El BNY Mellon, en problemas con la ciudad de Los Angeles. Foto: Reuters
LOS ANGELES.- La ciudad de Los Angeles está en plena disputa con dos importantes bancos en Estados Unidos. Este mes, el Consejo aprobó por unanimidad una medida que exige a sus acreedores, el Bank of New York Mellon y el Dexia, renegociar la deuda o dar por terminados los llamados acuerdos de intercambio de tasas de interés que tienen con ellos, y en caso de no lograrlo, analizan judicializar el caso.
Según el diario local Los Angeles Times, el Consejo de la ciudad de los Angeles votó el 13 de agosto último una medida «para pedir a los negociadores de la ciudad que presionen al Bank of Nueva York (BNY) Mellon y Dexia para que reestructuren o cancelen los llamados acuerdos de intercambio de tasas de interés sin costo para la ciudad, y que analicen si la ciudad podría demandar a los bancos si se resisten».
«Si los bancos se niegan, la ciudad analizará terminar todo el negocio actual con los bancos y su exclusión de futuros negocios», agrega el diario, respecto de la medida adoptada por unanimidad sobre el contrato de un «swap» entablado entre las partes en el 2006, por un valor de 151 millones de dólares.
La ciudad exige al BNY Mellon, que era agente de pago de la Argentina, y al Dexia que les devuelvan 65 millones de dólares en lo que los concejales llamaron «beneficios y cargos injustos pagados desde 2008 sobre la deuda de los trabajos de alcantarillado», según la agencia económica Bloomberg.
Uno de los 14 concejales, Paul Koretz, afirmó que los bancos se han beneficiado «injustamente» porque los acuerdos «encerraron a la ciudad con tasas de interés que son más altas que las disponibles ahora, gracias a los esfuerzos de la Reserva Federal de estimular la economía» tras la crisis financiera de 2008.
«Necesitamos que Wall Street rinda sus cuentas, y le demostremos que somos muy grandes para ignorarnos», dijo Koretz antes de votar.
Qué pasó
En 2006 la ciudad, la segunda más grande de Estados Unidos, emitió bonos para obras de alcantarillado, que incluían un «swap», donde si la tasa de interés de referencia resultaba mayor al 3,34%, los bancos debían pagarle a la ciudad la diferencia.
En cambio, si la tasa resultaba menor a ese número, la ciudad tendría que pagar los bancos la diferencia.
Debido a que las tasas de interés cayeron en picada, la ciudad pagó a los bancos u$s 46.8 millones desde 2006 por este concepto.
En 2012, la ciudad pagó 8,1 millones de dólares a los tenedores de bonos y u$s 4.8 millones en los swaps.
Los sindicatos llevan adelante una campaña para que la ciudad invierta el dinero destinado a los bancos en gasto público. «Inviertan en nuestras calles, no en Wall Street», les reclamaron a los funcionarios en un reporte realizado en marzo pasado.
Sin embargo, el jefe administrativo de la ciudad, Miguel Santana, aclaró que «ni un dólar» ahorrado por estos «swaps» podría destinarse a las arcas de la ciudad.
«Este dinero no se pueden usar para pagar a los oficiales de policía, o para hacer calles o podar árboles», dijo Santana en la reunión donde tuvo lugar la votación. «Va en contra de la ley», agregó, ya que ese dinero debe destinarse sólo a los bonos asociados con los acuerdos.
Santana se reunió con representantes del Bank of New York Mellon y Dexia en junio, según él mismo reportó en un memo. En ese momento, el funcionario comentó que «Dexia estuvo dispuesto a una renegociación, aunque un importante descuento era poco probable» pero que el «BNY Mellon no estaría de acuerdo en rescindir el contrato sin costo alguno».
Según los funcionarios de presupuesto, dar por concluido el acuerdo le costaría a la ciudad 24,7 millones de dólares. Los analistas citados por L.A. Times comentaron que el pago de esos honorarios no tiene sentido económico..
