¿Qué esconde la reforma en el Banco Central?

La reforma de la Carta Orgánica del BCRA, impulsada por el Gobierno, abandona los criterios de prudencia financiera y económica , que informan las reglas y criterios normativos de estas instituciones en los bancos centrales de otros países del mundo. Ello ocurre tanto en lo que hace al monto y la determinación de las reservas internacionales que debe guardar la autoridad monetaria, como en cuanto al financiamiento disponible, proveniente de la emisión monetaria para el gobierno federal.
Nuestra historia ha sido muy ilustrativa y dramática en esos aspectos, y forma parte de nuestra memoria colectiva.
La laxitud en la normativa monetaria nos llevó a quitarle 13 ceros a la moneda , siendo que cada uno de ellos implica una devaluación del 1000%. No se necesita abundar en más información para otear el rumbo y la consecuencia que esta reforma implica. Un tema que no puede soslayarse es el volumen óptimo de reservas. Este ultimo, al igual que en otros países, depende inicialmente del régimen monetario que se adopte, así como de la amortiguación que se requiera asignar a la economía nacional, en materia de empleo, actividad productiva y vulnerabilidad fiscal, respecto al mercado internacional de capitales, como así también al sistema financiero doméstico.
En relación a lo primero, un régimen de flotación cambiaria libre no requiere reservas holgadas . Más aún, países como Nueva Zelanda prácticamente se desprendieron de sus reservas internacionales, para evitar la tentación de intervenir en la fijación del precio de la divisa extranjera. Por el contrario, un tipo de cambio administrado requiere un alto nivel de reservas, ya que las cantidades monetarias se vuelven endógenas al fijarse el precio de la divisa. El volumen de reservas se ubicará, seguramente, en exceso de la base monetaria si las operaciones financieras y externas tienen un alto grado de libertad. En cualquier caso, un menor nivel de reservas, como ocurre con todos los seguros parciales, aumentará la remuneración por riesgo que la falta de cobertura induce. El régimen de control de cambio dilata y demorara el mecanismo de nivelación, pero no lo puede impedir generar costos crecientes, en la medida que los agentes económicos descubren mecanismos para eludir sus consecuencias.
La reforma de la Carta Orgánica revela que la decisión es reducir las reservas internacionales aún más para financiar, por un período breve y agotable, el desequilibrio fiscal y de las cuentas externas que la inconsistencia de las políticas monetarias y de gasto público están generando.
Usar stocks para cubrir desequilibrios de flujo es una medida de extrema demagogia , con costos futuros que ya apreciamos en energía y ganadería. Estamos viviendo un ciclo excepcional de precios de nuestras commodities; si en esta época venturosa para el país, hemos ido perdiendo reservas, ¿cuál será nuestra perspectiva cuando vuelvan los precios a entornos menos favorables? En el fondo, esa es la característica del populismo como política pública: robamos el mañana para fomentar un falso bienestar presente.

Acerca de Nicolás Tereschuk (Escriba)

"Escriba" es Nicolás Tereschuk. Politólogo (UBA), Maestría en Sociologìa Económica (IDAES-UNSAM). Me interesa la política y la forma en que la política moldea lo económico (¿o era al revés?).

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