Un millón de turistas viajaron por el país entre el jueves 7 y el domingo 10 de julio, con un gasto de $1.740 millones en las ciudades que forman el circuito turístico nacional, mientras que los comercios vendieron poco porque el turismo fue muy «gasolero», según un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa.
El feriado puente por el 9 de Julio fue más intenso de lo esperado porque coincidió con el receso escolar en 17 provincias. Según estimaciones preliminares, al menos 1 millón de personas salió de viaje, realizando un gasto promedio directo de $1.740 millones en las ciudades que forman parte del turismo nacional en esta época del año.
La permanencia promedio del fin de semana fue de 3 días y el gasto diario se ubicó en $580 promedio por turista, aunque con una alta dispersión entre ciudades.
Las más económicas se ubicaron en la zona litoral, el interior de la provincia de Buenos Aires, y algunas de la zona de Cuyo como San Juan, mientras que las más onerosas se localizaron en la región patagónica, noroeste y la costa argentina.
«La falta de poder adquisitivo se notó, y en general se paseó mucho pero se gastó poco. La gente eligió actividades al aire libre, se las rebuscó para comer barato, y aprovechó el caudal de ofertas artísticas gratuitas que ofrecieron casi todas las ciudades del país por el Bicentenario», indicó CAME.
En lo que va de 2016, ya hubo 4 fines de semanas largos: Carnaval, Semana Santa (que este año coincidió con el Día de la Memoria), 20 de Junio (que este año coincidió con el homenaje al general Güemes) y 9 de Julio, donde viajaron 5.939.000 turistas con pernocte y dejaron ingresos directos por $10.913 millones en las economías regionales del país.
El feriado puente por el 9 de Julio fue más intenso de lo esperado porque coincidió con el receso escolar en 17 provincias. Según estimaciones preliminares, al menos 1 millón de personas salió de viaje, realizando un gasto promedio directo de $1.740 millones en las ciudades que forman parte del turismo nacional en esta época del año.
La permanencia promedio del fin de semana fue de 3 días y el gasto diario se ubicó en $580 promedio por turista, aunque con una alta dispersión entre ciudades.
Las más económicas se ubicaron en la zona litoral, el interior de la provincia de Buenos Aires, y algunas de la zona de Cuyo como San Juan, mientras que las más onerosas se localizaron en la región patagónica, noroeste y la costa argentina.
«La falta de poder adquisitivo se notó, y en general se paseó mucho pero se gastó poco. La gente eligió actividades al aire libre, se las rebuscó para comer barato, y aprovechó el caudal de ofertas artísticas gratuitas que ofrecieron casi todas las ciudades del país por el Bicentenario», indicó CAME.
En lo que va de 2016, ya hubo 4 fines de semanas largos: Carnaval, Semana Santa (que este año coincidió con el Día de la Memoria), 20 de Junio (que este año coincidió con el homenaje al general Güemes) y 9 de Julio, donde viajaron 5.939.000 turistas con pernocte y dejaron ingresos directos por $10.913 millones en las economías regionales del país.