Argentina
Provincias apuran préstamos y recortes de gastos para no incumplir con los sueldos
Río Negro, Chubut, Entre Ríos y Santa Cruz
Escenario de gastos y situación fiscal
Por Alejandro Bercovich
La provincia de Buenos Aires no es la única con problemas de caja. Con la desaceleración de los giros automáticos por coparticipación de impuestos nacionales y la reducción de las transferencias discrecionales de la Nación, varios gobernadores apuraron sus planes para emitir deuda en el mercado y otros empiezan a enfrentar dificultades para el pago de salarios. Entre estas últimas están Río Negro, Chubut, Entre Ríos y Santa Cruz, aunque cada caso difiere de los demás, en función del alineamiento de cada distrito con la Casa Rosada y sus distintas capacidades para acceder a ayudas del Tesoro.
Las recaudaciones propias de las provincias empezaron a dar señales de agotamiento en el segundo trimestre del año, y eso empeoró la situación de algunas más que de otras. Según un informe que difundió ayer el Instituto de Análisis Fiscal, los ingresos totales de los gobiernos provinciales crecerán durante este año a un ritmo del 25%, unos 10 puntos porcentuales por debajo de sus gastos y casi tres puntos menos de lo que crecerán los ingresos de la AFIP.
La preeminencia de Ingresos Brutos en las recaudaciones provinciales explica por qué el impacto de la desaceleración económico es mayor en el interior. En Buenos Aires, por caso, ese impuesto recauda diez veces más que los impuestos Automotor, Inmobiliario y de Sellos. El economista Ramiro Castiñeira, de Econométrica, subrayó ante BAE que «Ingresos Brutos es un impuesto muy procíclico: cuando la economía vuela, va muy para arriba, pero cuando se estanca, también cae muy fuerte».
A eso se suma que como no todos los impuestos nacionales se coparticipan, las transferencias automáticas por coparticipación crecen a un ritmo interanual de sólo un 17%, según los últimos datos disponibles, a mayo.
Algunos gobernadores como los justicialistas José Manuel De la Sota (Córdoba), Jorge Capitanich (Chaco) y Francisco «Paco» Pérez (Mendoza) optaron por salir a financiarse emitiendo deuda, ya sea para financiar obras o gasto corriente. De la Sota cerró ayer exitosamente la emisión de un bono en dólares por u$s 105 millones (ver aparte), mientras que Chaco lanzó esta misma semana un nuevo bono para pagar obras de tendido eléctrico.
Mas caro. Otros distritos aún no lograron hacerlo y se financian más caro. El municipio de Bariloche, el más poblado de Río Negro, viene pagando sueldos y aguinaldo gracias a adelantos de bancos privados desde hace meses. «Eso es porque Río Negro no puede asistirla. Y Chubut va a empezar a tener problemas también», dijo a este diario Mariano Lamothe, economista jefe de la consultora Abeceb.
El informe del IARAF estima que, en conjunto, las provincias tendrán un déficit primario de entre 20 mil y 33 mil millones de pesos este año. Agregando los vencimientos de deuda, el rojo podría ampliarse hasta $47 mil millones.
Lamothe destacó que distritos chicos como Entre Ríos «están cubriendo baches con fondos como los del Fondo Federal Solidario», nutrido por un 30% de lo recaudado por retenciones a las exportaciones del agro. Ese dinero, originalmente, estaba dirigido a la concreción de obras en el interior.
Las expectativas de los gobernadores alineados con el oficialismo siguen puestas en los giros de la Nación, pero esa fuente también tiene un límite. «El Banco Central transfirió $30 mil millones el año pasado al consolidado Nación-provincias. Este año, ese monto va a aumentar hasta $45 mil millones. Y durante el primer semestre se transfirieron sólo $4 mil millones. Ahora se viene el grueso, por cómo están ubicados los vencimientos de deuda de la Nación», apuntó Castiñeira.
En ese panorama, en algunas legislaturas ya circulan proyectos para crear nuevos impuestos provinciales. Según el IARAF, el esfuerzo debería hacerse por frenar los gastos. Pero los gobernadores saben que eso tendría un duro costo político de cara a las elecciones del año próximo.
