Argentina
Gobierno espera ingreso de agrodólares para liberar compras y desalentar el dólar ‘blue’
El BCRA actuará sobre exportadores y la AFIP controlará venta ilegal de divisas
Se mantendrá la presión sobre los importadores para garantizar el saldo de dólares comerciales
El Gobierno oficializará el dato de los ingresos de la balanza comercial, que sumó más de u$s4.700 millones en el primer cuatrimestre del año. A la espera de la liquidación de divisas por parte de los exportadores se prevé que se relaje el cepo minorista para la compra de divisa extranjera para evitar que se amplíe la brecha entre el dólar oficial y el paralelo, que la semana pasada llegó al 25 por ciento.
Para esto, habrá más controles a las importaciones, con intervención de nuevas áreas del Gobierno y revisión también de circuitos como shoppings y comercios, que aceptan el pago en dólares, para cerrar el cerco sobre el “blue”.
La mayor liquidación de divisas por parte del campo hizo que la recaudación por retenciones creciera un 53% en abril y se esperan nuevos desembolsos para mayo, aunque en algunos sectores del campo indicaron que podrían retrasarlos como respuesta, entre otras medidas, a la revaluación del impuesto inmobiliario bonaerense.
La presión a los exportadores quedó evidenciada con la medida que obligaba a liquidar divisas en quince días, sobre la que hubo que dar marcha atrás para las empresas que venden al exterior por menos de u$s2 millones.
En tanto, la Administración Federal de Ingresos Públicos –a cargo de la fòrmula que delimita el poder de compra de moneda extranjera– comenzó a relajar sobre final de semana la posibilidad de acceder –a cuentagotas– a los dólares en el caso de los empleados registrados, mientras que aumentó los controles en la city para evitar la venta callejera. El Gobierno intenta asì cerrar la brecha entre el dólar paralelo y el oficial, en medio de un coro de economistas que señala la pérdida de competitividad del peso.
“Resulta paradójico que se hayan acentuado las restricciones cuando en los primeros cuatro meses del año el superávit comercial se duplicó, la salida de capitales se redujo significativamente y el BCRA volvió a acumular reservas”, evaluó por su parte un informe de la consultora Ecolatina, fundada por el ex ministro de Economía, Roberto Lavagna.
“Sin embargo, el Gobierno está actuando de forma ‘preventiva’, anticipándose a la dinámica cambiaria del segundo semestre. En el último trimestre del año se percibirán menos del 20% de la liquidación de divisas, mientras que se concentrará el 43% de los pagos de deuda pública en moneda extranjera”, destacó la consultora.
Demanda. El Gobierno mantiene mientras tanto la atención puesta en la evolución de los precios internos y el impacto que puede tener los recientes acuerdos salariales firmados, en un rango de 24%, empleados de comercios y 23% metalúrgicos y bancarios.
El intento oficial es que los acuerdos de paritarias, los más importantes que se cerraron a lo largo del año, no se trasladen a los precios y genera nuevas expectativas de devaluación que se incrementaron con la escalada del dólar paralelo, que llegó a picos de 5,80 la semana pasada en la City porteña.
“La combinación de política monetaria y fiscal expansiva, salarios crecientes e insuficiente inversión aceleraron el aumento del nivel general de precios; y el tipo de cambio real o dólar caro se fue erosionando”, advirtió un informe de Economía y Regiones que considera que el tipo de cambio real se apreció casi un 40% entre 2007 y 2011.
“Las políticas fiscales, monetarias expansivas y salariales contrarrestaron los efectos negativos del abaratamiento del dólar en materia de nivel de actividad”, sostuvo la consultora dirigida por Alejandro Caldarelli. “Muy probablemente la actual administración no estaría predispuesta a volver a un esquema de tipo de cambio único y no estaría convencida de aplicar una devaluación uniforme porque, según su punto de vista, podría acelerar la velocidad del incremento del nivel general de precios”, agregó el informe.
Ecolatina, en tanto, advirtió que las restricciones para comprar dólares generó una mayor liquidez en pesos que no encuentra tasas que compensen las expectativas de devaluación. La liquidez presiona a la baja a las tasas “que puede ser favorable para el crédito pero, en este contexto, puede generar tensiones adicionales en el mercado de cambios”, provocando una mayor demanda de dólares.
