España no cumplirá sus previsiones de déficit y su economía sufrirá dos largos años de recesión, según pronostica la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en su informe semestral publicado hoy en París. En 2012, el PIB español se reducirá en un 1,6% y la contracción pasará a ser de ocho décimas en 2013 a consecuencia del impacto sobre la demanda doméstica de “las medidas de consolidación fiscal y del proceso de desapalancamiento del sector privado”, dice la OCDE, que advierte de que las previsiones podrían empeorar en función de la evolución de la prima de riesgo y su efecto sobre los costes de financiación privada.
La OCDE se muestra favorable a un pacto de crecimiento para Europa, critica las políticas de excesiva consolidación presupuestaria, y aboga por el lanzamiento de eurobonos —títulos de deuda mutualizada de los socios del euro— para «recapitalizar los bancos y mejorar el acceso al crédito». Los eurobonos son una iniciativa que el presidente francés, François Hollande, y el primer ministro italiano, Mario Monti, planean defender mañana durante la cumbre de la Eurozona y a la que se opone la canciller Angela Merkel.
El informe mete además presión sobre Alemania al alertar de la peligrosa situación que vive Europa “con un endeudamiento alto y creciente, frágiles sistemas bancarios, una excesiva consolidación fiscal y bajo crecimiento”. Pier Carlo Padoan, el economista jefe de la OCDE, afirma que el agravamiento de la crisis de la zona euro “es la fuente más importante de riesgo para la economía mundial” y estima que “los desequilibrios estructurales” entre los diferentes países, que están en el origen de esa crisis, “solo han empezado a absorberse”.
Padoan cree que, para crecer más, Europa debe mejorar “la débil competitividad de los países con déficit” y “ajustar los salarios más altos” en los Estados que crecen. Además, anima al Banco Central Europeo a seguir adelante con su programa de compra de deuda en los mercados. Los recursos, concluye el economista jefe, “deben ser consagrados a los segmentos más frágiles de la población”.
A la espera de algún cambio en la política europea, la OCDE rebaja las previsiones económicas para la zona euro, tanto para este año como para el próximo, y advierte de un incremento de los riesgos “por el desencadenamiento de un círculo vicioso recesivo”. La zona euro, de hecho, se contraerá un 0,1% en 2012, frente al 0,6% previsto en noviembre pasado, y un 1,3% en 2013, en lugar del 1,7%.
Sobre España, la institución con sede en París estima en su informe Perspectivas económicas mundiales que la expansión del comercio internacional y la mejora de la competitividad permitirán “un crecimiento más fuerte de las exportaciones”, pero esa es casi la única buena noticia para el Gobierno de Mariano Rajoy.
Según la OCDE, a pesar del esfuerzo de consolidación puesto en marcha por el Gobierno —que la institución cifra en un recorte del déficit de 4,5 puntos porcentuales este año y de 2,75 el que viene—, España no logrará cumplir los objetivos de déficit marcados por Bruselas. En 2012, el desequilibrio será del 5,4%, una décima más de lo requerido, y en 2013 del 3,3%, tres décimas por encima del límite pactado con la UE, afirma la OCDE.
Sobre el desempleo, el Club de los países ricos augura que la tasa de paro en España escalará hasta el 24,5% en 2012 y subirá al 25,3% el año que viene, ya que, a su juicio, la reciente reforma laboral “sólo impulsará la creación de puestos de trabajo en el medio plazo”. Por el lado contrario afirma que a corto plazo puede provocar “una caída de la confianza de los consumidores”.
En Europa, la peor situación es la de Grecia, que afrontará en 2012 su quinto año consecutivo de recesión con un nuevo bajón del PIB del 5,3%. A esta caída seguirá otro descenso del 1,3% en 2013.
Francia, sin embargo, podría crecer el 0,6% este año, un dato que duplica la prudente estimación del 0,3% dada en noviembre pasado. La previsión se acerca mucho a la que maneja el presidente Hollande, que prevé un crecimiento del 0,5% en 2012. En 2013, la segunda economía del euro crecería un 1,2%, una cifra inferior a la que espera el equipo del nuevo jefe del Estado francés (1,5%). La OCDE es más optimista sobre los Estados Unidos, que debería crecer un 2,4% este año y un 2,6% en 2013, una décima más de lo que estimaba hace unos meses.
