La intención de las empresas de telefonía celular es pagar el 50% de los u$s 2.000 millones en moneda de EE.UU y el resto en pesos. Se vienen días de definiciones
En medio del proceso de adjudicación de las bandas de 3G y 4G que fueron licitadas el mes pasado, las operadoras de telecomunicaciones seleccionadas para operar estas nuevas frecuencias siguen negociando con el Gobierno una fórmula que les permita hacer frente a las inversiones sin tener que desembolsar solamente dólares.
El dinero que está en juego se acerca a los u$s 2.000 millones, y la intención de las compañías es que las autoridades les permitan aplicar una fórmula mixta entre la moneda norteamericana y pesos. Es que moneda local les sobra, pero dólares escasean y las empresas no quieren tener que salir a comprar al mercado todo el dinero comprometido para desarrollar una infraestructura con la que se promete mejorar la calidad del servicio de la telefonía celular.
Fuentes del sector estimaron que si el Gobierno les permite abonar el 50% de las inversiones comprometidas, que serían algo así como u$s 1.000 millones en total, «parecería una buena oportunidad tomando en cuenta que los dólares no existen para nadie, ni para el Gobierno ni para las empresas». Por eso, las operadoras estiman que la fórmula sería sustentable en relación a las inversiones que se vienen para mejorar el servicio y proporcionar el nuevo 4G.
De hecho, antes de la adjudicación de la subasta, Movistar había enviado una carta a la Secom, firmada por su apoderado Gustavo Marcos, exigiendo pagar en pesos al tipo de cambio oficial. En el escrito, la empresa de Telefónica sostenía que la oferta económica «que resultare adjudicada podrá pagarse en su equivalente en pesos, según el tipo de cambio oficial del día anterior a la fecha de pago que publique el Banco Nación».
El problema es que en estos momentos el Gobierno está necesitado de divisas extranjeras para hacer frente a varios de sus problemas macro económicos que atraviesa. Por ese motivo, las operadoras consideran viable aportar la mitad del dinero en dólares y la otra mitad en pesos o en bonos como el Boden 2015, al tipo de cambio oficial.
Hasta ahora, la Secretaría de Comunicaciones (Secom) realizó la primera adjudicación de las bandas 3G y AWS para 4G a Claro. Ahora, la operadora propiedad del magnate mexicano Carlos Slim tiene 10 días hábiles para empezar a dar cumplimiento a las obligaciones establecidas en el Pliego de Bases y Condiciones, entre las que se encuentra el pago. Es decir, en estas próximas semanas Claro deberá informar cómo hará frente a los desembolsos.
Si bien el pliego establece dólares como moneda de pago, la presión de las operadoras tendría sus frutos y finalmente podría aplicarse un mix entre billetes norteamericanos y pesos.
Esta semana debería haber novedades con respecto al resto de las adjudicaciones de bandas para Movistar, Personal y Arlink, la empresa de Daniel Vila que ingresó como cuarto operador al mercado. Recién después y de que todas efectúen los pagos, se les permitirá a las empresas comenzar a utilizar la porción de 3G que adquirieron. Además, tendrán que iniciar el despliegue de infraestructura para prestar el servicio de 4G.
Cuando se licitaron las bandas, en octubre, la Secom recibió ofertas por u$s 2.233 millones por los 10 lotes de frecuencias radioeléctricas que se subastaron. Según lo previsto, la puesta en marcha de las licitaciones mejorarán las telecomunicaciones de la telefonía celular 3G, y el ingreso de los usuarios al servicio 4G, aunque este acceso se estima en uno o dos años. Actualmente, Argentina es el único país que no cuenta con ese tipo de tecnología que permite conexiones de alta velocidad a Internet.