ROCA (AR).- Después de más de tres meses, efectivos de la Brigada de Investigaciones de Roca lograron desbaratar ayer a la madrugada una banda que se dedicaba al robo de petróleo a través de un sistema de bombeo que le permitía pinchar diariamente el ducto de la empresa Oldelval y extraer por semana un promedio de 60.000 litros de crudo.
Seis sospechosos detenidos, más de un millón de pesos en efectivo, siete vehículos secuestrados, armas de grueso calibre y y herramientas de todo tipo fue el saldo de una serie de allanamientos que se iniciaron pasada la medianoche y finalizaron ayer por la tarde.
La pinchadura del ducto se encuentra a unos 8 kilómetros al norte de la rotonda del aeropuerto de Roca. La banda operaría desde hace un año.
Si las primeras estimaciones hablan de 60.000 litros en una semana (con cada viaje recaudaban unos 18.000 dólares), en un año podrían haber robado casi 3 millones de litros. La cifra total podría rondar los 8 millones de pesos (1,7 millones de dólares).
Tal era la logística que la banda había construido un piletón de cemento (ver recuadro) que se encontraba a unos 2,5 kilómetros del puesto rural de Araño.
«A veces pasaban varios días sin cargar, pero por lo general el promedio era de dos viajes por semana», dijo una alta fuente judicial consultada sobre el caso.
Se calcula que la banda de «piratas del petróleo» comercializaba el botín en refinerías ubicada en la provincia de Buenos Aires.
La extracción del crudo del piletón dependía de las condiciones climáticas, del estado del camino para poder ingresar al puesto rural -ubicado a unos 2,5 kilómetros al este de la Ruta Provincial 6, y del temor de los propios delincuentes a ser descubiertos.
Pero nunca se percataron de la investigación que llevaba adelante el personal de la Brigada de Investigaciones, a cargo del oficial principal Manuel Leiva.
Cerca de 15 efectivos se fueron turnando noche tras noche para lograr documentar -a través de filmaciones- la metodología que utilizaban para hacerse del crudo. Una fuente cercana a la investigación comentó que una vez que el camión se acercaba al piletón utilizaban bombas a explosión para introducir entre 28.000 y 32.000 litros de crudo al transporte.
La investigación fue amplia. No sólo se siguió la pista del camión sino también la conexión entre los integrantes de la banda. Luego de horas de escuchas telefónicas, los policías se fueron haciendo de los detalles más minuciosos sobre la forma en la que operaban y sus conexiones tanto en Roca como en otras ciudades del Alto Valle.
El gran golpe
Con la orden en mano del juez de instrucción Daniel Tobares, en los primeros minutos del jueves se puso en marcha el operativo. El camión Ford 1722 había ingresado una hora antes al puesto rural de Araño. Con toda la carga de crudo, el transporte partió cerca de la 1 de madrugada por la Ruta 6, con destino a Casa de Piedra.
A 27 kilómetros al norte, efectivos de la policía detuvieron al chofer, un hombre de unos 55 años -de apellido Doleschen- y secuestraron el camión con el valioso cargamento.
Otro grupo de uniformados siguió un Citroën C4 -patente JQX 955- de color oscuro. Los investigadores calculan que el conductor -José Luis Olivetto- no sólo sería el cabecilla de la banda sino que también era el hombre que realizaba la custodia de manera personal de la maniobra.
Lo detuvieron cuando estaba estacionando su automóvil en calle Tucumán al 1.600, en la zona céntrica de Roca, en un complejo donde alquilaba tres departamentos. El sospechoso tiene unos 50 años y es oriundo de Olavarría, según el relato de los investigadores. En la cintura llevaba un revólver calibre 32 y al momento de ingresar a uno de los departamentos que ocupaba, la Policía encontró escopetas, pistolas, miras telescópicas, documentación y más de medio millón de pesos en dos maletines.
De manera simultánea se allanó otro domicilio ubicado en Mitre casi Urquiza. Allí la policía logró secuestrar otros elementos como documentación y más dinero en efectivo. En ese momento apareció en el lugar un vehículo Chevrolet Corsa que le resultó sumamente sospechoso a los investigadores, quienes cerca de las 2 de la madrugada continuaban con las diligencias. Tras darle alcance en San Juan y Gadano, detuvieron a otros cuatro sujetos, entre los que se encontraban un hijo y un sobrino de Olivetto. Todos son mayores de edad y están detenidos en distintas sedes policiales. También portaban armas largas, según fuentes policiales y judiciales consultadas.