Gobierno espera ingreso de agrodólares para liberar compras y desalentar el dólar ‘blue’
El BCRA actuará sobre exportadores y la AFIP controlará venta ilegal de divisas
Se mantendrá la presión sobre los importadores para garantizar el saldo de dólares comerciales
El Gobierno oficializará el dato de los ingresos de la balanza comercial, que sumó más de u$s4.700 millones en el primer cuatrimestre del año. A la espera de la liquidación de divisas por parte de los exportadores se prevé que se relaje el cepo minorista para la compra de divisa extranjera para evitar que se amplíe la brecha entre el dólar oficial y el paralelo, que la semana pasada llegó al 25 por ciento.
Para esto, habrá más controles a las importaciones, con intervención de nuevas áreas del Gobierno y revisión también de circuitos como shoppings y comercios, que aceptan el pago en dólares, para cerrar el cerco sobre el “blue”.
La mayor liquidación de divisas por parte del campo hizo que la recaudación por retenciones creciera un 53% en abril y se esperan nuevos desembolsos para mayo, aunque en algunos sectores del campo indicaron que podrían retrasarlos como respuesta, entre otras medidas, a la revaluación del impuesto inmobiliario bonaerense.
La presión a los exportadores quedó evidenciada con la medida que obligaba a liquidar divisas en quince días, sobre la que hubo que dar marcha atrás para las empresas que venden al exterior por menos de u$s2 millones.
En tanto, la Administración Federal de Ingresos Públicos –a cargo de la fòrmula que delimita el poder de compra de moneda extranjera– comenzó a relajar sobre final de semana la posibilidad de acceder –a cuentagotas– a los dólares en el caso de los empleados registrados, mientras que aumentó los controles en la city para evitar la venta callejera. El Gobierno intenta asì cerrar la brecha entre el dólar paralelo y el oficial, en medio de un coro de economistas que señala la pérdida de competitividad del peso.
“Resulta paradójico que se hayan acentuado las restricciones cuando en los primeros cuatro meses del año el superávit comercial se duplicó, la salida de capitales se redujo significativamente y el BCRA volvió a acumular reservas”, evaluó por su parte un informe de la consultora Ecolatina, fundada por el ex ministro de Economía, Roberto Lavagna.
“Sin embargo, el Gobierno está actuando de forma ‘preventiva’, anticipándose a la dinámica cambiaria del segundo semestre. En el último trimestre del año se percibirán menos del 20% de la liquidación de divisas, mientras que se concentrará el 43% de los pagos de deuda pública en moneda extranjera”, destacó la consultora.
Demanda. El Gobierno mantiene mientras tanto la atención puesta en la evolución de los precios internos y el impacto que puede tener los recientes acuerdos salariales firmados, en un rango de 24%, empleados de comercios y 23% metalúrgicos y bancarios.
El intento oficial es que los acuerdos de paritarias, los más importantes que se cerraron a lo largo del año, no se trasladen a los precios y genera nuevas expectativas de devaluación que se incrementaron con la escalada del dólar paralelo, que llegó a picos de 5,80 la semana pasada en la City porteña.
“La combinación de política monetaria y fiscal expansiva, salarios crecientes e insuficiente inversión aceleraron el aumento del nivel general de precios; y el tipo de cambio real o dólar caro se fue erosionando”, advirtió un informe de Economía y Regiones que considera que el tipo de cambio real se apreció casi un 40% entre 2007 y 2011.
“Las políticas fiscales, monetarias expansivas y salariales contrarrestaron los efectos negativos del abaratamiento del dólar en materia de nivel de actividad”, sostuvo la consultora dirigida por Alejandro Caldarelli. “Muy probablemente la actual administración no estaría predispuesta a volver a un esquema de tipo de cambio único y no estaría convencida de aplicar una devaluación uniforme porque, según su punto de vista, podría acelerar la velocidad del incremento del nivel general de precios”, agregó el informe.
Ecolatina, en tanto, advirtió que las restricciones para comprar dólares generó una mayor liquidez en pesos que no encuentra tasas que compensen las expectativas de devaluación. La liquidez presiona a la baja a las tasas “que puede ser favorable para el crédito pero, en este contexto, puede generar tensiones adicionales en el mercado de cambios”, provocando una mayor demanda de dólares.