A 24 horas del límite para la presentación de los frentes electorales para la elección nacional, Martín Sabbatella irá hoy a la Casa Rosada para reunirse con Carlos Zannini y Juan Manuel Abal Medina, sus dos interlocutores principales en el Gobierno, y definir el formato de su alianza con el kirchnerismo.
La tan meneada “colectora” en Buenos Aires pende de un hilo . Sabatella pretende que se le permita colgar de la eventual boleta Cristina Kirchner no sólo su candidatura a gobernador sino también boletas propias de candidatos a senadores y diputados nacionales .
Dos altas fuentes de la Casa Rosada aseguraron en las últimas horas a Clarín que esa posibilidad quedó descartada . “Cristina quiere absoluta fidelidad de sus diputados y a estos muchachos hay que estar hablándoles y convenciéndolos con cada proyecto”, esgrimió uno. “Los números de la Presidenta y Scioli están muy bien.
No hay por qué darle algo que es pura ganancia para él ”, agregó otro.
La opción que se le ofrecerá, aseguraron, es integrar a uno o dos nombres suyos en la boleta del Frente para la Victoria. “Tendrá que elegir eso o ir por su cuenta ”, sentenció el funcionario que habla casi a diario con la Presidenta.
Sabbatella, sin embargo, insiste ante los suyos que nadie le informó nada al respecto y todavía confía en llevar a Carlos Raimundi, Ariel Basteiro y Hugo Cañón como candidatos en su tira.
En su búnker de Congreso, el diputado recopila argumentos para demostrar que una boleta propia, bien diferenciada de la de Scioli, es lo que más le conviene a la Presidenta. “Scioli y nosotros le sumamos a Cristina votantes diferentes si nos mantenemos bien distanciados.
Si mezclamos, se acaba esa diferencia ”, esgrime ante los ultra K. En los últimos días, Sabbatella sumó dos nuevos argumentos. Asegura que la aparición de la boleta socialista, con Hermes Binner y Margarita Stolbizer, volvió aún más necesaria su opción de “kirchnerismo progresista” para evitar una fuga de votos cristinistas.
Además, cree que la UCR y Francisco De Narváez cayeron tanto en las encuestas, que Nuevo Encuentro podría llegar a competir por la banca de senador por la minoría. Hasta una presunta debilidad (las encuestas lo muestran lejos de pelear por la gobernación) la visualiza como una ventaja para tener su boleta propia: “Scioli gana por lejos, ya no nos pueden correr con que podemos hacer peligrar su reelección”, lo oyeron comentar.
Esta tarde desplegará todos esos argumentos en Balcarce 50. “ Deberán convencerme de que lo mejor para Cristina es que no llevemos nuestra boleta . No lo veo”, dijo en confianza a los suyos, antes de la negociación final.
La tan meneada “colectora” en Buenos Aires pende de un hilo . Sabatella pretende que se le permita colgar de la eventual boleta Cristina Kirchner no sólo su candidatura a gobernador sino también boletas propias de candidatos a senadores y diputados nacionales .
Dos altas fuentes de la Casa Rosada aseguraron en las últimas horas a Clarín que esa posibilidad quedó descartada . “Cristina quiere absoluta fidelidad de sus diputados y a estos muchachos hay que estar hablándoles y convenciéndolos con cada proyecto”, esgrimió uno. “Los números de la Presidenta y Scioli están muy bien.
No hay por qué darle algo que es pura ganancia para él ”, agregó otro.
La opción que se le ofrecerá, aseguraron, es integrar a uno o dos nombres suyos en la boleta del Frente para la Victoria. “Tendrá que elegir eso o ir por su cuenta ”, sentenció el funcionario que habla casi a diario con la Presidenta.
Sabbatella, sin embargo, insiste ante los suyos que nadie le informó nada al respecto y todavía confía en llevar a Carlos Raimundi, Ariel Basteiro y Hugo Cañón como candidatos en su tira.
En su búnker de Congreso, el diputado recopila argumentos para demostrar que una boleta propia, bien diferenciada de la de Scioli, es lo que más le conviene a la Presidenta. “Scioli y nosotros le sumamos a Cristina votantes diferentes si nos mantenemos bien distanciados.
Si mezclamos, se acaba esa diferencia ”, esgrime ante los ultra K. En los últimos días, Sabbatella sumó dos nuevos argumentos. Asegura que la aparición de la boleta socialista, con Hermes Binner y Margarita Stolbizer, volvió aún más necesaria su opción de “kirchnerismo progresista” para evitar una fuga de votos cristinistas.
Además, cree que la UCR y Francisco De Narváez cayeron tanto en las encuestas, que Nuevo Encuentro podría llegar a competir por la banca de senador por la minoría. Hasta una presunta debilidad (las encuestas lo muestran lejos de pelear por la gobernación) la visualiza como una ventaja para tener su boleta propia: “Scioli gana por lejos, ya no nos pueden correr con que podemos hacer peligrar su reelección”, lo oyeron comentar.
Esta tarde desplegará todos esos argumentos en Balcarce 50. “ Deberán convencerme de que lo mejor para Cristina es que no llevemos nuestra boleta . No lo veo”, dijo en confianza a los suyos, antes de la negociación final.