El último día de trabajo de la comitiva argentina en Moscú coincidió casualmente-o no-con el primer aniversario de la «reinauguración» de la Central Nuclear Néstor Kirchner-Atucha II-. Técnicamente hablando, el 3 de junio de 2014, la central que fue abandonada por más de 20 años y que en 2006 decidieron relanzar la obra, alcanzó su primera criticidad.
«La central ya cumplió un año y para mí es como un hijo que está en su primer día de clases, donde lo vimos nacer y ahora tiene que andar solo», reflexionó el presidente de Nucleoeléctrica Argentina (NA-SA), José Luis Antúnez.
En una charla distendida y con motivo de evaluación y balance, el ingeniero aseguró que Argentina está entre los diez únicos países en el mundo que manejan todos los ciclos de producción de la energía nucleay que el objetivo es exportar este tipo de conocimiento junto con Rusia y China: «El objetivo es crear una empresa conjunta con naciones avanzadas en esta materia, y exportar desarrollo al exterior.» Y dejó en claro que los posibles candidatos son Chile, Colombia y Venezuela, así como también deslizó que Uruguay podría ser el destinatario del Carem, el reactor de 25 megavatios fabricado por la Comisión Nacional de Energía Atómica, reflejó Tiempo Argentino.
Con respecto a la cuarta central nuclear, que estará hechas con financiamiento de la República Popular de China, aseguró que se construirá en el mismo predio que ocupan Atucha I y Atucha II y señaló que «se está esperando el decreto de expropiación de los terrenos. Apenas tomemos posesión de los terrenos, comenzaremos los primeros trabajos de construcción, las obras preliminares, y eso ocurrirá en el segundo semestre».
La cuarta central denominada «Proyecto Nacional» y que costará $ 32 mil millones, se encuentra en la fase preliminar, en lo que técnicamente se denomina preproyecto, para luego pasar a la próxima etapa en la que se firmarán los contratos comerciales y financieros. «Para diciembre se hará el lanzamiento de la nueva central», precisó el funcionario.
Por su parte, el ministro de Planificación Federal Julio De Vido cerró su visita con una reunión con el vicepresidente del Banco para el Desarrollo y Asuntos Económicos Exteriores de Rusia, Petr Fradkov, para ultimar los detalles sobre el financiamiento que esta institución financiera concederá a la construcción de la represa hidroeléctrica Chihuido I (ver aparte), en la provincia de Neuquén.
Además el funcionario acordó con las autoridades rusas que en dos semanas viajará una misión conjunta de su Ministerio y el de Economía a Moscú, para cerrar el contrato de financiamiento. «Se estuvo trabajando ya en la elaboración e intercambio de información en lo que hace al contrato de financiamiento de la obra que implica una serie de requerimientos, pedido de declaraciones, constitución de garantías y cuestiones relacionadas con el proyecto, como la inspección de obra que la va a hacer la Universidad Nacional de La Plata.»
Alrededor de las tres de la tarde hora local, Julio De Vido partió rumbo a Buenos Aires y todo indica que el viernes estará en Bariloche, en el Congreso anual del Grupo de Proveedores Nucleares que Argentina preside por segundo periodo consecutivo.
De Vido, tras el fondeo de Chihuido I
El financiamiento de la construcción de la represa hidroeléctrica Chihuido I avanzó ayer de la mano de las tratativas que desarrolló el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, con funcionarios y empresarios rusos en el marco del viaje que realizó desde principios de esta semana para participar de una exposición sobre temas nucleares, en Moscú.
De Vido se reunió ayer, en su última jornada en la capital rusa, con el vicepresidente del Banco para el Desarrollo y Asuntos Económicos Exteriores de Rusia, Petr Fradkov, con el objetivo de ultimar los detalles del financiamiento que esa institución concederá para la construcción de la represa. Se trata de U$S 1656 millones, el 85% del total, que son U$S 1948 millones, y que se pagarán a 20 años, con cinco de gracia, a una tasa de interés del 6,5% anual. Del encuentro también participaron representantes de Inter Rao, la empresa rusa que forma parte del consorcio que se adjudicó la construcción de Chihuido I.
De Vido precisó a los periodistas argentinos que se encuentran en el Séptimo Foro Internacional AtomExpo 2015 que concluyó ayer, que «se estuvo trabajando ya en la elaboración e intercambio de información en lo que hace al contrato de financiamiento de la obra». Explicó, además, que desde la entidad financiera le hicieron «una serie de requerimientos, pedido de declaraciones, constitución de garantías y cuestiones relacionadas con el proyecto, como la inspección de obra que la va a hacer la Universidad Nacional de La Plata». Puntualizó que las autoridades del banco ruso «requieren que la inspección de obra sea autárquica del poder administrador». El consorcio adjudicatario de Chihuido I está integrado por las empresas argentinas Helport (Grupo Eurnekian), Chediack, Panedile, Eleprint e Hidroeléctrica Ameghino; la española Isolux Ingeniería y la rusa Inter Rao, que tendrá a su cargo la financiación del proyecto.
