Llach: «El mundo va a seguir creando oportunidades». Foto: LA NACION / Aníbal Greco
En los últimos doce años, la Argentina se perdió de producir y exportar productos del campo por 150.000 millones de dólares, debido a las políticas de intervención, control del comercio y retenciones durante los gobiernos de Néstor Kirchner y su esposa, Cristina Kirchner, según un informe de la Fundación Producir Conservando. Además, entre derechos de exportación y las restricciones comerciales impuestas por el kirchnerismo, el campo transfirió US$ 97.000 millones.
Estos datos se dieron a conocer ayer en un seminario de la fundación. El economista Juan José Llach, autor del informe, fue categórico sobre las oportunidades perdidas por el país en ese período, haciendo una análisis sobre cinco rubros clave: trigo, maíz, granos oleaginosos, carnes y lácteos.
«La Argentina se perdió de exportar, como mínimo, por 150.000 millones de dólares, por producción que no se realizó y, por lo tanto, exportación que no se hizo», dijo. «Si no te dejan exportar, eso se refleja en la rentabilidad y se produce menos», añadió.
Para Llach, el cepo cambiario y la escasez de dólares fueron creados «por la política agroalimentaria» adversa. De hecho, opinó que las divisas perdidas hubieran representado entre 12.000 y 13.000 millones de dólares adicionales por año. «En leche producimos 11.000 millones de litros, que eran 10.000 millones en 1999. Tenemos un potencial de 18.000 a 19.000 millones de litros, o sea que hay 8000 millones que no se producen y en parte se podrían exportar», afirmó.
Para el economista, podría haber un cambio con el próximo gobierno, pero cree que su magnitud dependerá de quién gane. «La alianza entre Pro, el radicalismo y la Coalición Cívica tiene una visión más clara de las políticas agroalimentarias; el Frente Renovador, un poco menos, y el Frente para la Victoria, menos aún. Lo que veo poco claro en el FPV es la parte institucional, es decir, qué instituciones de comercio exterior vamos a tener. ¿Va a ser un funcionario por teléfono el que te va a dejar vender?», se preguntó.
El consultor Gustavo López y Gustavo Oliverio, coordinador de la Fundación Producir Conservando, expresaron que entre retenciones y restricciones comerciales el campo cedió US$ 97.000 millones. Pero, además, destacaron que el área y la producción en el país están estancadas.
El promedio de la superficie sembrada en los últimos diez años da 25 millones de hectáreas, y la producción, 80 millones de toneladas. En cambio, el Mercosur, excluida la Argentina, creció 22% en área y 25% en producción en los últimos cinco años. «Nos guste o no, estamos estancados. La Argentina llegó a 100 millones de toneladas; hace 6 o 7 años que estamos planchados», afirmó Oliverio.
Para la fundación, hacia 2025 la producción local podría saltar a 140 millones de toneladas si hay cambios. Si se mantiene la tendencia de los últimos años, sólo podría aspirarse a 117 millones de toneladas.
Fernando Vilella, de la Facultad de Agronomía, pidió «generar condiciones» para aprovechar oportunidades. Citó, entre otras, un cambio en China. Allí, el 20% de la comida se compra elaborada fuera de la casa. Ese porcentaje saltará a 65% para 2040..
En los últimos doce años, la Argentina se perdió de producir y exportar productos del campo por 150.000 millones de dólares, debido a las políticas de intervención, control del comercio y retenciones durante los gobiernos de Néstor Kirchner y su esposa, Cristina Kirchner, según un informe de la Fundación Producir Conservando. Además, entre derechos de exportación y las restricciones comerciales impuestas por el kirchnerismo, el campo transfirió US$ 97.000 millones.
Estos datos se dieron a conocer ayer en un seminario de la fundación. El economista Juan José Llach, autor del informe, fue categórico sobre las oportunidades perdidas por el país en ese período, haciendo una análisis sobre cinco rubros clave: trigo, maíz, granos oleaginosos, carnes y lácteos.
«La Argentina se perdió de exportar, como mínimo, por 150.000 millones de dólares, por producción que no se realizó y, por lo tanto, exportación que no se hizo», dijo. «Si no te dejan exportar, eso se refleja en la rentabilidad y se produce menos», añadió.
Para Llach, el cepo cambiario y la escasez de dólares fueron creados «por la política agroalimentaria» adversa. De hecho, opinó que las divisas perdidas hubieran representado entre 12.000 y 13.000 millones de dólares adicionales por año. «En leche producimos 11.000 millones de litros, que eran 10.000 millones en 1999. Tenemos un potencial de 18.000 a 19.000 millones de litros, o sea que hay 8000 millones que no se producen y en parte se podrían exportar», afirmó.
Para el economista, podría haber un cambio con el próximo gobierno, pero cree que su magnitud dependerá de quién gane. «La alianza entre Pro, el radicalismo y la Coalición Cívica tiene una visión más clara de las políticas agroalimentarias; el Frente Renovador, un poco menos, y el Frente para la Victoria, menos aún. Lo que veo poco claro en el FPV es la parte institucional, es decir, qué instituciones de comercio exterior vamos a tener. ¿Va a ser un funcionario por teléfono el que te va a dejar vender?», se preguntó.
El consultor Gustavo López y Gustavo Oliverio, coordinador de la Fundación Producir Conservando, expresaron que entre retenciones y restricciones comerciales el campo cedió US$ 97.000 millones. Pero, además, destacaron que el área y la producción en el país están estancadas.
El promedio de la superficie sembrada en los últimos diez años da 25 millones de hectáreas, y la producción, 80 millones de toneladas. En cambio, el Mercosur, excluida la Argentina, creció 22% en área y 25% en producción en los últimos cinco años. «Nos guste o no, estamos estancados. La Argentina llegó a 100 millones de toneladas; hace 6 o 7 años que estamos planchados», afirmó Oliverio.
Para la fundación, hacia 2025 la producción local podría saltar a 140 millones de toneladas si hay cambios. Si se mantiene la tendencia de los últimos años, sólo podría aspirarse a 117 millones de toneladas.
Fernando Vilella, de la Facultad de Agronomía, pidió «generar condiciones» para aprovechar oportunidades. Citó, entre otras, un cambio en China. Allí, el 20% de la comida se compra elaborada fuera de la casa. Ese porcentaje saltará a 65% para 2040..