LOS ANGELES.- La ciudad de Los Angeles está en plena disputa con dos importantes bancos en Estados Unidos. Este mes, el Consejo aprobó por unanimidad una medida que exige a sus acreedores, el Bank of New York Mellon y el Dexia, renegociar la deuda o dar por terminados los llamados acuerdos de intercambio de tasas de interés que tienen con ellos, y en caso de no lograrlo, analizan judicializar el caso.
Según el diario local Los Angeles Times, el Consejo de la ciudad de los Angeles votó el 13 de agosto último una medida «para pedir a los negociadores de la ciudad que presionen al Bank of Nueva York (BNY) Mellon y Dexia para que reestructuren o cancelen los llamados acuerdos de intercambio de tasas de interés sin costo para la ciudad, y que analicen si la ciudad podría demandar a los bancos si se resisten».
«Si los bancos se niegan, la ciudad analizará terminar todo el negocio actual con los bancos y su exclusión de futuros negocios», agrega el diario, respecto de la medida adoptada por unanimidad sobre el contrato de un «swap» entablado entre las partes en el 2006, por un valor de 151 millones de dólares.
La ciudad exige al BNY Mellon, que era agente de pago de la Argentina, y al Dexia que les devuelvan 65 millones de dólares en lo que los concejales llamaron «beneficios y cargos injustos pagados desde 2008 sobre la deuda de los trabajos de alcantarillado», según la agencia económica Bloomberg.
Uno de los 14 concejales, Paul Koretz, afirmó que los bancos se han beneficiado «injustamente» porque los acuerdos «encerraron a la ciudad con tasas de interés que son más altas que las disponibles ahora, gracias a los esfuerzos de la Reserva Federal de estimular la economía» tras la crisis financiera de 2008.
«Necesitamos que Wall Street rinda sus cuentas, y le demostremos que somos muy grandes para ignorarnos», dijo Koretz antes de votar.
Qué pasó
En 2006 la ciudad, la segunda más grande de Estados Unidos, emitió bonos para obras de alcantarillado, que incluían un «swap», donde si la tasa de interés de referencia resultaba mayor al 3,34%, los bancos debían pagarle a la ciudad la diferencia.
En cambio, si la tasa resultaba menor a ese número, la ciudad tendría que pagar los bancos la diferencia.
Debido a que las tasas de interés cayeron en picada, la ciudad pagó a los bancos u$s 46.8 millones desde 2006 por este concepto.
En 2012, la ciudad pagó 8,1 millones de dólares a los tenedores de bonos y u$s 4.8 millones en los swaps.
Los sindicatos llevan adelante una campaña para que la ciudad invierta el dinero destinado a los bancos en gasto público. «Inviertan en nuestras calles, no en Wall Street», les reclamaron a los funcionarios en un reporte realizado en marzo pasado.
Sin embargo, el jefe administrativo de la ciudad, Miguel Santana, aclaró que «ni un dólar» ahorrado por estos «swaps» podría destinarse a las arcas de la ciudad.
«Este dinero no se pueden usar para pagar a los oficiales de policía, o para hacer calles o podar árboles», dijo Santana en la reunión donde tuvo lugar la votación. «Va en contra de la ley», agregó, ya que ese dinero debe destinarse sólo a los bonos asociados con los acuerdos.
Santana se reunió con representantes del Bank of New York Mellon y Dexia en junio, según él mismo reportó en un memo. En ese momento, el funcionario comentó que «Dexia estuvo dispuesto a una renegociación, aunque un importante descuento era poco probable» pero que el «BNY Mellon no estaría de acuerdo en rescindir el contrato sin costo alguno».
Según los funcionarios de presupuesto, dar por concluido el acuerdo le costaría a la ciudad 24,7 millones de dólares. Los analistas citados por L.A. Times comentaron que el pago de esos honorarios no tiene sentido económico..