Así quedó definido a través de la resolución 101 del ministerio de Infraestructura de la Provincia, con la que se autorizó a la empresa concesionaria Autovía del Mar SA a «aumentar el capital social por la incorporación de un nuevo socio», la empresa CPC SA, una constructora vinculada al grupo de compañías liderado por Cristóbal López.
De esta manera, López pasó a ser socio de Benito Roggio, Eurnekian y Carlos Wagner -empresario santacruceño, como López-, propietarios de Autovía del Mar a través de las empresas Benito Roggio e Hijos, Helport SA y Esuco SA, respectivamente.
Roggio, Eurnekian y Wagner formaron la Unión Transitoria de Empresas Autovía del Mar SA hace un año, cuando el gobierno provincial revocó los contratos de los entonces concesionarios de las rutas 2 y 11 y llamó a una licitación que fue adjudicada a Autovía del Mar.En la resolución que ahora autoriza el ingreso de López a ese consorcio empresario, publicada ayer en el Boletín Oficial de la Provincia, se indica que el santacruceño aportará $19.689.469, monto que elevará el capital de la concesionaria a casi 100 millones de pesos ($98.447.344). Y se precisa que, de ese modo, el paquete accionario quedará repartido de la siguiente forma: Roggio e Hijos, 26,67%; Esuco, 26,67%; Helport, 26,66% y CPC SA, 20%.
Cristóbal López se inició en la actividad empresaria en el rubro de los juegos de azar. Posee una quincena de casinos en varias provincias y en el 2004 el gobierno de Néstor Kirchner le concedió la explotación de máquinas tragamonedas en el Hipódromo de Palermo. Pero en los últimos años extendió sus actividades a varios otros rubros, entre ellos la explotación petrolera a través de Oil SA; la industria de la construcción, mediante CPC SA; y el sistema bancario.
Autovía del Mar se hizo cargo de la explotación de las rutas de la Costa el 1º de julio del año pasado, cuando le ganó la licitación a la UTE que habían conformado el grupo Eskenazi, Cartellone, Eleprint y otras empresas. La concesión fue estipulada en 30 años, con un compromiso de inversión a lo largo de ese tiempo de 8 mil millones de pesos, y un acuerdo con el gobierno provincial de aumentos paulatinos del coto de los peajes que se viene aplicando.
La red vial de la Costa concesionadas a Autovía del Mar comprende, además de las rutas 2 y 11, varios tramos de las rutas provinciales 36, 56, 63 y 74 y tiene en total una extensión de 1.150 kilómetros. El contrato establece que en el programa de obras de los primeros seis años el concesionario debe invertir $1.800 millones y que en los primeros dos años deberá repavimentar todas las vías incluidas en la red.