La OCDE se muestra favorable a un pacto de crecimiento para Europa, critica las políticas de excesiva consolidación presupuestaria, y aboga por el lanzamiento de eurobonos —títulos de deuda mutualizada de los socios del euro— para «recapitalizar los bancos y mejorar el acceso al crédito». Los eurobonos son una iniciativa que el presidente francés, François Hollande, y el primer ministro italiano, Mario Monti, planean defender mañana durante la cumbre de la Eurozona y a la que se opone la canciller Angela Merkel.
El informe mete además presión sobre Alemania al alertar de la peligrosa situación que vive Europa “con un endeudamiento alto y creciente, frágiles sistemas bancarios, una excesiva consolidación fiscal y bajo crecimiento”. Pier Carlo Padoan, el economista jefe de la OCDE, afirma que el agravamiento de la crisis de la zona euro “es la fuente más importante de riesgo para la economía mundial” y estima que “los desequilibrios estructurales” entre los diferentes países, que están en el origen de esa crisis, “solo han empezado a absorberse”.
Padoan cree que, para crecer más, Europa debe mejorar “la débil competitividad de los países con déficit” y “ajustar los salarios más altos” en los Estados que crecen. Además, anima al Banco Central Europeo a seguir adelante con su programa de compra de deuda en los mercados. Los recursos, concluye el economista jefe, “deben ser consagrados a los segmentos más frágiles de la población”.
A la espera de algún cambio en la política europea, la OCDE rebaja las previsiones económicas para la zona euro, tanto para este año como para el próximo, y advierte de un incremento de los riesgos “por el desencadenamiento de un círculo vicioso recesivo”. La zona euro, de hecho, se contraerá un 0,1% en 2012, frente al 0,6% previsto en noviembre pasado, y un 1,3% en 2013, en lugar del 1,7%.
Sobre España, la institución con sede en París estima en su informe Perspectivas económicas mundiales que la expansión del comercio internacional y la mejora de la competitividad permitirán “un crecimiento más fuerte de las exportaciones”, pero esa es casi la única buena noticia para el Gobierno de Mariano Rajoy.
Según la OCDE, a pesar del esfuerzo de consolidación puesto en marcha por el Gobierno —que la institución cifra en un recorte del déficit de 4,5 puntos porcentuales este año y de 2,75 el que viene—, España no logrará cumplir los objetivos de déficit marcados por Bruselas. En 2012, el desequilibrio será del 5,4%, una décima más de lo requerido, y en 2013 del 3,3%, tres décimas por encima del límite pactado con la UE, afirma la OCDE.
Sobre el desempleo, el Club de los países ricos augura que la tasa de paro en España escalará hasta el 24,5% en 2012 y subirá al 25,3% el año que viene, ya que, a su juicio, la reciente reforma laboral “sólo impulsará la creación de puestos de trabajo en el medio plazo”. Por el lado contrario afirma que a corto plazo puede provocar “una caída de la confianza de los consumidores”.
En Europa, la peor situación es la de Grecia, que afrontará en 2012 su quinto año consecutivo de recesión con un nuevo bajón del PIB del 5,3%. A esta caída seguirá otro descenso del 1,3% en 2013.
Francia, sin embargo, podría crecer el 0,6% este año, un dato que duplica la prudente estimación del 0,3% dada en noviembre pasado. La previsión se acerca mucho a la que maneja el presidente Hollande, que prevé un crecimiento del 0,5% en 2012. En 2013, la segunda economía del euro crecería un 1,2%, una cifra inferior a la que espera el equipo del nuevo jefe del Estado francés (1,5%). La OCDE es más optimista sobre los Estados Unidos, que debería crecer un 2,4% este año y un 2,6% en 2013, una décima más de lo que estimaba hace unos meses.