El jefe porteño logró que le permitieran el desarrollo de departamentos de más de dos niveles. La autorización se la dio un ex funcionario suyo.
Por R.P.
07/04/12 – 01:56
Lujo. En el Buenos Aires Village ya se venden las 327 unidades que los Macri construyen en el barrio privado. Su amistad con el intendente Joaquín de la Torre viene de larga data.
En noviembre de 2011, el exclusivo barrio cerrado Buenos Aires Village consiguió una excepción de la Municipalidad de San Miguel que le permitió concretar una edificación hasta ahora prohibida por ordenanza municipal. De acuerdo con los documentos del gobierno de la provincia de Buenos Aires, este predio en el que se construyen 327 viviendas que comenzaron a comercializarse la última semana pertenece a Mauricio Macri y su familia.
El intendente de San Miguel, Joaquín de la Torre, es uno de los alcaldes oficialistas que mayor diálogo mantiene con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri. Incluso, en febrero de 2011 De la Torre recibió a Macri en su distrito y dejó correr los rumores de un posible pase a las filas del PRO que nunca concretó.
Un mes antes de esa foto, la empresa Emdico, en caracter de mandataria del Barrio Buenos Aires Village, solicitó a la municipalidad “darle la inscripción normativa correspondiente” al proyecto de “dormies”, ya que las normas indicaban la posibilidad de construir planta baja y un primer nivel, “pero el proyecto se desarrollará en planta baja y dos niveles habitables”.
Ante la negativa de la Secretaría de Obras Públicas, fue un ex funcionario del Gobierno de la Ciudad y actual subsecretario de Legal y Técnica del distrito, José Richards, quien solicitó que se “estructure una variable alternativa a viabilizar el pedido”.
Con la aprobación de la Secretaría de Obras Públicas, De la Torre pudo elevar al Concejo Deliberante la modificación de la ordenanza municipal Nº 237/87 “dentro del emprendimiento Buenos Aires Village”. De esta manera se modificó su artículo 2º que permite una altura máxima edificable de planta baja y primer nivel y y se autorizó la construcción de “planta baja, dos niveles y terraza”.
Finalmente, con fecha del 24 de noviembre último, el Ministerio de Gobierno provincial termina de otorgar la convalidación técnica preliminar y reconoce como uno de los titulares del predio al jefe de Gobierno (ver facsímil).
Sin embargo, ante la consulta de PERFIL por los negocios inmobiliarios de Macri, su vocero explicó: “Los terrenos los vendió hace años a la empresa Emdico, que fue la que se encargo de la comercialización del mencionado barrio. Por lo tanto, no hizo ninguna gestión ni pedido de excepción a nadie”.
Pero los primeros acuerdos entre De la Torre y Macri llegaron en 2010 cuando el intendente aceptó continuar recibiendo la basura de Capital Federal que, según pudo averiguar PERFIL, sería compensado con el pago, por parte del Gobierno de la Ciudad, de la recolección de residuos en el distrito.
En 2011, el intendente de San Miguel cobijó en su gabinete a José Richards (quien solicitó el pedido de edificación) y Max Perkins (secretario de Seguridad), dos ex funcionarios porteños que trabajaron en la Agencia Gubernamental de Control durante el período de Federico Young. Este último debió abandonar el cargo acusado por los organismos de derechos humanos por su defensa de la última dictadura militar y por nombrar en la agencia que manejaba Young a personajes vinculados a la dictadura. En el distrito, el amparo a estos funcionarios no sorprende. En junio de 1989, De la Torre y su mujer, María José Camerlinckx, firmaron la solicitada de “reconocimiento y solidaridad a las Fuerzas Armadas, de seguridad y policiales que defendieron a la Nación en la guerra desatada por la agresión subversiva y derrotaron a las organizaciones terroristas”.
Por R.P.
07/04/12 – 01:56
Lujo. En el Buenos Aires Village ya se venden las 327 unidades que los Macri construyen en el barrio privado. Su amistad con el intendente Joaquín de la Torre viene de larga data.
En noviembre de 2011, el exclusivo barrio cerrado Buenos Aires Village consiguió una excepción de la Municipalidad de San Miguel que le permitió concretar una edificación hasta ahora prohibida por ordenanza municipal. De acuerdo con los documentos del gobierno de la provincia de Buenos Aires, este predio en el que se construyen 327 viviendas que comenzaron a comercializarse la última semana pertenece a Mauricio Macri y su familia.
El intendente de San Miguel, Joaquín de la Torre, es uno de los alcaldes oficialistas que mayor diálogo mantiene con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri. Incluso, en febrero de 2011 De la Torre recibió a Macri en su distrito y dejó correr los rumores de un posible pase a las filas del PRO que nunca concretó.
Un mes antes de esa foto, la empresa Emdico, en caracter de mandataria del Barrio Buenos Aires Village, solicitó a la municipalidad “darle la inscripción normativa correspondiente” al proyecto de “dormies”, ya que las normas indicaban la posibilidad de construir planta baja y un primer nivel, “pero el proyecto se desarrollará en planta baja y dos niveles habitables”.
Ante la negativa de la Secretaría de Obras Públicas, fue un ex funcionario del Gobierno de la Ciudad y actual subsecretario de Legal y Técnica del distrito, José Richards, quien solicitó que se “estructure una variable alternativa a viabilizar el pedido”.
Con la aprobación de la Secretaría de Obras Públicas, De la Torre pudo elevar al Concejo Deliberante la modificación de la ordenanza municipal Nº 237/87 “dentro del emprendimiento Buenos Aires Village”. De esta manera se modificó su artículo 2º que permite una altura máxima edificable de planta baja y primer nivel y y se autorizó la construcción de “planta baja, dos niveles y terraza”.
Finalmente, con fecha del 24 de noviembre último, el Ministerio de Gobierno provincial termina de otorgar la convalidación técnica preliminar y reconoce como uno de los titulares del predio al jefe de Gobierno (ver facsímil).
Sin embargo, ante la consulta de PERFIL por los negocios inmobiliarios de Macri, su vocero explicó: “Los terrenos los vendió hace años a la empresa Emdico, que fue la que se encargo de la comercialización del mencionado barrio. Por lo tanto, no hizo ninguna gestión ni pedido de excepción a nadie”.
Pero los primeros acuerdos entre De la Torre y Macri llegaron en 2010 cuando el intendente aceptó continuar recibiendo la basura de Capital Federal que, según pudo averiguar PERFIL, sería compensado con el pago, por parte del Gobierno de la Ciudad, de la recolección de residuos en el distrito.
En 2011, el intendente de San Miguel cobijó en su gabinete a José Richards (quien solicitó el pedido de edificación) y Max Perkins (secretario de Seguridad), dos ex funcionarios porteños que trabajaron en la Agencia Gubernamental de Control durante el período de Federico Young. Este último debió abandonar el cargo acusado por los organismos de derechos humanos por su defensa de la última dictadura militar y por nombrar en la agencia que manejaba Young a personajes vinculados a la dictadura. En el distrito, el amparo a estos funcionarios no sorprende. En junio de 1989, De la Torre y su mujer, María José Camerlinckx, firmaron la solicitada de “reconocimiento y solidaridad a las Fuerzas Armadas, de seguridad y policiales que defendieron a la Nación en la guerra desatada por la agresión subversiva y derrotaron a las organizaciones terroristas”.