En total se realizaron seis allanamientos, secuestraron siete vehículos -algunos de alta gama- detuvieron a seis personas e incautaron más de un millón de pesos.
Seis sospechosos detenidos, más de un millón de pesos en efectivo, siete vehículos secuestrados, armas de grueso calibre y y herramientas de todo tipo fue el saldo de una serie de allanamientos que se iniciaron pasada la medianoche y finalizaron ayer por la tarde.
La pinchadura del ducto se encuentra a unos 8 kilómetros al norte de la rotonda del aeropuerto de Roca. La banda operaría desde hace un año.
Si las primeras estimaciones hablan de 60.000 litros en una semana (con cada viaje recaudaban unos 18.000 dólares), en un año podrían haber robado casi 3 millones de litros. La cifra total podría rondar los 8 millones de pesos (1,7 millones de dólares).
Tal era la logística que la banda había construido un piletón de cemento (ver recuadro) que se encontraba a unos 2,5 kilómetros del puesto rural de Araño.
«A veces pasaban varios días sin cargar, pero por lo general el promedio era de dos viajes por semana», dijo una alta fuente judicial consultada sobre el caso.
Se calcula que la banda de «piratas del petróleo» comercializaba el botín en refinerías ubicada en la provincia de Buenos Aires.
La extracción del crudo del piletón dependía de las condiciones climáticas, del estado del camino para poder ingresar al puesto rural -ubicado a unos 2,5 kilómetros al este de la Ruta Provincial 6, y del temor de los propios delincuentes a ser descubiertos.
Pero nunca se percataron de la investigación que llevaba adelante el personal de la Brigada de Investigaciones, a cargo del oficial principal Manuel Leiva.
Cerca de 15 efectivos se fueron turnando noche tras noche para lograr documentar -a través de filmaciones- la metodología que utilizaban para hacerse del crudo. Una fuente cercana a la investigación comentó que una vez que el camión se acercaba al piletón utilizaban bombas a explosión para introducir entre 28.000 y 32.000 litros de crudo al transporte.
La investigación fue amplia. No sólo se siguió la pista del camión sino también la conexión entre los integrantes de la banda. Luego de horas de escuchas telefónicas, los policías se fueron haciendo de los detalles más minuciosos sobre la forma en la que operaban y sus conexiones tanto en Roca como en otras ciudades del Alto Valle.
El gran golpe
Con la orden en mano del juez de instrucción Daniel Tobares, en los primeros minutos del jueves se puso en marcha el operativo. El camión Ford 1722 había ingresado una hora antes al puesto rural de Araño. Con toda la carga de crudo, el transporte partió cerca de la 1 de madrugada por la Ruta 6, con destino a Casa de Piedra.
A 27 kilómetros al norte, efectivos de la policía detuvieron al chofer, un hombre de unos 55 años -de apellido Doleschen- y secuestraron el camión con el valioso cargamento.
Otro grupo de uniformados siguió un Citroën C4 -patente JQX 955- de color oscuro. Los investigadores calculan que el conductor -José Luis Olivetto- no sólo sería el cabecilla de la banda sino que también era el hombre que realizaba la custodia de manera personal de la maniobra.
Lo detuvieron cuando estaba estacionando su automóvil en calle Tucumán al 1.600, en la zona céntrica de Roca, en un complejo donde alquilaba tres departamentos. El sospechoso tiene unos 50 años y es oriundo de Olavarría, según el relato de los investigadores. En la cintura llevaba un revólver calibre 32 y al momento de ingresar a uno de los departamentos que ocupaba, la Policía encontró escopetas, pistolas, miras telescópicas, documentación y más de medio millón de pesos en dos maletines.
De manera simultánea se allanó otro domicilio ubicado en Mitre casi Urquiza. Allí la policía logró secuestrar otros elementos como documentación y más dinero en efectivo. En ese momento apareció en el lugar un vehículo Chevrolet Corsa que le resultó sumamente sospechoso a los investigadores, quienes cerca de las 2 de la madrugada continuaban con las diligencias. Tras darle alcance en San Juan y Gadano, detuvieron a otros cuatro sujetos, entre los que se encontraban un hijo y un sobrino de Olivetto. Todos son mayores de edad y están detenidos en distintas sedes policiales. También portaban armas largas, según fuentes policiales y judiciales consultadas.
En total se realizaron seis allanamientos, secuestraron siete vehículos -algunos de alta gama- detuvieron a seis personas e incautaron más de un millón de pesos.