Esta será recordada por los brasileños como una Navidad feliz, pero menos consumista que las anteriores. Las ventas cayeron 1,7% respecto del año pasado, según los datos del instituto Serasa que se ocupó de medir cómo le fue al comercio entre el 18 y el 25 de diciembre.
Sin embargo, más que una baja neta de la demanda puede haber un cambio en la modalidad de compras: los shoppings tuvieron un avance notorio en su participación en las adquisiciones navideñas.
De acuerdo con Serasa este es el peor resultado desde 2003, cuando Lula da Silva asumió su primer gobierno. Ahora, el relevamiento de los shoppings da un valor marca un repunte de más de 3%, superior incluso al registrado en 2013. Así lo indicó la Asociación Brasileña de Tiendas del sector. Inclusive, de enero a diciembre de este año hubo una sensible mejora de la actividad con un avance de 8%. También le fue mejor al comercio electrónico que creció nada menos que 37% con respecto al año pasado. Así lo indicó E-bit, la consultora que se especializa en el registro de los datos de esta especialidad. Sus informaciones corresponden al período que va del 15 de noviembre al 24 de diciembre de 2014, e incluyó el “Black Friday” (el “viernes negro”) con saldos importantes en la venta de electrónicos y electrodomésticos. El salto fue gigantesco si se compara con el aumento de 5% del año anterior.
Según los de E-bit, “este final de año registró una cierta inestabilidad económica. Tal vez haya esto influido para que los consumidores buscaran alternativas más baratas a través de la internet”. Sin duda, un gran motor del comercio electrónico fue el Black Friday, del 28 de noviembre. Esos cinco días de promoción representaron 20% del total facturado, con ventas promedio de 200 dólares. Lo que abona la tesis de un cambio en los criterios de consumo es precisamente el hecho de que 1,5 millones de personas se convirtieron en nuevos usuarios de los sites de ventas por internet.
Para Serasa, que no incorporó este sector en sus cálculos, lo que determinó la caída de las ventas en los negocios que están por fuera de los shopping fue “la combinación de intereses altos que encarecen el crédito y de la elevada inflación. A esto se sumó la falta de confianza de los consumidores que afectó negativamente este año”.
En total, la facturación de los shopping brasileños durante Navidad fue de 2.200 millones de dólares. Los rubros con mayor crecimiento fueron los de perfumería, calzado y juguetes.
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Sin embargo, más que una baja neta de la demanda puede haber un cambio en la modalidad de compras: los shoppings tuvieron un avance notorio en su participación en las adquisiciones navideñas.
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Según los de E-bit, “este final de año registró una cierta inestabilidad económica. Tal vez haya esto influido para que los consumidores buscaran alternativas más baratas a través de la internet”. Sin duda, un gran motor del comercio electrónico fue el Black Friday, del 28 de noviembre. Esos cinco días de promoción representaron 20% del total facturado, con ventas promedio de 200 dólares. Lo que abona la tesis de un cambio en los criterios de consumo es precisamente el hecho de que 1,5 millones de personas se convirtieron en nuevos usuarios de los sites de ventas por internet.
Para Serasa, que no incorporó este sector en sus cálculos, lo que determinó la caída de las ventas en los negocios que están por fuera de los shopping fue “la combinación de intereses altos que encarecen el crédito y de la elevada inflación. A esto se sumó la falta de confianza de los consumidores que afectó negativamente este año”.
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