CIUDAD DE MÉXICO, 22 de mayo.- En 2013, como hace 100 años, sigue siendo vigente la lección del ex presidente Venustiano Carranza de que “el ejercicio honesto de la política es capaz de sumar intereses y esfuerzos en favor de todos los mexicanos”, expresó el mandatario Enrique Peña Nieto, en la cena de gala en honor de los cien años del Ejército, en Palacio Nacional.
En el acto al que asistió todo el gabinete, así como los gobernadores de los estados y el jefe de gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera —el único de los mandatario en la mesa de honor—, el Presidente dijo que “el futuro del país depende de nuestra capacidad de coincidir en lo fundamental y ponernos de acuerdo para elevar la calidad de vida de los mexicanos”.
Se refirió a la época de Carranza, en la que el país estaba sumido en la violencia y lo describió como un hombre de Estado que fue capaz de “articular voluntades en favor de un mejor país, logró que prevaleciera el interés superior de la República”.
Habló de 1917, “cuando se dio la construcción de un nuevo pacto, la Constitución de 1917, para refundar la nación, con base en el derecho, nuestra Carta Magna fue la primera del mundo en sumar los derechos individuales y los sociales”.
En el siglo XXI, vigentes aquellos ideales de libertad, justicia e igualdad siguen vigentes, “siguen impulsando nuestra unidad”.
En el acto en donde participó el secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, el jefe del Ejecutivo expresó que el Ejército “ha sido siempre leal, siempre patriótico… es un pilar central de esta nación soberana y democrática”.
Recordó que el Ejército constitucionalista nació ante el asesinato del entonces presidente Francisco I. Madero.
El Ejército, dijo, ha forjado una “historia de valor, entrega y heroísmo, en defensa de la patria y de sus instituciones. Han pasado lista de presente para salvaguardar la paz y la soberanía de los mexicanos”.
Consideró que surgió del pueblo y se identifica con sus aspiraciones, y ha sido “un factor de cohesión, estabilidad y desarrollo” que busca como objetivo final la paz y la convivencia armónica de los ciudadanos.
El país democrático que es México, no puede entenderse sin el Ejército, comentó.
A la par, el secretario Cienfuegos dijo que las Fuerzas Armadas “no han escatimado en aliento ni en voluntad, cultivando un estrecho acercamiento con la sociedad”.
Expuso que tanto el concierto de gala de la Orquesta Sinfónica nacional en el Palacio de Bellas Artes, como la cena en Palacio Nacional, son muestra de “las excelentes relaciones de las Fuerzas Armadas con la sociedad”, con el Presidente y de cooperación con los gobernadores.
En la mesa de honor de Palacio Nacional estuvieron el presidente Peña Nieto y su esposa, Angélica Rivera, así como los secretarios de Gobernación, Miguel Ángel Osorio; de Hacienda, Luis Videgaray, y de Educación, Emilio Chuayffet, entre otros.
En el acto al que asistió todo el gabinete, así como los gobernadores de los estados y el jefe de gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera —el único de los mandatario en la mesa de honor—, el Presidente dijo que “el futuro del país depende de nuestra capacidad de coincidir en lo fundamental y ponernos de acuerdo para elevar la calidad de vida de los mexicanos”.
Se refirió a la época de Carranza, en la que el país estaba sumido en la violencia y lo describió como un hombre de Estado que fue capaz de “articular voluntades en favor de un mejor país, logró que prevaleciera el interés superior de la República”.
Habló de 1917, “cuando se dio la construcción de un nuevo pacto, la Constitución de 1917, para refundar la nación, con base en el derecho, nuestra Carta Magna fue la primera del mundo en sumar los derechos individuales y los sociales”.
En el siglo XXI, vigentes aquellos ideales de libertad, justicia e igualdad siguen vigentes, “siguen impulsando nuestra unidad”.
En el acto en donde participó el secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, el jefe del Ejecutivo expresó que el Ejército “ha sido siempre leal, siempre patriótico… es un pilar central de esta nación soberana y democrática”.
Recordó que el Ejército constitucionalista nació ante el asesinato del entonces presidente Francisco I. Madero.
El Ejército, dijo, ha forjado una “historia de valor, entrega y heroísmo, en defensa de la patria y de sus instituciones. Han pasado lista de presente para salvaguardar la paz y la soberanía de los mexicanos”.
Consideró que surgió del pueblo y se identifica con sus aspiraciones, y ha sido “un factor de cohesión, estabilidad y desarrollo” que busca como objetivo final la paz y la convivencia armónica de los ciudadanos.
El país democrático que es México, no puede entenderse sin el Ejército, comentó.
A la par, el secretario Cienfuegos dijo que las Fuerzas Armadas “no han escatimado en aliento ni en voluntad, cultivando un estrecho acercamiento con la sociedad”.
Expuso que tanto el concierto de gala de la Orquesta Sinfónica nacional en el Palacio de Bellas Artes, como la cena en Palacio Nacional, son muestra de “las excelentes relaciones de las Fuerzas Armadas con la sociedad”, con el Presidente y de cooperación con los gobernadores.
En la mesa de honor de Palacio Nacional estuvieron el presidente Peña Nieto y su esposa, Angélica Rivera, así como los secretarios de Gobernación, Miguel Ángel Osorio; de Hacienda, Luis Videgaray, y de Educación, Emilio Chuayffet, entre otros.