Antonis Samarás, líder del partido conservador Nueva Democracia, el más votado (29,7%, 129 escaños) anoche, ha recibido este lunes por la mañana el encargo de formar un Gobierno. Comienza así un proceso de negociación similar al que fracasó el mes pasado, lo que obligó a convocar estas nuevas elecciones. Samarás ya dijo anoche que busca un Gobierno de «salvación nacional».
El presidente, Karolos Papulias, ha declarado, al encargar al líder de ND que forme Gabinete, que existe «un imperativo categórico» de formar Gobierno inmediatamente. Y Samarás ha señalado, por su parte: «Es imperativo lograr un entendimiento nacional por parte de todos». El presidente le ha dado tres días de plazo.
Samarás tiene previsto reunirse esta tarde con Evangelos Venizelos, el máximo dirigente del Pasok, que quedó tercero en los comicios (12,3%, 33 escaños). Los socialistas han anunciado que apoyarán a su exsocio ND pero aún no han decidido si entrarán en el gobierno o se limitarán a dar apoyo parlamentario a los conservadores.
ND busca primero el apoyo del Pasok, puesto que juntos obtendrían mayoría absoluta.
Samarás ha asegurado, en conferencia de prensa, que cumplirá los compromisos pero ha añadido: «Simultáneamente, tendremos que incluir algunas enmiendas necesarias en el acuerdo de rescate, para aliviar a la gente de las catastróficas consecuencias del desempleo y las enormes dificultades».
«La crisis ha sido pospuesta, no necesariamente evitada», según el analista político Theodore Couloumbis, vicepresidente del think tank Eliamep, citado por Reuters.
«Para que este Gobierno dure, tendrá que mostrar resultados. No puede seguir con un desempleo juvenil del 50% y el quinto año consecutivo de recesión», ha añadido Couloumbis.
«El pueblo heleno ha votado hoy [por ayer] por la permanencia del país en la Eurozona y a favor de las fuerzas políticas que traerán empleo desarrollo y empleo», declaró Samarás anoche. «Para eso invitamos a todas las fuerzas políticas que creen a eso a participar a un Gobierno de salvación nacional», añadió.
ND y el Pasok, partidos que ahora aceptan la austeridad, han reinado en la política griega durante las últimas décadas. Un panorama en el que ha irrumpido con fuerza la izquierda radical representada por la izquierda radical de Syriza (26,9%, 71 escaños) y la extrema derecha de los neonazis de Aurora Dorada (18%).
El presidente, Karolos Papulias, ha declarado, al encargar al líder de ND que forme Gabinete, que existe «un imperativo categórico» de formar Gobierno inmediatamente. Y Samarás ha señalado, por su parte: «Es imperativo lograr un entendimiento nacional por parte de todos». El presidente le ha dado tres días de plazo.
Samarás tiene previsto reunirse esta tarde con Evangelos Venizelos, el máximo dirigente del Pasok, que quedó tercero en los comicios (12,3%, 33 escaños). Los socialistas han anunciado que apoyarán a su exsocio ND pero aún no han decidido si entrarán en el gobierno o se limitarán a dar apoyo parlamentario a los conservadores.
ND busca primero el apoyo del Pasok, puesto que juntos obtendrían mayoría absoluta.
Samarás ha asegurado, en conferencia de prensa, que cumplirá los compromisos pero ha añadido: «Simultáneamente, tendremos que incluir algunas enmiendas necesarias en el acuerdo de rescate, para aliviar a la gente de las catastróficas consecuencias del desempleo y las enormes dificultades».
«La crisis ha sido pospuesta, no necesariamente evitada», según el analista político Theodore Couloumbis, vicepresidente del think tank Eliamep, citado por Reuters.
«Para que este Gobierno dure, tendrá que mostrar resultados. No puede seguir con un desempleo juvenil del 50% y el quinto año consecutivo de recesión», ha añadido Couloumbis.
«El pueblo heleno ha votado hoy [por ayer] por la permanencia del país en la Eurozona y a favor de las fuerzas políticas que traerán empleo desarrollo y empleo», declaró Samarás anoche. «Para eso invitamos a todas las fuerzas políticas que creen a eso a participar a un Gobierno de salvación nacional», añadió.
ND y el Pasok, partidos que ahora aceptan la austeridad, han reinado en la política griega durante las últimas décadas. Un panorama en el que ha irrumpido con fuerza la izquierda radical representada por la izquierda radical de Syriza (26,9%, 71 escaños) y la extrema derecha de los neonazis de Aurora Dorada (18%).