21/12/12
El movimiento empresario argentino ratificó su unidad, ante los intentos de la Casa Rosada de quebrar la representación de los hombres de negocios. También revalidó a su conducción, confirmando por completo el liderazgo de la poderosa Asociación Empresaria Argentina (AEA).
Jaime Campos fue reelecto titular de la entidad y lo acompañará una mesa de conducción integrada por los principales referentes privados de la Argentina. La ratificación plena le pone un freno a las intenciones políticas de la Casa Rosada de fracturar el frente empresario , para llevar adelante sus operaciones contra los hombres de negocios.
Ya el Gobierno había intentado una movida similar en la Unión Industrial, pero la conducción de Ignacio de Mendiguren hizo capotar el proyecto y una ofensiva que llevaba el sello de Guillermo Moreno.
La decisión de AEA fue adoptada en la reciente asamblea. Ayer, la expropiación del predio de La Rural apuntaló un punto central del encuentro: el nuevo rechazo a la intromisión del Gobierno en los contratos privados. Otro consistió en avalar expresamente la independencia de la Justicia .
Durante un debate amplio, abundaron las críticas a la reforma del Mercado de Capitales y a la medida de habilitar la intervención de empresas, sin juicio previo , por parte de la Comisión Nacional de Valores. Sobre ese punto, Campos dijo: ” Un marco institucional republicano sólido es condición indispensable para el desarrollo .” Participaron de la asamblea los cincuenta principales líderes empresarios del país. La coyuntura económica no integró la agenda formal, pero se coló en los diálogos. Cristiano Rattazzi, el titular de Fiat, repitió: “Argentina tiene un problema serio con la inflación.” Y agregó: “ La inflación le hizo perder competitividad a la economía y el cepo nos hará crecer menos.
” Avaló la postura de Paolo Rocca, quien en un encuentro de Techint afirmó: “Argentina crece menos y perdió competitividad.” En la Unión Industrial también tocaron el tema y, en privado, no anduvieron con eufemismos: para los industriales, este desfasaje es fruto de la inadecuada política cambiaria de Cristina Kirchner, que modificó el tipo de cambio alto de Néstor Kirchner .
En el bienio 2010/11, Amado Boudou retrasó la cotización del dólar para contener los precios, con la receta que usaron, en su momento, Martínez de Hoz y Cavallo. Ahora hay una tablita implícita del Banco Central para recuperar lo perdido, que proyecta un ajuste anual en el valor del dólar del 23%.
Para la UIA, el inadecuado manejo oficial hace difícil que el tipo de cambio empareje los costos internos. Y afirma que este desacierto es un nuevo motor del proceso inflacionario.
L a Casa Rosada lleva adelante un fuerte ajuste de todas las variables: se aceleró la devaluación al 23%, la luz y el gas aumentaron un 20%, el transporte un 40%, mientras la presión impositiva alcanzó un récord histórico.
La estrategia acelerará la inflación y provocará caída en los salarios.
Este problema emergió en una hermética reunión de veinte economistas “top”. Fue hace unos días y participaron profesionales de todas las tendencias, muchos vinculados al cristinismo. En el encuentro de “La Profesión”, como se llama al grupo, Ernesto Kritz alertó: “ La masa salarial creció cero, está estancada ”. También hubo coincidencia en dos cuestiones: –En 2013 el crecimiento será pobre . Calculan una suba del 1% al 3%.
–Pero la inflación viene en alza y se ubicaría en el 27%.
Allí trascendió el malestar que existe en la Cancillería por la designación de Cecilia Nahón como embajadora en Estados Unidos. El personal diplomático critica su falta de idoneidad y el descontento salpica a los senadores radicales que controlan, vía Gerardo Morales, la Comisión de Acuerdos. El arco opositor se conformó con la pobre presentación de Nahón, con el argumento de que lo hacían por compromisos secretos con la Casa Rosada.
El Gobierno quiere darle impulso a los demorados planes de inversión de YPF. Por eso trató de magnificar la carta de intención firmada con Chevron. Miguel Galuccio tiene una feroz interna con Axel Kicillof y necesita mostrar supuestos éxitos en su gestión . Prefirió apurarse y sacarse una foto a solas con Ali Moshiri, titular de Chevron, antes que compartir la escena con la Presidenta en la Casa Rosada.
Pero el avance real es pobre y sólo se limita a una carta de intención.
Antes de validar un contrato de ejecución, Chevron pretende que la Argentina otorgue garantías sobre estabilidad fiscal, remesa de utilidades y precio internacional para gas y petróleo.
En privado, Galuccio prometió a Moshiri que esas definiciones clave las dará Cristina Kirchner en un plazo de cuatro meses. Por eso, el acta del jueves habla de ese tiempo para firmar un contrato firme de inversión real.
La tarea será enorme para el jefe de la petrolera estatal: se trata de condiciones similares a las que tienen las firmas mineras y que levantan una polvareda política contra la Casa Rosada . Pero la decisión de Moshiri de prestarse a la maniobra publicitaria obedece a un interés concreto de la multinacional: que Cristina interceda a favor de Chevron ante el presidente de Ecuador , Rafael Correa.
Ese país inició un juicio contra Chevron y tiene embargadas las multimillonarias cuentas de la petrolera estadounidense en la Argentina.
Galuccio se habría comprometido a que Chevron obtenga el respaldo del Gobierno para enfrentar los litigios en Ecuador y liberar los fondos. Se trata de un arreglo de alto voltaje y de una jugada muy audaz, que puede enredar públicamente a Cristina en sus propias contradicciones.
Copyright Clarín, 2012.
