Joaquín Quispe, el presidente del Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad de Jujuy, quien fuera ilegalmente detenido y sometido a maltratos por parte de la policía en la noche del jueves, publicó anoche una carta relatando los acontecimientos. Aquí, los pasajes más destacados.
“Siendo aproximadamente la 1.30 am, constaté la presencia de personal policial en las inmediaciones de la playa de estacionamiento de nuestra Facultad, a lo cual me acerqué al portón del estacionamiento, sin salir del predio, para poder dialogar con el jefe de la unidad.”
“En ningún momento me comunicaron que la música estaba en volumen alto, ni tampoco que habían alteraciones del orden público, ellos estaban presentes y lo pudieron vivenciar, la única alteración del orden la estaban produciendo ellos mismos, sin embargo solicité por mi parte que de todas formas se merme la música.”
“Al notar una alteración del agente al ver que la actividad continuaba con su desarrollo normal y una obsesión por ingresar al predio de la facultad, decido permanecer al lado del portón para asegurar que no se presente ningún conflicto, sin dialogar desde ese momento con ningún agente y permaneciendo totalmente tranquilo.”
“Posteriormente este agente después de haber realizado una llamada se dirige hacia el portón, le da una patada, e ingresan aproximadamente diez agentes violentamente, trotando con armas largas en mano en dirección de los estudiantes, muchos de ellos se aterran corren en todas direcciones, los cuales algunos son perseguidos por los agentes armados. Ante lo que estaba sucediendo, me dirijo hacia donde se encontraba la jefa policial de la operación y le consulto literalmente en un tono tranquilo y respetuoso, “disculpe, ¿usted tiene una autorización para ingresar a la facultad?” , a los que ella responde, ‘A él deténganlo primero’ señalándome a mí, ‘por canchero’”.
“Una vez trasladado al móvil, los policías intentan esposarme a la vez que me inmovilizaban los brazos y en ese momento les pido me expliquen porque me detienen, lo que solo escucho es ‘ya te vamos a decir’. Me lesionan las muñecas”.
“Posteriormente soy trasladado a la seccional primera donde accedo a dar mis datos y pertenencias, Quiero mencionar que ninguno de los agentes estaba identificado, pedí que se identifiquen pero ninguno accedió. Luego se me solicita que me quite la ropa para la requisa y les digo a los agentes que si estoy siendo tratado como un delincuente que se me den las razones de mi detención. Uno de ellos me responde que la razón era la resistencia al arresto, a lo que le pregunto entonces cual era el motivo del arresto inicial al cual me resistí, lo cual no me supo responder.”
“En ese momento me vuelve a esposar, se pone en mi espalda y empieza a asfixiarme levantándome constantemente del cuello con su brazo, esto en presencia de al menos otros tres agentes más. Cuando el agente notó que yo no podía soportar más la asfixia me arrojó al suelo, al cual caí de cabeza lesionándome la frente sin poder poner las manos porque me encontraba esposado. Una vez en el suelo el agente colocó su rodilla entre mis muñecas, para lesionarme con las esposas, diciéndome que iba a permanecer así hasta que cambie de opinión y acceda a lo que me estaban pidiendo.”
“Cuando me llevaron a la celda y estando en ésta, pedí constantemente que se permita realizar una llamada y se me negó la misma en todo momento.
Aproximadamente a las cuatro de la mañana (consulté la hora al policía), me llevaron a hacer registro de datos a la estación central, me marcaron los dedos y posteriormente me hicieron las pericias médicas. Conté la agresión física sucedida al policial médico la cual tomó nota de todas las lesiones producidas, en la facultad y en la comisaría. Aproveché el momento y consulté nuevamente cuál era el motivo de mi detención, a lo cual me responde el agente a cargo, que yo estaba ahí por averiguación de antecedentes”.
“Aproximadamente a las diez de la mañana fui liberado y procedí a hacer las denuncias correspondientes en la regional número 1. Lo mencionado aquí está en mi denuncia, la cual apenas pude hacer, porque me encuentro y mi encontraba prácticamente sin voz por la lesión producida en mi garganta por el ahorcamiento.”
“Respecto a la conferencia brindada por las autoridades policiales Comisario Aldo Soles y Dr. Rafael Rodríguez quiero desmentir rotundamente a los mismos: ellos mencionan que recibieron la autorización para ingresar al predio de la Facultad por el responsable, lo cual es totalmente mentira ya que el ingreso de los agentes fue de forma violenta pateando el portón de entrada del predio de la Facultad.”
“A la pregunta de la periodista de que si se les hicieron los exámenes médicos inmediatamente en el hospital como marca el proceso al ser detenido, el comisario dice que se realiza el examen con ‘médico de Policía’ o sea no en un hospital sino con sus colegas en un vicio de total arbitrariedad y el examen demoró casi 3 horas desde el momento de ser detenido. Cabe aclarar que desde el momento que fui detenido pedía que me hagan el test de alcoholemia me lo negaban, que me llevarían cuando ellos quisieran.”
“También miente al decir que fui arrestado afuera del predio de la Facultad cosa que es evidente en los videos que se ven que soy arrastrado desde el interior de la Facultad. Sin estos videos incluso podrían decir que nunca fui detenido para tapar su mal accionar. También menciona que no hubo golpiza, que solo fue para resguardar mi integridad. O sea según lo que dice el comisario me asfixiaron, golpearon y patearon sólo para cuidarme.”
