Argentina
Solá: nuevo aliado con viejos amigos K
El ex gobernador vuelve al redil
Felipe Solá
Por Ariel Maciel
“La principal construcción política de Felipe es estar en el lugar correcto para conseguir lo que se propone”, es la definición que hace sobre Felipe Solá un dirigente bonaerense, que supo ser puntal de la administración que antecedió a Daniel Scioli. El ex gobernador supo ser unos de los primeros que pegó el salto del duhaldismo a las huestes del espacio que comandaba el por entonces presidente Néstor Kirchner. Entre aquel 2003 y hoy pasaron muchas fotos políticas y electorales. Sin posibilidad de reelección, fue tope de la lista que llevó en 2007 a Cristina Fernández a la presidencia. Pero abandonó el oficialismo luego de verse frustrado su objetivo de comandar la Cámara de Diputados. Sufrió el hostigamiento del kirchnerismo de paladar negro y fue artífice de la única derrota electoral –2009– que sufrió el peronismo desde su retorno a la Casa Rosada.
El tándem con Francisco de Narváez y Mauricio Macri en Buenos Aires tuvo un corto recorrido y se diluyó con el olvido cada vez más rápido de los reclamos del campo.
Aún con bloque propio en el Congreso, el bonaerense sueña con volver a ocupar la gobernación provincial y hacer pie en un territorio al que conoce bien. Así, dejó atrás sus charlas con Daniel Scioli y salió a confrontarlo públicamente, alejándose al mismo ritmo en que De Narváez se acerca al gobernador bonaerense, según denuncian los propios kirchneristas.
La renovada relación con la Casa Rosada le da margen al oficialismo de romper una alianza del peronismo tradicional –Hugo Moyano, Luis Barrionuevo, José Pampuro, De Narváez, Roberto Lavagna– con Scioli, ante una eventual confrontación electoral, más tarde (2015), o más temprano (2013).
“Quiero volver a ser gobernador”, confiesa Solá en círculos cada vez menos cerrados. Por ahora mantiene su discurso crítico con el objetivo de sumarle al kirchnerismo su aporte de votos proveniente de la clase media.
“Puede volver cuando quiera, siempre que reconozca a Cristina como la jefa indiscutida de este espacio”, aclaran desde el kirchnerismo. Si bien la estrategia que se teje en Olivos tiene al PJ corrido del centro del armado, los peronistas confían en que sea nuevamente el partido la columna vertebral de las próximas elecciones. Incluso, muchos vaticinan un enroque de candidatos que compitieron en 2009: Solá por Scioli en el FpV, que pondría en la cabeza de diputados nacionales a Alicia Kirchner.
Solá: nuevo aliado con viejos amigos K
El ex gobernador vuelve al redil
Felipe Solá
Por Ariel Maciel
“La principal construcción política de Felipe es estar en el lugar correcto para conseguir lo que se propone”, es la definición que hace sobre Felipe Solá un dirigente bonaerense, que supo ser puntal de la administración que antecedió a Daniel Scioli. El ex gobernador supo ser unos de los primeros que pegó el salto del duhaldismo a las huestes del espacio que comandaba el por entonces presidente Néstor Kirchner. Entre aquel 2003 y hoy pasaron muchas fotos políticas y electorales. Sin posibilidad de reelección, fue tope de la lista que llevó en 2007 a Cristina Fernández a la presidencia. Pero abandonó el oficialismo luego de verse frustrado su objetivo de comandar la Cámara de Diputados. Sufrió el hostigamiento del kirchnerismo de paladar negro y fue artífice de la única derrota electoral –2009– que sufrió el peronismo desde su retorno a la Casa Rosada.
El tándem con Francisco de Narváez y Mauricio Macri en Buenos Aires tuvo un corto recorrido y se diluyó con el olvido cada vez más rápido de los reclamos del campo.
Aún con bloque propio en el Congreso, el bonaerense sueña con volver a ocupar la gobernación provincial y hacer pie en un territorio al que conoce bien. Así, dejó atrás sus charlas con Daniel Scioli y salió a confrontarlo públicamente, alejándose al mismo ritmo en que De Narváez se acerca al gobernador bonaerense, según denuncian los propios kirchneristas.
La renovada relación con la Casa Rosada le da margen al oficialismo de romper una alianza del peronismo tradicional –Hugo Moyano, Luis Barrionuevo, José Pampuro, De Narváez, Roberto Lavagna– con Scioli, ante una eventual confrontación electoral, más tarde (2015), o más temprano (2013).
“Quiero volver a ser gobernador”, confiesa Solá en círculos cada vez menos cerrados. Por ahora mantiene su discurso crítico con el objetivo de sumarle al kirchnerismo su aporte de votos proveniente de la clase media.
“Puede volver cuando quiera, siempre que reconozca a Cristina como la jefa indiscutida de este espacio”, aclaran desde el kirchnerismo. Si bien la estrategia que se teje en Olivos tiene al PJ corrido del centro del armado, los peronistas confían en que sea nuevamente el partido la columna vertebral de las próximas elecciones. Incluso, muchos vaticinan un enroque de candidatos que compitieron en 2009: Solá por Scioli en el FpV, que pondría en la cabeza de diputados nacionales a Alicia Kirchner.