«La central ya cumplió un año y para mí es como un hijo que está en su primer día de clases, donde lo vimos nacer y ahora tiene que andar solo», reflexionó el presidente de Nucleoeléctrica Argentina (NA-SA), José Luis Antúnez.
En una charla distendida y con motivo de evaluación y balance, el ingeniero aseguró que Argentina está entre los diez únicos países en el mundo que manejan todos los ciclos de producción de la energía nucleay que el objetivo es exportar este tipo de conocimiento junto con Rusia y China: «El objetivo es crear una empresa conjunta con naciones avanzadas en esta materia, y exportar desarrollo al exterior.» Y dejó en claro que los posibles candidatos son Chile, Colombia y Venezuela, así como también deslizó que Uruguay podría ser el destinatario del Carem, el reactor de 25 megavatios fabricado por la Comisión Nacional de Energía Atómica, reflejó Tiempo Argentino.
Con respecto a la cuarta central nuclear, que estará hechas con financiamiento de la República Popular de China, aseguró que se construirá en el mismo predio que ocupan Atucha I y Atucha II y señaló que «se está esperando el decreto de expropiación de los terrenos. Apenas tomemos posesión de los terrenos, comenzaremos los primeros trabajos de construcción, las obras preliminares, y eso ocurrirá en el segundo semestre».
La cuarta central denominada «Proyecto Nacional» y que costará $ 32 mil millones, se encuentra en la fase preliminar, en lo que técnicamente se denomina preproyecto, para luego pasar a la próxima etapa en la que se firmarán los contratos comerciales y financieros. «Para diciembre se hará el lanzamiento de la nueva central», precisó el funcionario.
Por su parte, el ministro de Planificación Federal Julio De Vido cerró su visita con una reunión con el vicepresidente del Banco para el Desarrollo y Asuntos Económicos Exteriores de Rusia, Petr Fradkov, para ultimar los detalles sobre el financiamiento que esta institución financiera concederá a la construcción de la represa hidroeléctrica Chihuido I (ver aparte), en la provincia de Neuquén.
Además el funcionario acordó con las autoridades rusas que en dos semanas viajará una misión conjunta de su Ministerio y el de Economía a Moscú, para cerrar el contrato de financiamiento. «Se estuvo trabajando ya en la elaboración e intercambio de información en lo que hace al contrato de financiamiento de la obra que implica una serie de requerimientos, pedido de declaraciones, constitución de garantías y cuestiones relacionadas con el proyecto, como la inspección de obra que la va a hacer la Universidad Nacional de La Plata.»
Alrededor de las tres de la tarde hora local, Julio De Vido partió rumbo a Buenos Aires y todo indica que el viernes estará en Bariloche, en el Congreso anual del Grupo de Proveedores Nucleares que Argentina preside por segundo periodo consecutivo.
De Vido, tras el fondeo de Chihuido I
El financiamiento de la construcción de la represa hidroeléctrica Chihuido I avanzó ayer de la mano de las tratativas que desarrolló el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, con funcionarios y empresarios rusos en el marco del viaje que realizó desde principios de esta semana para participar de una exposición sobre temas nucleares, en Moscú.
De Vido se reunió ayer, en su última jornada en la capital rusa, con el vicepresidente del Banco para el Desarrollo y Asuntos Económicos Exteriores de Rusia, Petr Fradkov, con el objetivo de ultimar los detalles del financiamiento que esa institución concederá para la construcción de la represa. Se trata de U$S 1656 millones, el 85% del total, que son U$S 1948 millones, y que se pagarán a 20 años, con cinco de gracia, a una tasa de interés del 6,5% anual. Del encuentro también participaron representantes de Inter Rao, la empresa rusa que forma parte del consorcio que se adjudicó la construcción de Chihuido I.
De Vido precisó a los periodistas argentinos que se encuentran en el Séptimo Foro Internacional AtomExpo 2015 que concluyó ayer, que «se estuvo trabajando ya en la elaboración e intercambio de información en lo que hace al contrato de financiamiento de la obra». Explicó, además, que desde la entidad financiera le hicieron «una serie de requerimientos, pedido de declaraciones, constitución de garantías y cuestiones relacionadas con el proyecto, como la inspección de obra que la va a hacer la Universidad Nacional de La Plata». Puntualizó que las autoridades del banco ruso «requieren que la inspección de obra sea autárquica del poder administrador». El consorcio adjudicatario de Chihuido I está integrado por las empresas argentinas Helport (Grupo Eurnekian), Chediack, Panedile, Eleprint e Hidroeléctrica Ameghino; la española Isolux Ingeniería y la rusa Inter Rao, que tendrá a su cargo la financiación del proyecto.