La frazada queda corta, Maximiliano Montenegro, Crítica.
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Acerca de Patricio
Patricio es profesor universitario de sociología. Trabaja sobre desigualdad y movimientos sociales. Se crió en un conventillo de la calle Olavarría, pero toda su vida ha sido hincha de River.
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«Desde esta columna contamos, hace un año, cómo proliferaron durante la era kirchnerista los climatizadores de piscinas en Nordelta y otros suntuosos barrios privados, o los reflectores de 1.000 watts gracias a las tarifas subsidadas de luz y gas.»
Bueno, Maxi, los vecinos de Massita son propia tropa en la batalla contra la » ay, como la odio» clase media de Caballito.
El hecho de haber pagado subsidios para que no aumentaran las tarifas, era el de motivar a que las clases medias (no sólo las medias altas, las medias bajas, y las medias medias, también), dispusieran de más guita en el bolsillo para gastar y mantener así el nivel de consumo que le dio trabajo a un 20% de la población en 4 años. Que las tarifas aumentaran significaba revertir en parte este proceso (era, junto a medidas en la misma dirección, enfriar la economía, como pedía la oposición).
Tal vez haya sido un criterio equivocado, se puede argumentar en ese sentido. En mi caso, sostuve durante bastante tiempo la idea de hacer un ajuste tarifario diferenciado (similar al que se terminó haciendo dos años después) como forma de operar en el desinfle de precios.
Pero, sugerir que no se hizo porque había algún interés de «amiguismo», es una canallada que describe muy bien a quien firma el artículo.
Es una lástima, porque realmente es un muchacho muy capaz. De hecho, este artículo es muy bueno. Lástima la mala leche en ese tema puntual.
Saludos
La crítica es válida, pero estoy de acuerdo con Mariano en que no se hizo por amiguismo. Los Kirchner o Massa no tienen ningún problema en pagar la electricidad o el agua más cara, son millonarios.
De paso, A Nordelta hay que quitarle el estatus de localidad de Tigre, eso es una ridiculez.
No es una localidad, es un barrio privado, yo no puedo entrar ahí.