29/12/13
Las Fiestas son tiempo de balances. Y en materia de precios, 2013 deberá recordarse como un año en el que, pese a los intentos oficiales por contener la inflación, los productos del supermercado se encarecieron sin control. Muy especialmente, los alimentos y bebidas más sensibles de la mesa familiar, como el pan, la yerba, la harina y los fideos, donde las subas acumuladas superan el 70%.
Sólo en los últimos dos meses, tras la renuncia de Guillermo Moreno, la canasta de 50 alimentos, bebidas, básicos de limpieza y de cuidado personal que Clarín releva en locales porteños de Coto, Disco, Walmart, Vea y Carrefour se encareció un 13%, más del doble que lo registrado en el bimestre anterior.
Y en menos de un año, el costo del mismo “changuito” saltó en promedio de $ 603,61 a $ 820,11 . Vale hoy, entonces, un 36% más.
Así, por ejemplo, a principios de año una familia precisaba $ 81 para comprar un pan lactal familiar, queso crema, mermelada, un sachet de leche y un frasco de café soluble para sus desayunos. Hoy ese combo cuesta $ 118, ya es 46% más caro. Y para un almuerzo, el valor de un kilo de pollo, uno de arroz, un frasco de mayonesa y un agua mineral grande pasó de $ 47 a $ 65: sale ahora un 38% más.
Las mayores subas del año se vincularon a la harina. La de tres ceros, por caso, pasó de menos de $ 3 el kilo a entre $ 7 y $ 9,50. Eso repercutió en todos los productos elaborados con esa materia prima.
Clarín , por ejemplo, comprobó subas del 75% en los fideos secos Favorita, cuyo paquete empezó el año a $ 4,60, llegó a $ 5,70 en agosto y hoy ya sale entre $ 7,80 y $ 8,83. Asimismo, hubo saltos del 59% en galletitas y del 50% en pan lactal.
El pan común, además, había empezado el año a $ 9 el kilo en panaderías, pero la suba de la harina lo llevó a más de $ 24 en septiembre y ahora se acomodó en torno a $ 21, un 133% por encima del valor de enero , según confirmaron en la Federación de la Industria Panaderil de Buenos Aires (FIPPBA).
También el mate, la infusión nacional, tuvo una escalada récord. La Taragüí se mantuvo a $ 17,45 el kilo hasta mayo, en septiembre pasó a $ 19 y luego se disparó hasta superar los $ 30, igual que la Unión. Más caros, los paquetes de Cruz de Malta y la Nobleza Gaucha ya rondan los $ 33, el de La Tranquera se fue a $ 36 y la Rosamonte, en Disco, ya se vende a $ 49,99.
Si hay algo esencial para la mesa familiar es la leche, y ahí tampoco hubo respiro. El sachet más barato de La Serenísima, aún con precio “congelado”, subió un 29%; y el de Sancor lo hizo un 40%, al pasar de $ 5,37 a $ 7,59 . El pote de queso crema Mendicrim, en tanto, acumuló un 54% de aumento (de $ 12,66 a $ 19,54), y el de Yogurísimo Firme un 48% (de $ 4,50 a $ 6,66), al igual que la manteca Sancor.
Entre otros fuertes ajustes, el kilo de asado llegó a las Fiestas a entre $ 50 y $ 58, un 42% más caro que en enero, y el kilo de pollo entero saltó tras las elecciones de $ 14 a $ 19 (36% de suba). Arroz Gallo (40%), huevos (36%), harina de maíz Arcor (35%), agua mineral Villa del Sur (34%) y vegetales como zapallo (62%), tomate (56%) y papa (51%) fueron otros de los básicos con grandes subas.
Finalmente, los aumentos promediaron el 39% en nueve artículos relevados de limpieza e higiene personal, impulsados especialmente por desodorante Rexona (40%), shampoo Plusbelle (50%), detergente lavavajillas Ala (49%), limpiador cremoso Cif (46%) y papel higiénico Higienol (58%), cuyo paquete de seis rollos pasó en el año de $ 10,31 a $ 16,29.
En los últimos días, se conocieron mediciones privadas que confirman estos niveles de aumento. El Instituto de Estudios de Consumo Masivo informó ayer que, sobre una canasta de 253 productos básicos relevada a nivel nacional, la inflación fue este año del 33,2%, y trepó a “entre un 40% y un 50%” para los más pobres , muy afectados por las subas en derivados de harina. Por su parte, Graciela Bevacqua, ex directora del Precios del INDEC, calculó que los alimentos de la canasta básica se dispararon un 6,2% en noviembre y acumularon un 36,3% de incremento en los últimos 12 meses.
La aceleración de los precios está a la vista de cualquiera, pero las estadísticas oficiales la siguen negando.
Para el INDEC, la canasta básica aumentó un 1,3% en noviembre y un 7,4% el último año . Así, para el Gobierno, una familia tipo todavía puede alimentarse con $ 6,41 diarios por persona.