Respecto de las tarifas, el vicepresidente, Daniel Scioli, aseguró en Radio 10: «Este tema es de sentido común y yo hablé claro con respecto a la segmentación porque hay sectores que no pueden pagar un aumento y otros que exportan que tienen un potencial mucho mayor y podrían pagar tarifas más altas, recaudación que usaría recursos para desarrollar inversiones».
«No hay que mirar el tema desde el punto de vista de que el aumento significa más para las empresas, sino verlo desde el punto de vista de la inversión. Quiero que más argentinos tengan cloacas, que haya explotación de gas, un servicio eléctrico para acompañar el desarrollo productivo. Si (el ministro de Planificación Federal, Julio) De Vido fue al Senado para explicar este tema de las tarifas y la semana próxima insistirá en aprobar las negociaciones es porque no va a ser un aumento que afectará a todos por igual. Esto en algún momento se va a dar, va haber una modificación pero con un estilo distinto», señaló Scioli.
«Por la producción, por el empleo recorro el país todo el tiempo. En todos estos temas de los militares hay distintas opiniones pero la Constitución lo dice muy claro, en el artículo 75, que el Senado tiene que promover el crecimiento económico, impulsar políticas de empleo y yo cumplo con eso, por un lado. Por el otro, la Argentina es un país que sale adelante produciendo y trabajando. Es una responsabilidad que estamos llevando adelante. El Senado debe tratar temas de la seguridad para la producción y el empleo», explicó.
En ese sentido, Scioli aclaró que esta posición es «complementaria» a lo que dice Kirchner. «No es una contradicción como señalan. Puedo decirles que Kirchner puede asegurarles que hay mucho más énfasis de lo que puede parecer en todo el tema productivo y llegar a los acuerdos pero distintos a los que estábamos habituados, es decir, que no se sacrifique el crecimiento interno de nuestro país», indicó el vicepresidente.
«Ayer (por el martes) cuando estuve con los empresarios, y ví que hay mucha voluntad de colaborar, de recuperar un clima amigable de negocios. Les dije que hoy tendría que ser ‘seduciendo el capital’ y no ‘combatirlo’, porque de eso se trata. Que alguien me explique cómo se crea empleo sin empresas ni inversión -se preguntó-, y para eso se necesitan tener reglas del juego claras, un orden en lo político».
«Complementándome, he cumplido este rol durante la campaña y ahora. Por eso estoy en cada provincia productiva hablando de estos temas y me parece que hay que poner el hombro, el oído a los sectores productivos»,dijo.
Según Scioli, «Kirchner no demonizó a los empresarios». Destacó: «Se puede instalar el tema como que el Gobierno está en contra de los empresarios y es ridículo. Lo que sí el Gobierno está en contra de aquellos que hicieron mal las cosas, los que no pagan impuestos o que tuvieron conductas especulativas».
«Vamos a respaldar a la inversión, a la producción y al desarrollo. No podemos perder la posibilidad de este escenario internacional, con la tasa de interés que hay en el mundo, por ejemplo. Yo estuve en el Senado alertando sobre el tema de Brasil, que es un país que subsidia a sus productores, después hablé de esto con el Secretario de Comercio, luego con el vicecanciller Martín Redrado y con (Alfonso) Prat Gay (presidente del Banco Central de la República Argentina), entonces, hay que defender a nuestros productores», completó.
Las leyes del perdón
Respecto a su declaración sobre que «un país serio no anula leyes», Daniel Scioli aclaró: «Me hago eco de lo que los senadores piensan con respecto a la escasa validez jurídica de avanzar en la anulación de las leyes. No hay duda en el dar un consenso, dar la adhesión al tratado que dispuso el presidente (Néstor Kirchner)».
En ese sentido, sostuvo que «el tema está dividido en dos partes: respecto al tema del tratado hay un total respaldo y en relación a la nulidad de las leyes tiene un valor simbólico desde el punto de vista político pero, desde el punto de vista jurídico, hay muchas dudas, y este tema va a terminar en la Corte Suprema». Agregó: «En la Argentina estamos haciendo todos los esfuerzos para recuperar la confianza, la seguridad jurídica, entonces, en los ámbitos que corresponden se resolverán los problemas».
«En el Senado hay un consenso unánime para el tratado pero en la anulación hay mucho cuestionamiento a su validez jurídica. Vamos a ver qué posición perdura, si la posición de la señal política o hay una convicción de que puede tener un efecto jurídico. Todos están en esta dirección. Es una discusión que se abrirá en el bloque, luego se llevara al recinto de la Cámara. El Senado puede sancionar, modificar o derogar pero la anulación significa un efecto retroactivo. Luego los abogados presentarán su apelación y después llegaría a la Corte», explicó el vicepresidente de la Nación.
