A horas de que Mauricio Macri anuncie que buscará su reelección en la Ciudad, surgió la posibilidad de que Felipe Solá lance en los próximos días su candidatura a presidente e incluya al PRO en el espacio. Además, el jefe de gobierno porteño mantuvo el jueves por la noche una tensa reunión con Francisco de Narváez que dejó a ambos dirigentes al borde de la separación definitiva.
El macrismo está en terapia intensiva y hoy a las 14, su líder político intentará reanimarlo cuando anuncie que abandona sus ambiciones presidenciales y se lance por la reelección en la Ciudad. La fuerza que en este momento le falta a Macri –deprimido por su fracaso de escala nacional– la pondrán los militantes PRO y los cientos de globos de colores que decorarán el club 17 de Agosto de Villa Pueyrredón.
Estarán presentes todos los ministros de la Ciudad y los legisladores nacionales y diputados porteños que integran el partido. Gabriela Michetti y Horacio Rodríguez Larreta se verán nuevamente las caras luego de la batalla que libraron con el objetivo de transformarse en los delfines del empresario en la Ciudad, algo que tuvo un costo excesivo para ambos y para el PRO.
Su fallida candidatura a la presidencia es un error que pocos perdonan a Macri. Le valió incluso los reproches de su “amigo” –así se define el consultor ecuatoriano Jaime Durán Barba–, quien siempre bregó por un segundo mandato porteño antes de embarcarse en el proyecto nacional.
Muy a lo lejos se divisa una luz de esperanza para el PRO. Felipe Solá anunciaría su postulación presidencial en los próximos días y son varios los heridos del macrismo que sueñan con subirse a su ambulancia. “Se empezó a conversar son Felipe, el tema no está verde”, le dijo a Tiempo Argentino un legislador macrista que de todas formas no se mostró demasiado optimista: “No creo que pase nada. Se necesita mucho tiempo para construir un candidato. Duhalde está mucho más lanzado”, reflexionó el diputado del PRO, proclive a “jugar con el Cabezón.”
Las conversaciones las estarían llevando adelante dirigentes de la provincia de Buenos Aires de buena relación con el felipismo. De hecho para las elecciones de 2009 Solá –junto a De Narváez y Macri- fue una de las patas del acuerdo que derrotó a Néstor Kirchner.
El ex gobernador bonaerense empezará pasado mañana con su campaña gráfica y comenzarán luego las apariciones mediáticas, algo que hasta ahora el diputado del PJ Federal venía evitando.
Según dicen en el felipismo luego de la muerte de Kirchner, Solá interpretó que la polarización que percibía en la sociedad había comenzado a menguar, pero sus ideas generaron roces con los demás referentes del espacio, Eduardo Duhalde, Alberto Rodríguez Saá y Mario Das Neves. En el PJ disidente podría darse un hecho curioso y es que de sus cuatro aspirantes originales, tres terminen presentando postulaciones presidenciales.
Por otra parte el jueves por la noche Macri se juntó con Francisco De Narvaéz para intentar sumarse al acuerdo que el diputado intenta concretar con el radicalismo. Según cuentan la oferta del “Colorado” fue casi un desplante y le propuso al jefe de Gobierno porteño anexarse una vez concluídas las conversaciones, algo que disgustó al alcalde. Además De Narváez le habría pedido cinco lugares en las listas de legisladores, algo imposible de conceder en medio del hervidero que es PRO hoy en día. El sábado próximo los partidos deberán presentar sus listas para la ciudad y al parecer De Narváez propuso una solución salomónica: “Lo que me dés vos, va a ser lo que te dé yo en la provincia”. <
El macrismo está en terapia intensiva y hoy a las 14, su líder político intentará reanimarlo cuando anuncie que abandona sus ambiciones presidenciales y se lance por la reelección en la Ciudad. La fuerza que en este momento le falta a Macri –deprimido por su fracaso de escala nacional– la pondrán los militantes PRO y los cientos de globos de colores que decorarán el club 17 de Agosto de Villa Pueyrredón.
Estarán presentes todos los ministros de la Ciudad y los legisladores nacionales y diputados porteños que integran el partido. Gabriela Michetti y Horacio Rodríguez Larreta se verán nuevamente las caras luego de la batalla que libraron con el objetivo de transformarse en los delfines del empresario en la Ciudad, algo que tuvo un costo excesivo para ambos y para el PRO.
Su fallida candidatura a la presidencia es un error que pocos perdonan a Macri. Le valió incluso los reproches de su “amigo” –así se define el consultor ecuatoriano Jaime Durán Barba–, quien siempre bregó por un segundo mandato porteño antes de embarcarse en el proyecto nacional.
Muy a lo lejos se divisa una luz de esperanza para el PRO. Felipe Solá anunciaría su postulación presidencial en los próximos días y son varios los heridos del macrismo que sueñan con subirse a su ambulancia. “Se empezó a conversar son Felipe, el tema no está verde”, le dijo a Tiempo Argentino un legislador macrista que de todas formas no se mostró demasiado optimista: “No creo que pase nada. Se necesita mucho tiempo para construir un candidato. Duhalde está mucho más lanzado”, reflexionó el diputado del PRO, proclive a “jugar con el Cabezón.”
Las conversaciones las estarían llevando adelante dirigentes de la provincia de Buenos Aires de buena relación con el felipismo. De hecho para las elecciones de 2009 Solá –junto a De Narváez y Macri- fue una de las patas del acuerdo que derrotó a Néstor Kirchner.
El ex gobernador bonaerense empezará pasado mañana con su campaña gráfica y comenzarán luego las apariciones mediáticas, algo que hasta ahora el diputado del PJ Federal venía evitando.
Según dicen en el felipismo luego de la muerte de Kirchner, Solá interpretó que la polarización que percibía en la sociedad había comenzado a menguar, pero sus ideas generaron roces con los demás referentes del espacio, Eduardo Duhalde, Alberto Rodríguez Saá y Mario Das Neves. En el PJ disidente podría darse un hecho curioso y es que de sus cuatro aspirantes originales, tres terminen presentando postulaciones presidenciales.
Por otra parte el jueves por la noche Macri se juntó con Francisco De Narvaéz para intentar sumarse al acuerdo que el diputado intenta concretar con el radicalismo. Según cuentan la oferta del “Colorado” fue casi un desplante y le propuso al jefe de Gobierno porteño anexarse una vez concluídas las conversaciones, algo que disgustó al alcalde. Además De Narváez le habría pedido cinco lugares en las listas de legisladores, algo imposible de conceder en medio del hervidero que es PRO hoy en día. El sábado próximo los partidos deberán presentar sus listas para la ciudad y al parecer De Narváez propuso una solución salomónica: “Lo que me dés vos, va a ser lo que te dé yo en la provincia”. <