“Siendo aproximadamente la 1.30 am, constaté la presencia de personal policial en las inmediaciones de la playa de estacionamiento de nuestra Facultad, a lo cual me acerqué al portón del estacionamiento, sin salir del predio, para poder dialogar con el jefe de la unidad.”
“En ningún momento me comunicaron que la música estaba en volumen alto, ni tampoco que habían alteraciones del orden público, ellos estaban presentes y lo pudieron vivenciar, la única alteración del orden la estaban produciendo ellos mismos, sin embargo solicité por mi parte que de todas formas se merme la música.”
“Al notar una alteración del agente al ver que la actividad continuaba con su desarrollo normal y una obsesión por ingresar al predio de la facultad, decido permanecer al lado del portón para asegurar que no se presente ningún conflicto, sin dialogar desde ese momento con ningún agente y permaneciendo totalmente tranquilo.”
“Posteriormente este agente después de haber realizado una llamada se dirige hacia el portón, le da una patada, e ingresan aproximadamente diez agentes violentamente, trotando con armas largas en mano en dirección de los estudiantes, muchos de ellos se aterran corren en todas direcciones, los cuales algunos son perseguidos por los agentes armados. Ante lo que estaba sucediendo, me dirijo hacia donde se encontraba la jefa policial de la operación y le consulto literalmente en un tono tranquilo y respetuoso, “disculpe, ¿usted tiene una autorización para ingresar a la facultad?” , a los que ella responde, ‘A él deténganlo primero’ señalándome a mí, ‘por canchero’”.
“Una vez trasladado al móvil, los policías intentan esposarme a la vez que me inmovilizaban los brazos y en ese momento les pido me expliquen porque me detienen, lo que solo escucho es ‘ya te vamos a decir’. Me lesionan las muñecas”.
“Posteriormente soy trasladado a la seccional primera donde accedo a dar mis datos y pertenencias, Quiero mencionar que ninguno de los agentes estaba identificado, pedí que se identifiquen pero ninguno accedió. Luego se me solicita que me quite la ropa para la requisa y les digo a los agentes que si estoy siendo tratado como un delincuente que se me den las razones de mi detención. Uno de ellos me responde que la razón era la resistencia al arresto, a lo que le pregunto entonces cual era el motivo del arresto inicial al cual me resistí, lo cual no me supo responder.”
“En ese momento me vuelve a esposar, se pone en mi espalda y empieza a asfixiarme levantándome constantemente del cuello con su brazo, esto en presencia de al menos otros tres agentes más. Cuando el agente notó que yo no podía soportar más la asfixia me arrojó al suelo, al cual caí de cabeza lesionándome la frente sin poder poner las manos porque me encontraba esposado. Una vez en el suelo el agente colocó su rodilla entre mis muñecas, para lesionarme con las esposas, diciéndome que iba a permanecer así hasta que cambie de opinión y acceda a lo que me estaban pidiendo.”
“Cuando me llevaron a la celda y estando en ésta, pedí constantemente que se permita realizar una llamada y se me negó la misma en todo momento.
Aproximadamente a las cuatro de la mañana (consulté la hora al policía), me llevaron a hacer registro de datos a la estación central, me marcaron los dedos y posteriormente me hicieron las pericias médicas. Conté la agresión física sucedida al policial médico la cual tomó nota de todas las lesiones producidas, en la facultad y en la comisaría. Aproveché el momento y consulté nuevamente cuál era el motivo de mi detención, a lo cual me responde el agente a cargo, que yo estaba ahí por averiguación de antecedentes”.
“Aproximadamente a las diez de la mañana fui liberado y procedí a hacer las denuncias correspondientes en la regional número 1. Lo mencionado aquí está en mi denuncia, la cual apenas pude hacer, porque me encuentro y mi encontraba prácticamente sin voz por la lesión producida en mi garganta por el ahorcamiento.”
“Respecto a la conferencia brindada por las autoridades policiales Comisario Aldo Soles y Dr. Rafael Rodríguez quiero desmentir rotundamente a los mismos: ellos mencionan que recibieron la autorización para ingresar al predio de la Facultad por el responsable, lo cual es totalmente mentira ya que el ingreso de los agentes fue de forma violenta pateando el portón de entrada del predio de la Facultad.”
“A la pregunta de la periodista de que si se les hicieron los exámenes médicos inmediatamente en el hospital como marca el proceso al ser detenido, el comisario dice que se realiza el examen con ‘médico de Policía’ o sea no en un hospital sino con sus colegas en un vicio de total arbitrariedad y el examen demoró casi 3 horas desde el momento de ser detenido. Cabe aclarar que desde el momento que fui detenido pedía que me hagan el test de alcoholemia me lo negaban, que me llevarían cuando ellos quisieran.”
“También miente al decir que fui arrestado afuera del predio de la Facultad cosa que es evidente en los videos que se ven que soy arrastrado desde el interior de la Facultad. Sin estos videos incluso podrían decir que nunca fui detenido para tapar su mal accionar. También menciona que no hubo golpiza, que solo fue para resguardar mi integridad. O sea según lo que dice el comisario me asfixiaron, golpearon y patearon sólo para cuidarme.”