El debate entre los seis principales precandidatos a gobernador del Frente Progresista y del justicialismo arrojó el mayor desencuentro al momento de exponer la relación econ el gobierno nacional. Antonio Bonfatti, Rubén Giustiniani y Mario Barletta criticaron «el falso federalismo» que promueve el gobierno kirchnerista, afirmaron que la Nación le debe plata a Santa Fe y hasta dijeron que es «patético ver a los intendentes desfilar por Buenos Aires para que los funcionarios le den la venia y le autoricen alguna obra». El debate fue organizado por La Ocho en el auditorio de La Capital y se transmitió en directo por la radio y la web.
Agustín Rossi bramó y señaló que «es un despropósito» cargar contra la Nación que -dijo- «creó nada menos que la asignación universal por hijo» cuyos beneficios se ven en todas las provincias hasta elevando el nivel de escolaridad. Rafael Bielsa, en tanto, manifestó que «es la provincia la que hace poco por la provincia» mientras Omar Perotti prometió «trabajar codo a codo con la Nación».
Al margen de este tema, otra observación que se pudo establecer estuvo en las críticas que lanzó el intendente radical santafesino Mario Barletta sobre la gestión de Hermes Binner. Antonio Bonfatti pareció tener más acompañamiento de parte de su rival socialista Rubén Giustiniani que del representante de la UCR en el Frente Progresista.
Como muestra, Barletta dijo textualmente: «El presupuesto a la producción destinado en Santa Fe es ínfimo; la secretaría de Ciencia y Técnica no tiene siquiera oficina». Al hablar de seguridad señaló: «¿Saben en qué tema la policía pierde más tiempo?: en accidentes de tránsito con lesiones leves. Esto no puede seguir». Tampoco hizo grandes reconocimientos a la gestión provincial.
El intercambio por momentos fue vibrante pero como balance se puede decir que los precandidatos demostraron buen nivel. Algunos se valieron de apuntes, pero en general estuvieron muy tranquilos pese al esfuerzo de mantener la atención durante dos horas y media, que fue lo que duró. El escenario fue el salón de conferencias del diario La Capital.
En los últimos minutos cedidos a cada uno, Bonfatti destacó los méritos acumulados por el socialismo en Rosario y la provincia; Rossi dijo que si le toca ser elegido «gobernaré como Cristina Kirchner lo hace en la Nación»; Giustiniani apuntó: «Fui secretario de Gobierno de Hermes Binner, decano de Ingeniería, dos veces diputado, dos veces senador y hoy le puedo pedir a los santafesinos el voto de confianza».
Bielsa aseguró que «la provincia va a seguir creciendo y tiene un futuro venturoso y nos equivocaríamos si apostásemos a la exportación del poroto de soja por encima del aceite de soja y los biocombustibles».
Perotti destacó: «Soy el único candidato que no es de Santa Fe ni de Rosario; creo en el interior, en el esfuerzo y quiero que me acompañen para hacer de santa Fe la primera provincia argentina».
Barletta recordó el pasado de la provincia, Rosario y Santa Fe y las figuras como Nicasio Oroño y dijo que sus pergaminos como hombre de la docencia los multiplicará en caso de ser gobernador.
Primero desplegaron sus propuestas sobre educación y luego dedicaron especial atención a puntualizar las ideas sobre como mejorar la seguridad, el principal reclamo de la población. En el final enumeraron los planes para mejorar el empleo y la producción.
El debate fue conducido por Leo Richardino, en tanto Guillermo Zysman, Cristian Lavallén y Alejandro Grandinetti fueron los encargados de realizar preguntas y desarrollar conclusiones.
¿Dónde votás?
Agustín Rossi bramó y señaló que «es un despropósito» cargar contra la Nación que -dijo- «creó nada menos que la asignación universal por hijo» cuyos beneficios se ven en todas las provincias hasta elevando el nivel de escolaridad. Rafael Bielsa, en tanto, manifestó que «es la provincia la que hace poco por la provincia» mientras Omar Perotti prometió «trabajar codo a codo con la Nación».
Al margen de este tema, otra observación que se pudo establecer estuvo en las críticas que lanzó el intendente radical santafesino Mario Barletta sobre la gestión de Hermes Binner. Antonio Bonfatti pareció tener más acompañamiento de parte de su rival socialista Rubén Giustiniani que del representante de la UCR en el Frente Progresista.
Como muestra, Barletta dijo textualmente: «El presupuesto a la producción destinado en Santa Fe es ínfimo; la secretaría de Ciencia y Técnica no tiene siquiera oficina». Al hablar de seguridad señaló: «¿Saben en qué tema la policía pierde más tiempo?: en accidentes de tránsito con lesiones leves. Esto no puede seguir». Tampoco hizo grandes reconocimientos a la gestión provincial.
El intercambio por momentos fue vibrante pero como balance se puede decir que los precandidatos demostraron buen nivel. Algunos se valieron de apuntes, pero en general estuvieron muy tranquilos pese al esfuerzo de mantener la atención durante dos horas y media, que fue lo que duró. El escenario fue el salón de conferencias del diario La Capital.
En los últimos minutos cedidos a cada uno, Bonfatti destacó los méritos acumulados por el socialismo en Rosario y la provincia; Rossi dijo que si le toca ser elegido «gobernaré como Cristina Kirchner lo hace en la Nación»; Giustiniani apuntó: «Fui secretario de Gobierno de Hermes Binner, decano de Ingeniería, dos veces diputado, dos veces senador y hoy le puedo pedir a los santafesinos el voto de confianza».
Bielsa aseguró que «la provincia va a seguir creciendo y tiene un futuro venturoso y nos equivocaríamos si apostásemos a la exportación del poroto de soja por encima del aceite de soja y los biocombustibles».
Perotti destacó: «Soy el único candidato que no es de Santa Fe ni de Rosario; creo en el interior, en el esfuerzo y quiero que me acompañen para hacer de santa Fe la primera provincia argentina».
Barletta recordó el pasado de la provincia, Rosario y Santa Fe y las figuras como Nicasio Oroño y dijo que sus pergaminos como hombre de la docencia los multiplicará en caso de ser gobernador.
Primero desplegaron sus propuestas sobre educación y luego dedicaron especial atención a puntualizar las ideas sobre como mejorar la seguridad, el principal reclamo de la población. En el final enumeraron los planes para mejorar el empleo y la producción.
El debate fue conducido por Leo Richardino, en tanto Guillermo Zysman, Cristian Lavallén y Alejandro Grandinetti fueron los encargados de realizar preguntas y desarrollar conclusiones.
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