El consumo de gas residencial cayó 11,1% el año pasado, según cifras del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas). Es la mayor baja interanual registrada desde que el organismo regulador comenzó la serie estadística en 1993. Gas Natural Ban, que presta servicio en treinta distritos del oeste y norte del Gran Buenos Aires, registró el mayor impacto con una caída de 18,1%, mientras que en el área de Metrogas, que abastece a la Ciudad de Buenos Aires y al sur del conurbano, el retroceso fue del 16,8%. Si bien las temperaturas de 2017 estuvieron por encima del promedio histórico, la causa principal del menor consumo fue el fuerte aumento de tarifas que entró en vigencia en el segundo semestre de 2016.
El gerente de Tarifas y Análisis Comercial de Metrogas, José Luis Fernández, reconoció en la audiencia pública realizada el jueves 22 de febrero que el menor consumo tuvo relación directa con el tarifazo. “En el año 2017 lo que observamos a partir de la implementación de la revisión tarifaria y del sendero de precios establecido por el Ministerio de Energía, es que el consumo se redujo, más allá del efecto de la temperatura, un 14%. Por supuesto, la reducción fue mayor porque fue un invierno más benigno. Es decir, si se hubieran mantenido las temperaturas de otros inviernos, la reducción hubiera sido del 14%. Esto implica que hubo un cambio en el comportamiento de los hogares tratando de consumir menos de este recurso no renovable. Eso provoca que los consumidores pasen a categorías más bajas donde el valor por metro cúbico de lo que consumen es de menor cuantía”, aseguró.
Metrogas es la distribuidora más chica si se toma en cuenta la superficie que abastece, pero al mismo tiempo es el área más densamente poblada del país, al incluir la Capital Federal y los distritos de Avellaneda, Lanús, Quilmes, Berazategui, Florencio Varela, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Presidente Perón, San Vicente, Esteban Echeverría y Ezeiza. Cubre 2150 kilómetros cuadrados y en diciembre del año pasado tenía 2,3 millones de usuarios residenciales, un 0,5% más que un año antes.
Gas Natural Ban, la otra distribuidora del Área Metropolitana de Buenos Aires, incrementó sus clientes casi un 1% en el último año llegando a 1.5773.331 hogares, pero su consumo se derrumbó un 18,1%. Las temperaturas que debieron afrontar los clientes de esta distribuidora fueron prácticamente las mismas que la de los clientes de Metrogas. Por lo tanto, se puede inferir que una parte sustancial del retroceso obedece al impacto que generó el nuevo cuadro tarifario.
De las otras siete distribuidoras que brindan servicio en el resto del país, seis también registraron fuertes caídas en el consumo. La empresa Litoral Gas, que brinda servicio en Santa Fe y el noreste de la provincia de Buenos Aires, incrementó su base de clientes un 1,4% el último año, pero el consumo retrocedió 17,5%. En esta zona se registraron aumentos de hasta 150% entre el invierno de 2017 y 2016, por debajo de las subas aplicadas en Capital Federal y Gran Buenos Aires, pero, como la base a partir de la que se aplicaron los nuevos ajustes era más alta, en términos absolutos el impacto fue difícil de afrontar para miles de usuarios.
Distribuidora Gas del Centro, que brinda servicio en Córdoba, Catamarca y La Rioja, también registró un incremento que llegó a casi 1% porcentual en su base de usuarios durante el año pasado, pero el consumo se retrajo un 17,1%. Distribuidora de Gas Cuyana incrementó sus clientes 1,1% y también mostró una caída en el consumo, pero de 10,7%, apenas por debajo del promedio.
Gas NEA, que brinda gas natural en Entre Ríos, Corrientes, Formosa, Chaco y Misiones, sumó un 4,9% de clientes en 2017, el mayor incremento registrado entre todas las distribuidoras, pero el consumo residencial cayó 14%. Por su parte, Gasnor, presente en Tucumán, Salta, Jujuy y Santiago del Estero, sumó un 1,8% de clientes y el consumo de los hogares bajó 7,1%.
