Hugo Moyano –el opositor con más poder que tiene el Gobierno kirchnerista– desembarcó en Córdoba para lanzar una propuesta política de cara al 2015. El jefe de la CGT nacional cuestionó con dureza a la presidenta Cristina Fernández y no dudó en afirmar que el Gobierno perderá las elecciones legislativas por no haber cumplido sus promesas y no ser creíble.
Evitó decir si acompañaría al gobernador José Manuel de la Sota en un proyecto presidencial, aunque elogió su “coraje” en su reclamo a la Nación.
El camionero dialogó con La Voz del Interior en el hotel sindical de Villa Carlos Paz, poco antes de presidir un encuentro en La Falda.
–¿Esta propuesta que lanza en Córdoba forma parte de un proyecto político propio?
–En primera instancia es el pensamiento de la CGT para un proyecto de país para el futuro. Lo que apuntamos es a tener en cuenta todo el potencial que tiene el país y aprovecharlo en función de un desarrollo y crecimiento que se tiene que convertir en justicia social. Desgraciadamente, todo este crecimiento que se ha visto en los últimos años no se ha reflejado en el desarrollo ni en la justicia social.
–Usted apoyaba al Gobierno de Cristina. ¿Por qué se alejó?
–Porque se alejó de los sectores populares. Los trabajadores hemos visto en los últimos tiempos que todas las conquistas conseguidas en el Gobierno de Perón, prácticamente desaparecieron. El aguinaldo desapareció por el perverso impuesto que tenemos al trabajo. Y las asignaciones familiares están desapareciendo. Se han visto perjudicados mas de 400 mil chicos y además muchos de los que siguen han disminuido los valores que cobraban.
–¿El cacerolazo frenó el proyecto de re-reelección?
–Esto ya desapareció de la agenda del Gobierno. El cacerolazo fue un sector de la sociedad que se ve afectado, que se sumó a otros sectores que ya venimos protestando desde hace tiempo. Esto demuestra que este avance del descontento que hay en la sociedad con el Gobierno va creciendo en forma importante.
–¿Compartiría un proyecto presidencial con De la Sota?
–En principio, tenemos que ponernos de acuerdo en qué pensamos para el futuro del país. Y después, estoy convencido de que el peronismo se va unir y muchos otros sectores van a sumarse. Después saldrán los hombres que garanticen el cumplimiento de un proyecto bueno para el país y el pueblo, que es lo que tiene como principio el peronismo. Y, justamente, la presentación que hacemos tiene como base a los sectores empresarios y del trabajo.
–A propósito, ¿cómo ve al empresariado?
–Hoy los empresarios se ven limitados hasta en su visión de creatividad porque nadie se anima a hacer nada. Todo el mundo está temeroso y desconfiando.
–¿Desde la oposición dicen que hay una actitud estanilista en el Gobierno?
–Yo dije hace mucho tiempo que están sovietizando el Estado y, desgraciadamente, esto es así. Cuando se le quita la libertad al empresario para la inversión, o al trabajador con los impuestos que se queda el Estado, se le hace daño al conjunto de la sociedad.
–¿Cómo ve el enfrentamiento de la Nación con De la Sota, por el reclamo de fondos adeudados?
–Hicimos público el apoyo al reclamo de De la Sota que es legítimo y el coraje que ha tenido para salir a reclamar. Lamentablemente, hay muchos gobernadores que están en la misma situación, pero no se animan a reclamar porque son castigados con mas limitaciones en la coparticipación. El Gobierno debería entender que no le está haciendo daño a un gobernador o a un intendente si no a quienes representa.
– El Indec dice que ha retrocedido la pobreza.
–Esas mentiras no son creíbles para nadie y además esto es una tomada de pelo a la sociedad. Insistir con estas cosas es faltarle el respeto a la sociedad. Por eso creo que día a día el Gobierno se deteriora y esos son los resultados de los cacerolazos en Plaza de Mayo, en gran parte del país, y en Estados Unidos, por el maltrato que hace el Gobierno con la sociedad.
–¿Cree que ese descontento se reflejará en las elecciones legislativas de 2013?
–Estoy convencido de eso. Así como nosotros alentamos en su momento a votar a este Gobierno, también tenemos el derecho de decir que no han cumplido con las promesas y, por lo tanto, no son creíbles y buscaremos otras alternativas. Estas manifestaciones que se están dando, son porque hay un gran porcentaje de la sociedad que está completamente disconforme con la forma en que se conduce el país. Es el callejón sin salida al que ha llevado la Presidenta por su forma de hacer política.
–¿No hay acuerdo posible con la CGT oficialista?
–No. Algunos compañeros creen que el movimiento obrero tiene que recibir órdenes e instrucciones del Gobierno y están completamente equivocados. Nosotros nos debemos a los trabajadores y no a los Gobiernos de turno. Y esto es lo que nos diferencia. El Gobierno decidió que no habrá aumento del mínimo no imponible; entonces para qué discutimos salario. ¿para qué se lo lleve el Gobierno?