«No hay que mirar el tema desde el punto de vista de que el aumento significa más para las empresas, sino verlo desde el punto de vista de la inversión. Quiero que más argentinos tengan cloacas, que haya explotación de gas, un servicio eléctrico para acompañar el desarrollo productivo. Si (el ministro de Planificación Federal, Julio) De Vido fue al Senado para explicar este tema de las tarifas y la semana próxima insistirá en aprobar las negociaciones es porque no va a ser un aumento que afectará a todos por igual. Esto en algún momento se va a dar, va haber una modificación pero con un estilo distinto», señaló Scioli.
«Por la producción, por el empleo recorro el país todo el tiempo. En todos estos temas de los militares hay distintas opiniones pero la Constitución lo dice muy claro, en el artículo 75, que el Senado tiene que promover el crecimiento económico, impulsar políticas de empleo y yo cumplo con eso, por un lado. Por el otro, la Argentina es un país que sale adelante produciendo y trabajando. Es una responsabilidad que estamos llevando adelante. El Senado debe tratar temas de la seguridad para la producción y el empleo», explicó.
En ese sentido, Scioli aclaró que esta posición es «complementaria» a lo que dice Kirchner. «No es una contradicción como señalan. Puedo decirles que Kirchner puede asegurarles que hay mucho más énfasis de lo que puede parecer en todo el tema productivo y llegar a los acuerdos pero distintos a los que estábamos habituados, es decir, que no se sacrifique el crecimiento interno de nuestro país», indicó el vicepresidente.
«Ayer (por el martes) cuando estuve con los empresarios, y ví que hay mucha voluntad de colaborar, de recuperar un clima amigable de negocios. Les dije que hoy tendría que ser ‘seduciendo el capital’ y no ‘combatirlo’, porque de eso se trata. Que alguien me explique cómo se crea empleo sin empresas ni inversión -se preguntó-, y para eso se necesitan tener reglas del juego claras, un orden en lo político».
«Complementándome, he cumplido este rol durante la campaña y ahora. Por eso estoy en cada provincia productiva hablando de estos temas y me parece que hay que poner el hombro, el oído a los sectores productivos»,dijo.
Según Scioli, «Kirchner no demonizó a los empresarios». Destacó: «Se puede instalar el tema como que el Gobierno está en contra de los empresarios y es ridículo. Lo que sí el Gobierno está en contra de aquellos que hicieron mal las cosas, los que no pagan impuestos o que tuvieron conductas especulativas».
«Vamos a respaldar a la inversión, a la producción y al desarrollo. No podemos perder la posibilidad de este escenario internacional, con la tasa de interés que hay en el mundo, por ejemplo. Yo estuve en el Senado alertando sobre el tema de Brasil, que es un país que subsidia a sus productores, después hablé de esto con el Secretario de Comercio, luego con el vicecanciller Martín Redrado y con (Alfonso) Prat Gay (presidente del Banco Central de la República Argentina), entonces, hay que defender a nuestros productores», completó.
Las leyes del perdón
Respecto a su declaración sobre que «un país serio no anula leyes», Daniel Scioli aclaró: «Me hago eco de lo que los senadores piensan con respecto a la escasa validez jurídica de avanzar en la anulación de las leyes. No hay duda en el dar un consenso, dar la adhesión al tratado que dispuso el presidente (Néstor Kirchner)».
En ese sentido, sostuvo que «el tema está dividido en dos partes: respecto al tema del tratado hay un total respaldo y en relación a la nulidad de las leyes tiene un valor simbólico desde el punto de vista político pero, desde el punto de vista jurídico, hay muchas dudas, y este tema va a terminar en la Corte Suprema». Agregó: «En la Argentina estamos haciendo todos los esfuerzos para recuperar la confianza, la seguridad jurídica, entonces, en los ámbitos que corresponden se resolverán los problemas».
«En el Senado hay un consenso unánime para el tratado pero en la anulación hay mucho cuestionamiento a su validez jurídica. Vamos a ver qué posición perdura, si la posición de la señal política o hay una convicción de que puede tener un efecto jurídico. Todos están en esta dirección. Es una discusión que se abrirá en el bloque, luego se llevara al recinto de la Cámara. El Senado puede sancionar, modificar o derogar pero la anulación significa un efecto retroactivo. Luego los abogados presentarán su apelación y después llegaría a la Corte», explicó el vicepresidente de la Nación.