por las autoridades frente a la relación que se mantiene con el Banco Mundial no entrañará ninguna restricción a la marcha de los proyectos de saneamiento que se ejecutan sobre la cuenca Matanza- Riachuelo.
Esas deprimidas áreas del conurbano en las que habitan casi tres millones de personas, que soportan desde hace décadas un impresionante grado de deterioro ecológico, están beneficiándose con el 75% de los montos de inversiones que AySA tiene en desarrollo para extender sus redes de agua y cloacas, así como en la concreción de plantas de tratamiento de líquidos cloacales.
Así lo destacó Ben al reseñar que en su todavía breve vida AySA concretó obras valuadas en $5.500 millones, mientras que actualmente están ejecutándose trabajos que insumirán otros $2.000 millones. En la reunión de la OLAES realizada en el Hotel NH Provincial de Mar de Plata a la que asistió el gobernador Daniel Scioli, la ministra de Infraestructura, Cristina Álvarez Rodríguez, recordó que las obras de ese sector implican un proceso de construcción de ciudadanía con fuerte inclusión social.
ERNESTO DE PAOLA edepaola@buenosaireseconomico.com