Camuzzi Gas Pampeana, que distribuye gas en gran parte del interior de la provincia de Buenos Aires y en La Pampa, el año pasado sumó 1,2% de clientes, pero el consumo residencial cayó 10,4%. Por último, queda Camuzzi Gas del Sur que está presente en el extremo sur de la provincia de Buenos Aires y en Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego. Sorpresivamente, los clientes residenciales de esta distribuidora fueron los únicos que incrementaron su consumo el año pasado (1,4%), aunque su base de clientes trepó 1,8%, levemente por encima de esa suba.
El gerente de Tarifas y Análisis Comercial de Metrogas, José Luis Fernández, reconoció en la audiencia pública realizada el jueves 22 de febrero que el menor consumo tuvo relación directa con el tarifazo. “En el año 2017 lo que observamos a partir de la implementación de la revisión tarifaria y del sendero de precios establecido por el Ministerio de Energía, es que el consumo se redujo, más allá del efecto de la temperatura, un 14%. Por supuesto, la reducción fue mayor porque fue un invierno más benigno. Es decir, si se hubieran mantenido las temperaturas de otros inviernos, la reducción hubiera sido del 14%. Esto implica que hubo un cambio en el comportamiento de los hogares tratando de consumir menos de este recurso no renovable. Eso provoca que los consumidores pasen a categorías más bajas donde el valor por metro cúbico de lo que consumen es de menor cuantía”, aseguró.
Metrogas es la distribuidora más chica si se toma en cuenta la superficie que abastece, pero al mismo tiempo es el área más densamente poblada del país, al incluir la Capital Federal y los distritos de Avellaneda, Lanús, Quilmes, Berazategui, Florencio Varela, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Presidente Perón, San Vicente, Esteban Echeverría y Ezeiza. Cubre 2150 kilómetros cuadrados y en diciembre del año pasado tenía 2,3 millones de usuarios residenciales, un 0,5% más que un año antes.
Gas Natural Ban, la otra distribuidora del Área Metropolitana de Buenos Aires, incrementó sus clientes casi un 1% en el último año llegando a 1.5773.331 hogares, pero su consumo se derrumbó un 18,1%. Las temperaturas que debieron afrontar los clientes de esta distribuidora fueron prácticamente las mismas que la de los clientes de Metrogas. Por lo tanto, se puede inferir que una parte sustancial del retroceso obedece al impacto que generó el nuevo cuadro tarifario.
De las otras siete distribuidoras que brindan servicio en el resto del país, seis también registraron fuertes caídas en el consumo. La empresa Litoral Gas, que brinda servicio en Santa Fe y el noreste de la provincia de Buenos Aires, incrementó su base de clientes un 1,4% el último año, pero el consumo retrocedió 17,5%. En esta zona se registraron aumentos de hasta 150% entre el invierno de 2017 y 2016, por debajo de las subas aplicadas en Capital Federal y Gran Buenos Aires, pero, como la base a partir de la que se aplicaron los nuevos ajustes era más alta, en términos absolutos el impacto fue difícil de afrontar para miles de usuarios.
Distribuidora Gas del Centro, que brinda servicio en Córdoba, Catamarca y La Rioja, también registró un incremento que llegó a casi 1% porcentual en su base de usuarios durante el año pasado, pero el consumo se retrajo un 17,1%. Distribuidora de Gas Cuyana incrementó sus clientes 1,1% y también mostró una caída en el consumo, pero de 10,7%, apenas por debajo del promedio.
Gas NEA, que brinda gas natural en Entre Ríos, Corrientes, Formosa, Chaco y Misiones, sumó un 4,9% de clientes en 2017, el mayor incremento registrado entre todas las distribuidoras, pero el consumo residencial cayó 14%. Por su parte, Gasnor, presente en Tucumán, Salta, Jujuy y Santiago del Estero, sumó un 1,8% de clientes y el consumo de los hogares bajó 7,1%.
Camuzzi Gas Pampeana, que distribuye gas en gran parte del interior de la provincia de Buenos Aires y en La Pampa, el año pasado sumó 1,2% de clientes, pero el consumo residencial cayó 10,4%. Por último, queda Camuzzi Gas del Sur que está presente en el extremo sur de la provincia de Buenos Aires y en Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego. Sorpresivamente, los clientes residenciales de esta distribuidora fueron los únicos que incrementaron su consumo el año pasado (1,4%), aunque su base de clientes trepó 1,8%, levemente por encima de esa suba.