El movimiento empresario argentino ratificó su unidad, ante los intentos de la Casa Rosada de quebrar la representación de los hombres de negocios. También revalidó a su conducción, confirmando por completo el liderazgo de la poderosa Asociación Empresaria Argentina (AEA).
Jaime Campos fue reelecto titular de la entidad y lo acompañará una mesa de conducción integrada por los principales referentes privados de la Argentina. La ratificación plena le pone un freno a las intenciones políticas de la Casa Rosada de fracturar el frente empresario , para llevar adelante sus operaciones contra los hombres de negocios.
Ya el Gobierno había intentado una movida similar en la Unión Industrial, pero la conducción de Ignacio de Mendiguren hizo capotar el proyecto y una ofensiva que llevaba el sello de Guillermo Moreno.
La decisión de AEA fue adoptada en la reciente asamblea. Ayer, la expropiación del predio de La Rural apuntaló un punto central del encuentro: el nuevo rechazo a la intromisión del Gobierno en los contratos privados. Otro consistió en avalar expresamente la independencia de la Justicia .
Durante un debate amplio, abundaron las críticas a la reforma del Mercado de Capitales y a la medida de habilitar la intervención de empresas, sin juicio previo , por parte de la Comisión Nacional de Valores. Sobre ese punto, Campos dijo: ” Un marco institucional republicano sólido es condición indispensable para el desarrollo .” Participaron de la asamblea los cincuenta principales líderes empresarios del país. La coyuntura económica no integró la agenda formal, pero se coló en los diálogos. Cristiano Rattazzi, el titular de Fiat, repitió: “Argentina tiene un problema serio con la inflación.” Y agregó: “ La inflación le hizo perder competitividad a la economía y el cepo nos hará crecer menos.
” Avaló la postura de Paolo Rocca, quien en un encuentro de Techint afirmó: “Argentina crece menos y perdió competitividad.” En la Unión Industrial también tocaron el tema y, en privado, no anduvieron con eufemismos: para los industriales, este desfasaje es fruto de la inadecuada política cambiaria de Cristina Kirchner, que modificó el tipo de cambio alto de Néstor Kirchner .
En el bienio 2010/11, Amado Boudou retrasó la cotización del dólar para contener los precios, con la receta que usaron, en su momento, Martínez de Hoz y Cavallo. Ahora hay una tablita implícita del Banco Central para recuperar lo perdido, que proyecta un ajuste anual en el valor del dólar del 23%.
Para la UIA, el inadecuado manejo oficial hace difícil que el tipo de cambio empareje los costos internos. Y afirma que este desacierto es un nuevo motor del proceso inflacionario.
L a Casa Rosada lleva adelante un fuerte ajuste de todas las variables: se aceleró la devaluación al 23%, la luz y el gas aumentaron un 20%, el transporte un 40%, mientras la presión impositiva alcanzó un récord histórico.
La estrategia acelerará la inflación y provocará caída en los salarios.
Este problema emergió en una hermética reunión de veinte economistas “top”. Fue hace unos días y participaron profesionales de todas las tendencias, muchos vinculados al cristinismo. En el encuentro de “La Profesión”, como se llama al grupo, Ernesto Kritz alertó: “ La masa salarial creció cero, está estancada ”. También hubo coincidencia en dos cuestiones: –En 2013 el crecimiento será pobre . Calculan una suba del 1% al 3%.
–Pero la inflación viene en alza y se ubicaría en el 27%.
Allí trascendió el malestar que existe en la Cancillería por la designación de Cecilia Nahón como embajadora en Estados Unidos. El personal diplomático critica su falta de idoneidad y el descontento salpica a los senadores radicales que controlan, vía Gerardo Morales, la Comisión de Acuerdos. El arco opositor se conformó con la pobre presentación de Nahón, con el argumento de que lo hacían por compromisos secretos con la Casa Rosada.
El Gobierno quiere darle impulso a los demorados planes de inversión de YPF. Por eso trató de magnificar la carta de intención firmada con Chevron. Miguel Galuccio tiene una feroz interna con Axel Kicillof y necesita mostrar supuestos éxitos en su gestión . Prefirió apurarse y sacarse una foto a solas con Ali Moshiri, titular de Chevron, antes que compartir la escena con la Presidenta en la Casa Rosada.
Pero el avance real es pobre y sólo se limita a una carta de intención.
Antes de validar un contrato de ejecución, Chevron pretende que la Argentina otorgue garantías sobre estabilidad fiscal, remesa de utilidades y precio internacional para gas y petróleo.
En privado, Galuccio prometió a Moshiri que esas definiciones clave las dará Cristina Kirchner en un plazo de cuatro meses. Por eso, el acta del jueves habla de ese tiempo para firmar un contrato firme de inversión real.
La tarea será enorme para el jefe de la petrolera estatal: se trata de condiciones similares a las que tienen las firmas mineras y que levantan una polvareda política contra la Casa Rosada . Pero la decisión de Moshiri de prestarse a la maniobra publicitaria obedece a un interés concreto de la multinacional: que Cristina interceda a favor de Chevron ante el presidente de Ecuador , Rafael Correa.
Ese país inició un juicio contra Chevron y tiene embargadas las multimillonarias cuentas de la petrolera estadounidense en la Argentina.
Galuccio se habría comprometido a que Chevron obtenga el respaldo del Gobierno para enfrentar los litigios en Ecuador y liberar los fondos. Se trata de un arreglo de alto voltaje y de una jugada muy audaz, que puede enredar públicamente a Cristina en sus propias contradicciones.
Copyright Clarín, 2012.