–¿Busca ser presidente?
–(Sonríe) Eso habría que preguntárselo a la gente.
Evitó decir si acompañaría al gobernador José Manuel de la Sota en un proyecto presidencial, aunque elogió su “coraje” en su reclamo a la Nación.
El camionero dialogó con La Voz del Interior en el hotel sindical de Villa Carlos Paz, poco antes de presidir un encuentro en La Falda.
–¿Esta propuesta que lanza en Córdoba forma parte de un proyecto político propio?
–En primera instancia es el pensamiento de la CGT para un proyecto de país para el futuro. Lo que apuntamos es a tener en cuenta todo el potencial que tiene el país y aprovecharlo en función de un desarrollo y crecimiento que se tiene que convertir en justicia social. Desgraciadamente, todo este crecimiento que se ha visto en los últimos años no se ha reflejado en el desarrollo ni en la justicia social.
–Usted apoyaba al Gobierno de Cristina. ¿Por qué se alejó?
–Porque se alejó de los sectores populares. Los trabajadores hemos visto en los últimos tiempos que todas las conquistas conseguidas en el Gobierno de Perón, prácticamente desaparecieron. El aguinaldo desapareció por el perverso impuesto que tenemos al trabajo. Y las asignaciones familiares están desapareciendo. Se han visto perjudicados mas de 400 mil chicos y además muchos de los que siguen han disminuido los valores que cobraban.
–¿El cacerolazo frenó el proyecto de re-reelección?
–Esto ya desapareció de la agenda del Gobierno. El cacerolazo fue un sector de la sociedad que se ve afectado, que se sumó a otros sectores que ya venimos protestando desde hace tiempo. Esto demuestra que este avance del descontento que hay en la sociedad con el Gobierno va creciendo en forma importante.
–¿Compartiría un proyecto presidencial con De la Sota?
–En principio, tenemos que ponernos de acuerdo en qué pensamos para el futuro del país. Y después, estoy convencido de que el peronismo se va unir y muchos otros sectores van a sumarse. Después saldrán los hombres que garanticen el cumplimiento de un proyecto bueno para el país y el pueblo, que es lo que tiene como principio el peronismo. Y, justamente, la presentación que hacemos tiene como base a los sectores empresarios y del trabajo.
–A propósito, ¿cómo ve al empresariado?
–Hoy los empresarios se ven limitados hasta en su visión de creatividad porque nadie se anima a hacer nada. Todo el mundo está temeroso y desconfiando.
–¿Desde la oposición dicen que hay una actitud estanilista en el Gobierno?
–Yo dije hace mucho tiempo que están sovietizando el Estado y, desgraciadamente, esto es así. Cuando se le quita la libertad al empresario para la inversión, o al trabajador con los impuestos que se queda el Estado, se le hace daño al conjunto de la sociedad.
–¿Cómo ve el enfrentamiento de la Nación con De la Sota, por el reclamo de fondos adeudados?
–Hicimos público el apoyo al reclamo de De la Sota que es legítimo y el coraje que ha tenido para salir a reclamar. Lamentablemente, hay muchos gobernadores que están en la misma situación, pero no se animan a reclamar porque son castigados con mas limitaciones en la coparticipación. El Gobierno debería entender que no le está haciendo daño a un gobernador o a un intendente si no a quienes representa.
– El Indec dice que ha retrocedido la pobreza.
–Esas mentiras no son creíbles para nadie y además esto es una tomada de pelo a la sociedad. Insistir con estas cosas es faltarle el respeto a la sociedad. Por eso creo que día a día el Gobierno se deteriora y esos son los resultados de los cacerolazos en Plaza de Mayo, en gran parte del país, y en Estados Unidos, por el maltrato que hace el Gobierno con la sociedad.
–¿Cree que ese descontento se reflejará en las elecciones legislativas de 2013?
–Estoy convencido de eso. Así como nosotros alentamos en su momento a votar a este Gobierno, también tenemos el derecho de decir que no han cumplido con las promesas y, por lo tanto, no son creíbles y buscaremos otras alternativas. Estas manifestaciones que se están dando, son porque hay un gran porcentaje de la sociedad que está completamente disconforme con la forma en que se conduce el país. Es el callejón sin salida al que ha llevado la Presidenta por su forma de hacer política.
–¿No hay acuerdo posible con la CGT oficialista?
–No. Algunos compañeros creen que el movimiento obrero tiene que recibir órdenes e instrucciones del Gobierno y están completamente equivocados. Nosotros nos debemos a los trabajadores y no a los Gobiernos de turno. Y esto es lo que nos diferencia. El Gobierno decidió que no habrá aumento del mínimo no imponible; entonces para qué discutimos salario. ¿para qué se lo lleve el Gobierno?
–¿Busca ser presidente?
–(Sonríe) Eso habría que preguntárselo a la gente.