Por ese juego caprichoso y especulativo de los sectores formadores de precios, al tiempo que la producción y la venta mayorista de carne empezaron a ser más rentables, el valor final que se paga en la carnicería sigue siendo excesivamente elevado. La situación la reconoce un informe de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados (CICCRA), que asegura que “ha finalizado la etapa de pérdida económica para el sector productivo” y que “la producción se muestra francamente rentable (…) en la cría, la que opera con valores ahora sí competitivos; esto se refleja en el cambio de tendencia, ya que se pasó de la gran liquidación de stocks a una franca retención de vientres”.
Como esta mejora está basada en el incremento de los precios y no en mayor eficiencia productiva, se ve reflejada en el mostrador donde, además, las carnicerías aumentaron sus valores por sobre la inflación, sea medida por el Indec o los privados: el trabajo de CICCRA consigna que en el primer cuatrimestre de 2011, el aumento promedio de la hacienda en Liniers fue del 10,2% (considerando las categorías novillo, novillito, vaquillona y ternero); mientras que la carne en el mostrador subió un 6,5% en marzo y el 6,5% en abril, es decir, aumentó tres puntos porcentuales más en sólo dos meses.
Esta estructura comercial, que beneficia claramente a la cadena de la carne, perjudica sólo al bolsillo del consumidor final.
El mismo informe de CICCRA reconoce que por los abusos de precios, el consumo por habitante de carne vacuna se ubicó en apenas 56,3 kilos anuales en el primer trimestre de 2011. El número es importante porque representa una contracción del 14,8% anual, y del 20,1% con relación a igual período de 2009. En diálogo con este diario, la Cámara de Carnicerías (ver opinión) aseguró que sube el valor “porque hay que considerar la suba de los servicios, los sueldos y las cargas sociales”.
¿Cómo explican en el sector por qué no bajan los precios en el mostrador? “El precio no baja porque no hay stock. Recién en tres o cuatro años se puede esperar algún retroceso del valor, cuando se recupere la hacienda. De hecho, en los próximos 60 días, el valor va a seguir subiendo”, dijo a Tiempo Argentino Miguel Schiariti, titular de CICCRA.
El cálculo que hace Schiariti es que, si bien se ha revertido la tendencia de remate de vientres (vacas fértiles), recién en la próxima primavera estas quedarán preñadas. A ello hay que sumarle otros nueve meses hasta que nazcan los terneros, y otros 24 meses para que estos terneros lleguen a las carnicerías. Schiariti, reconociendo que por más que en la producción haya buena rentabilidad, “mientras la demanda de carne siga baja los precios no pueden bajar”. En este marco, y si bien se quejan de la política agropecuaria oficial, los productores no dicen que nadie los obligó a liquidar las vacas en 2009, sino que lo hicieron aprovechando la apertura de la exportación y los precios internacionales.
De todos modos, la recuperación de los vientres es notable: en enero-marzo de 2011 la participación de las hembras en la faena total volvió a descender y se ubicó en un 39%, marcando el menor registro para el trimestre respectivo de los últimos 20 años y dando cuenta de la continuidad e intensificación de la fase de retención de hembras en marcha.
Según explicó a Tiempo Horacio Lazarte, especialista de la consultora Abeceb.com “los frigoríficos son el sector más perjudicado cuando el precio de la hacienda en pie estaba planchado, pero hoy están en plena recuperación”.
Para Lazarte, “el sector cárnico se viene recuperando, pero el 2011 será el año del despegue, tras dos años malos. Y no hay dudas de que, en esta mejora, tuvo que ver la política agro-ganadera”.<
Como esta mejora está basada en el incremento de los precios y no en mayor eficiencia productiva, se ve reflejada en el mostrador donde, además, las carnicerías aumentaron sus valores por sobre la inflación, sea medida por el Indec o los privados: el trabajo de CICCRA consigna que en el primer cuatrimestre de 2011, el aumento promedio de la hacienda en Liniers fue del 10,2% (considerando las categorías novillo, novillito, vaquillona y ternero); mientras que la carne en el mostrador subió un 6,5% en marzo y el 6,5% en abril, es decir, aumentó tres puntos porcentuales más en sólo dos meses.
Esta estructura comercial, que beneficia claramente a la cadena de la carne, perjudica sólo al bolsillo del consumidor final.
El mismo informe de CICCRA reconoce que por los abusos de precios, el consumo por habitante de carne vacuna se ubicó en apenas 56,3 kilos anuales en el primer trimestre de 2011. El número es importante porque representa una contracción del 14,8% anual, y del 20,1% con relación a igual período de 2009. En diálogo con este diario, la Cámara de Carnicerías (ver opinión) aseguró que sube el valor “porque hay que considerar la suba de los servicios, los sueldos y las cargas sociales”.
¿Cómo explican en el sector por qué no bajan los precios en el mostrador? “El precio no baja porque no hay stock. Recién en tres o cuatro años se puede esperar algún retroceso del valor, cuando se recupere la hacienda. De hecho, en los próximos 60 días, el valor va a seguir subiendo”, dijo a Tiempo Argentino Miguel Schiariti, titular de CICCRA.
El cálculo que hace Schiariti es que, si bien se ha revertido la tendencia de remate de vientres (vacas fértiles), recién en la próxima primavera estas quedarán preñadas. A ello hay que sumarle otros nueve meses hasta que nazcan los terneros, y otros 24 meses para que estos terneros lleguen a las carnicerías. Schiariti, reconociendo que por más que en la producción haya buena rentabilidad, “mientras la demanda de carne siga baja los precios no pueden bajar”. En este marco, y si bien se quejan de la política agropecuaria oficial, los productores no dicen que nadie los obligó a liquidar las vacas en 2009, sino que lo hicieron aprovechando la apertura de la exportación y los precios internacionales.
De todos modos, la recuperación de los vientres es notable: en enero-marzo de 2011 la participación de las hembras en la faena total volvió a descender y se ubicó en un 39%, marcando el menor registro para el trimestre respectivo de los últimos 20 años y dando cuenta de la continuidad e intensificación de la fase de retención de hembras en marcha.
Según explicó a Tiempo Horacio Lazarte, especialista de la consultora Abeceb.com “los frigoríficos son el sector más perjudicado cuando el precio de la hacienda en pie estaba planchado, pero hoy están en plena recuperación”.
Para Lazarte, “el sector cárnico se viene recuperando, pero el 2011 será el año del despegue, tras dos años malos. Y no hay dudas de que, en esta mejora, tuvo que ver la política agro-ganadera”.<
«Cae el consumo»… «… el precio no para de subir…» «…cae la demanda interna».
¿Cómo se llamaba el gorila este que predijo esto? ¿Pablo D sigue comiendo más asado que nunca?
Tiene toda la razón el amigo Leandro. Lo que se olvida de decir es que se cumple una ley básica de la economía (ley de la oferta y de la demanda) y la profecía de todos los productores agropecuarios, entre los que me incluyo. Habría que ver que decía el amigo en 2009 año record de consumo de carne y de destrucción de la producción ganadera.