La crisis que nos espera será peor que la del 2000 y de 2008 y hará trastabillar tanto a Wall Street, como a la economía global, asegura el diario resumiendo las opiniones de los líderes financieros a quien entrevistó a lo largo del último año. Lo que nos espera por delante es una anomalía, algo impredecible: factores desencadenantes macroeconómicos que podrían acelerar una recesión han llegado a una masa crítica, puntualiza el periódico. La razón subyacente es simple: «una política monetaria fundamentalmente defectuosa», cuando el Sistema de la Reserva Federal sigue «imprimiendo el dinero barato».
«La Reserva Federal debe dejar de microgestionar la economía. No más dinero barato, recompras de deuda y e inversión en empresas privadas», exhortó David Stockman, director de la Oficina de Administración y Presupuesto de EE.UU. entre 1981 y 1985, según recoge ‘The Wall Street Journal’. Por su parte, William Hunt Gross, cofundador de PIMCO, uno de los mayores gestores de activos de inversión globales de renta fija del mundo, advirtió sobre una «supernova de créditos». Detalló que su empresa tiene dos billones de dólares en riesgo en caso de que el dinero barato de la Reserva Federal explote. «La banca de inversión que hace solo una década promovía el desarrollo de los pequeños negocios ahora está dominada por una especulación apalancada», insistió Gross.
El mundo está atrapado por una megaburbuja que aún no tiene nombre y es alimentada por el Sistema de la Reserva Federal de EE.UU., advirtió el analista de Société Générale, Kit Juckes. Esta burbuja «está a punto de estallar, como lo hizo la crisis financiera asiática, la burbuja .com y el sistema de créditos», puntualizó.
‘Tictac, tictac, boom!’ fue el titular principal de la portada de ‘InvestmentNews’ un día de este mes de marzo. El diario, que se enfoca en datos, investigaciones y pronósticos para consejeros financieros advertía que millones de inversionistas no tenían ni idea de qué iba a pasar. Tarde o temprano habrá «otra batalla fea» relacionada con la deuda y los mercados quedarán «asustados»: cualquier tendencia «sería suficiente para paralizar la economía mundial e inclinarla hacia la recesión», insistió, a su vez, el economista estadounidense Nouriel Roubini, quien pronosticó la burbuja inmobiliaria en EE.UU. y recesión global del 2008.
Gary Shilling, columnista de ‘Forbes’, advirtió sobre una burbuja en expansión y una gran conmoción aproximándose. Calculó un crecimiento muy lento del PIB real para los próximos ocho años, de apenas un 2%, y prometió una desaceleración global aún más grave durante la próxima generación, llegando a cero. «Estoy 100% seguro de que la crisis hacia la que estamos avanzando será mucho peor que la del 2008», opinó, por su parte, Peter Schiff, director ejecutivo de Euro Pacific Capital, una corredora estadounidense de bolsa.