Página/12 :: Economía :: Traer verdes de exportaciones

Tras constatar irregularidades en la liquidación de divisas, la AFIP suspendió el beneficio del reintegro aduanero a más de 100 mil operaciones por 4400 millones de dólares, provenientes de 9758 firmas exportadoras en los últimos cuatro años. La sanción responde al relevamiento que se inició a principio de año y fue formalizado en marzo último, según explicó ayer a este diario una fuente del organismo recaudador. Las empresas involucradas, según información provista por el Banco Central, no ingresaron las divisas aun provenientes de sus exportaciones, las cuales en muchos casos fueron concretadas durante el bienio 2008-2009. Las exportadoras podrán acercarse al Banco Central, junto con el banco privado interviniente en la operación, para justificar la demora en la liquidación o en la contabilización del ingreso de las divisas.
El monto de las devoluciones que todavía están pendientes alcanza a los 297.311.911 de dólares y se distribuye especialmente entre empresas cerealeras, automotrices, químicas y de alimentación, según informaron desde la entidad que conduce Ricardo Echegaray. Los reintegros consisten en la devolución total o parcial de los importes que se hubiesen abonado en concepto de tributos internos por la mercadería que se exporte a consumo. El 29 de marzo la AFIP presentó una nueva herramienta “para fortalecer los controles integrales del comercio exterior”, según los considerandos de la resolución. Mediante este nuevo mecanismo, sólo percibirán los reintegros los operadores que no evidencien situaciones de incumplimiento o vencidos reportados por los bancos que intervengan en la exportación.
En el momento de la salida de la medida, la AFIP informó haber detectado 99.295 operaciones en falta, de parte de 7484 exportadores que fueron sumariados. El Central es el que se encarga de realizar con los bancos los relevamientos para detectar incumplimientos y eleva a la AFIP el reporte. Como resultado de ese cruce de datos se detectaron hasta fin del mes pasado –la actualización es mensual– 107.696 destinaciones de exportación (anuncio de exportación) por un valor de 4400 millones de dólares, que se encuentran reportadas “sin el ingreso total o parcial de las divisas correspondientes, según los informes de los bancos intervinientes en la operatoria de exportación”, según el comunicado de la AFIP.
Entre las empresas con mayores saldos exportables que evidencian algunas irregularidades de forma total o parcial, 617 millones de dólares corresponden al rubro cerealeras, 365 millones al sector de la alimentación, 369 millones de la industria química y 34 millones de automotrices, entre otras. Antes de la resolución de la AFIP de marzo último, en caso de registrarse una situación de incumplimiento de sus obligaciones fiscales, previsionales, aduaneras o de ingreso de divisas en una o varias operaciones, el exportador continuaba percibiendo los reintegros sobre el resto de sus transacciones. Ahora, el bloqueo se realiza sobre todos los reintegros que tenga que percibir la firma. “Los beneficios de las operaciones de comercio exterior son para los contribuyentes que cumplen con todas sus obligaciones”, dijo Echegaray en el comunicado.
Según explicaron fuentes de la Aduana, se aplicó un “barrido más intenso de la consultas”, a partir de la implementación de nuevos plazos en la liquidación de divisas de los exportadores, lo que obligó a redefinir los controles. El Gobierno dispuso la exigencia de liquidar las divisas en un plazo de un mes –antes lo había recortado a quince días, pero lo flexibilizó– y se mantienen fuera del régimen las empresas que exporten menos de dos millones de dólares al año. “Cuando un exportador hace una operación, designa un banco para canalizar el cobro. Puede ser que no haya aún contabilizado el cobro o haya tenido demoras con la cadena de pagos internacionales”, explicó la fuente. El objetivo es ubicar las empresas con posiciones fuertes en moneda extranjera y que, a pesar de la ley penal cambiaria, se quedaron con las divisas.

Acerca de Napule

es Antonio Cicioni, politólogo y agnotólogo, hincha de Platense y adicto en recuperación a la pizza porteña.

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