Provincias apuran préstamos y recortes de gastos para no incumplir con los sueldos
Río Negro, Chubut, Entre Ríos y Santa Cruz
Escenario de gastos y situación fiscal
Por Alejandro Bercovich
La provincia de Buenos Aires no es la única con problemas de caja. Con la desaceleración de los giros automáticos por coparticipación de impuestos nacionales y la reducción de las transferencias discrecionales de la Nación, varios gobernadores apuraron sus planes para emitir deuda en el mercado y otros empiezan a enfrentar dificultades para el pago de salarios. Entre estas últimas están Río Negro, Chubut, Entre Ríos y Santa Cruz, aunque cada caso difiere de los demás, en función del alineamiento de cada distrito con la Casa Rosada y sus distintas capacidades para acceder a ayudas del Tesoro.
Las recaudaciones propias de las provincias empezaron a dar señales de agotamiento en el segundo trimestre del año, y eso empeoró la situación de algunas más que de otras. Según un informe que difundió ayer el Instituto de Análisis Fiscal, los ingresos totales de los gobiernos provinciales crecerán durante este año a un ritmo del 25%, unos 10 puntos porcentuales por debajo de sus gastos y casi tres puntos menos de lo que crecerán los ingresos de la AFIP.
La preeminencia de Ingresos Brutos en las recaudaciones provinciales explica por qué el impacto de la desaceleración económico es mayor en el interior. En Buenos Aires, por caso, ese impuesto recauda diez veces más que los impuestos Automotor, Inmobiliario y de Sellos. El economista Ramiro Castiñeira, de Econométrica, subrayó ante BAE que «Ingresos Brutos es un impuesto muy procíclico: cuando la economía vuela, va muy para arriba, pero cuando se estanca, también cae muy fuerte».
A eso se suma que como no todos los impuestos nacionales se coparticipan, las transferencias automáticas por coparticipación crecen a un ritmo interanual de sólo un 17%, según los últimos datos disponibles, a mayo.
Algunos gobernadores como los justicialistas José Manuel De la Sota (Córdoba), Jorge Capitanich (Chaco) y Francisco «Paco» Pérez (Mendoza) optaron por salir a financiarse emitiendo deuda, ya sea para financiar obras o gasto corriente. De la Sota cerró ayer exitosamente la emisión de un bono en dólares por u$s 105 millones (ver aparte), mientras que Chaco lanzó esta misma semana un nuevo bono para pagar obras de tendido eléctrico.
Mas caro. Otros distritos aún no lograron hacerlo y se financian más caro. El municipio de Bariloche, el más poblado de Río Negro, viene pagando sueldos y aguinaldo gracias a adelantos de bancos privados desde hace meses. «Eso es porque Río Negro no puede asistirla. Y Chubut va a empezar a tener problemas también», dijo a este diario Mariano Lamothe, economista jefe de la consultora Abeceb.
El informe del IARAF estima que, en conjunto, las provincias tendrán un déficit primario de entre 20 mil y 33 mil millones de pesos este año. Agregando los vencimientos de deuda, el rojo podría ampliarse hasta $47 mil millones.
Lamothe destacó que distritos chicos como Entre Ríos «están cubriendo baches con fondos como los del Fondo Federal Solidario», nutrido por un 30% de lo recaudado por retenciones a las exportaciones del agro. Ese dinero, originalmente, estaba dirigido a la concreción de obras en el interior.
Las expectativas de los gobernadores alineados con el oficialismo siguen puestas en los giros de la Nación, pero esa fuente también tiene un límite. «El Banco Central transfirió $30 mil millones el año pasado al consolidado Nación-provincias. Este año, ese monto va a aumentar hasta $45 mil millones. Y durante el primer semestre se transfirieron sólo $4 mil millones. Ahora se viene el grueso, por cómo están ubicados los vencimientos de deuda de la Nación», apuntó Castiñeira.
En ese panorama, en algunas legislaturas ya circulan proyectos para crear nuevos impuestos provinciales. Según el IARAF, el esfuerzo debería hacerse por frenar los gastos. Pero los gobernadores saben que eso tendría un duro costo político de cara a las elecciones del año próximo.
