El Gobierno sigue en retroceso. Luego de un leve repunte en junio de algunos de los indicadores, julio se acerca a su final con nuevas malas noticias para la gestión de Cambiemos. Según la encuesta mensual de la Universidad de San Andrés, el nivel de satisfacción se ubica en el valor más bajo registrado (22%), mientras que la proporción de personas disconformes alcanza su máximo (76%). El retroceso también alcanza a las expectativas con la marcha del Gobierno y a la imagen del presidente Mauricio Macri y de la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal que, de todos modos, sigue siendo la dirigente más valorada. Otro dato inquietante para Macri es el alto rechazo que tiene en la ciudad de Buenos Aires, su plataforma de su lanzamiento. Sólo el 25% aprueba su gestión.
Desde su pico de mayor valoración, en octubre de 2017, que coincidió con el triunfo legislativo de Cambiemos, la satisfacción con la marcha del país cayó 31 puntos. Ese retroceso se da en todos los sectores sociales, aunque según el nivel socioeconómico la caída se produjo en fases diferentes. De octubre a diciembre cayó en los sectores más bajos; de enero a abril, en los sectores medios, y desde entonces, de manera más pronunciada en los sectores altos y bajos. En el ultimo mes, no obstante, se registra un leve aumento de la satisfacción en los sectores altos (35%), mientras que sólo el 23% de los sectores medios y el 19% de los sectores bajos se considera satisfecho.
En cuanto a la imagen del Gobierno en sí, el retroceso es menos precipitado, pero más persistente. Del 66% en la coyuntura de la elección de medio término a una aprobación de 45% en junio y de 37% en julio. Esa aprobación es más alta a medida que aumenta el nivel socioeconómico y a medida que aumenta la edad de los entrevistados. Las diferencias etarias son estadísticamente significativas con amplias variaciones en satisfacción: llega al 47% en el segmento etario de adulto mayores que la encuesta de San Andrés llama “silenciosa” y llega al 31% en la llamada Gen “Z”. La satisfacción con las diferentes áreas de políticas públicas también sigue en baja. Obras Públicas sigue siendo el área mejor ponderada (45%), junto a Relaciones Exteriores (34%). Justicia (14%) y Economía (12%), en tanto, están en el otro extremo.
Desde su pico de mayor valoración, en octubre de 2017, que coincidió con el triunfo legislativo de Cambiemos, la satisfacción con la marcha del país cayó 31 puntos. Ese retroceso se da en todos los sectores sociales, aunque según el nivel socioeconómico la caída se produjo en fases diferentes. De octubre a diciembre cayó en los sectores más bajos; de enero a abril, en los sectores medios, y desde entonces, de manera más pronunciada en los sectores altos y bajos. En el ultimo mes, no obstante, se registra un leve aumento de la satisfacción en los sectores altos (35%), mientras que sólo el 23% de los sectores medios y el 19% de los sectores bajos se considera satisfecho.
En cuanto a la imagen del Gobierno en sí, el retroceso es menos precipitado, pero más persistente. Del 66% en la coyuntura de la elección de medio término a una aprobación de 45% en junio y de 37% en julio. Esa aprobación es más alta a medida que aumenta el nivel socioeconómico y a medida que aumenta la edad de los entrevistados. Las diferencias etarias son estadísticamente significativas con amplias variaciones en satisfacción: llega al 47% en el segmento etario de adulto mayores que la encuesta de San Andrés llama “silenciosa” y llega al 31% en la llamada Gen “Z”. La satisfacción con las diferentes áreas de políticas públicas también sigue en baja. Obras Públicas sigue siendo el área mejor ponderada (45%), junto a Relaciones Exteriores (34%). Justicia (14%) y Economía (12%), en tanto, están en el otro extremo.