En noviembre del año pasado nosotros, el Vatayón Militante, organizamos una jornada cultural en el local que nos prestaban en Corrientes y Dorrego, Chacarita, dentro de la Comuna 15.
A ese evento, fueron invitados e invitadas personas privadas de su libertad, que participaban de los talleres formales de educación de diferentes penales bajo la órbita del Servicio Penitenciario Federal, cuyo director es el compañero Víctor Hortel.
Una semana antes del evento, se hicieron presentes agentes del Servicio a analizar, chequear y detectar qué cuestiones de seguridad eran pertinentes para poder a llevar a cabo dicha gesta, dicho encuentro, dicha situación.
El día, finalmente llegó.
El gran despliegue de camiones del SPF, agentes con sus ropas de trabajo y autos particulares, llamaron la atención del barrio.
Ingresaron las personas privadas de su libertad al local y se dividieron en sectores.
Cada uno de los sectores, tenía como consigna a un mínimo de cinco guardias, todos ellos, adentro del evento, vestidos de civil.
En esa jornada, sólo se sirvió pizza y gaseosa, estando terminantemente prohibida la venta de cualquier tipo de bebida alcohólica.
Vinieron internas que bailaron sus danzas típicas regionales, vino Olga Guzmán, la interna también famosa que leyó sus poemas editados.
Hubo un número de tango para todos nosotros, y luego un número de percusión a cargo de la gente de educación del penal de Ezeiza.
También hubo otros números musicales, y un karaoke en el que cantábamos personas privadas de su libertad y personas privadas del encierro.
Todo dentro del marco de una jornada cultural.
Y como toda la cultura es política, y nosotros no escondemos nunca nada, hacemos política y la política la planteamos, entre otros aspectos, desde la cultura.
Así, se dieron momentos de enorme compañerismo, de inclusión y visibilización: el evento fue publicado una semana antes y la convocatoria era abierta a cualquiera que quisiera venir, de cualquier lugar, con entrada totalmente gratis.
Fue uno de los eventos a los que más gente concurrió, en la historia del Vatayón.
Y para nosotros, cada uno y una de las personas privadas de su libertad, son exactamente iguales: ya fueron condenados o están esperando una condena o un veredicto por el delito que cometieron o no.
Desde ese lugar, desde la deuda social que debe recoger la sociedad y con ésta, la militancia, es que trabajamos con todos los internos e internas, en igual condiciones.
Jamás nosotros preguntamos a ninguno o ninguna por qué están en una cárcel, pero siempre les pedimos que nos pregunten a nosotros por qué y para qué estamos allí, y si un caso tiene relevancia pública, es una cuestión incidental: todos y todas las personas privadas de su libertad, son exactamente iguales.
La respuesta, con aristas, es siempre la misma: estamos allí porque creemos en un proyecto de país inclusivo, de igualdad, justo y soberano.
Un país y un estado que está trazado por la matriz política desde que Néstor nos devolvió a todos a la decisión como un factor determinante.
Un gobierno en el que Cristina nos enseña día a día que el único agente de cambio es la política.
Y porque creemos y sabemos que la cultura siempre es política, hacemos política desde la cultura.
Porque todo es política.
Cada decisión es política.
Cada momento en el que interactuamos con otra persona en cualquier estrato, es política y cuando dejamos de hacerlo, también estamos haciendo política.
Porque la política es decisión.
El Vatayón, por otro lado, no decide quién viene y quién no: eso lo decide en primera instancia el interno que se anota en el evento, y luego debe ser autorizado por cada juez en particular, de cada juzgado en especial, analizando cada caso específico y el juez es quien firma esa salida transitoria, que es parte del derecho de la persona privada de su libertad.
Más acá de la cuestión, cada video y cada foto que publican los grandes medios opositores y desestabilizadores, son propiedad de Vatayón, y están publicados tanto en el Facebook de la agrupación, como en el canal de youtube de la misma.
La investigación, entonces, no fue más que una nariz metida en un lugar al que cualquiera puede acceder, desde el día que hacemos cada una de las cosas.
Nada de lo que hacemos está oculto.
Nada de lo que hacemos no se puede mostrar.
Todo es para todos y todas.
Y ese todo, es, siempre y ante todo, político.
«Cambio, es el nombre del futuro»
Néstor Carlos Kirchner
Juan Soriano
Referente del Vatayón
Diana Pinasco
Coordinadora general de Talleres y Actividades Culturales de Vatayón
Todas estas fotos están publicadas desde el día que se realizó el evento, el año pasado, en el Facebook de Vatayón.
A ese evento, fueron invitados e invitadas personas privadas de su libertad, que participaban de los talleres formales de educación de diferentes penales bajo la órbita del Servicio Penitenciario Federal, cuyo director es el compañero Víctor Hortel.
Una semana antes del evento, se hicieron presentes agentes del Servicio a analizar, chequear y detectar qué cuestiones de seguridad eran pertinentes para poder a llevar a cabo dicha gesta, dicho encuentro, dicha situación.
El día, finalmente llegó.
El gran despliegue de camiones del SPF, agentes con sus ropas de trabajo y autos particulares, llamaron la atención del barrio.
Ingresaron las personas privadas de su libertad al local y se dividieron en sectores.
Cada uno de los sectores, tenía como consigna a un mínimo de cinco guardias, todos ellos, adentro del evento, vestidos de civil.
En esa jornada, sólo se sirvió pizza y gaseosa, estando terminantemente prohibida la venta de cualquier tipo de bebida alcohólica.
Vinieron internas que bailaron sus danzas típicas regionales, vino Olga Guzmán, la interna también famosa que leyó sus poemas editados.
Hubo un número de tango para todos nosotros, y luego un número de percusión a cargo de la gente de educación del penal de Ezeiza.
También hubo otros números musicales, y un karaoke en el que cantábamos personas privadas de su libertad y personas privadas del encierro.
Todo dentro del marco de una jornada cultural.
Y como toda la cultura es política, y nosotros no escondemos nunca nada, hacemos política y la política la planteamos, entre otros aspectos, desde la cultura.
Así, se dieron momentos de enorme compañerismo, de inclusión y visibilización: el evento fue publicado una semana antes y la convocatoria era abierta a cualquiera que quisiera venir, de cualquier lugar, con entrada totalmente gratis.
Fue uno de los eventos a los que más gente concurrió, en la historia del Vatayón.
Y para nosotros, cada uno y una de las personas privadas de su libertad, son exactamente iguales: ya fueron condenados o están esperando una condena o un veredicto por el delito que cometieron o no.
Desde ese lugar, desde la deuda social que debe recoger la sociedad y con ésta, la militancia, es que trabajamos con todos los internos e internas, en igual condiciones.
Jamás nosotros preguntamos a ninguno o ninguna por qué están en una cárcel, pero siempre les pedimos que nos pregunten a nosotros por qué y para qué estamos allí, y si un caso tiene relevancia pública, es una cuestión incidental: todos y todas las personas privadas de su libertad, son exactamente iguales.
La respuesta, con aristas, es siempre la misma: estamos allí porque creemos en un proyecto de país inclusivo, de igualdad, justo y soberano.
Un país y un estado que está trazado por la matriz política desde que Néstor nos devolvió a todos a la decisión como un factor determinante.
Un gobierno en el que Cristina nos enseña día a día que el único agente de cambio es la política.
Y porque creemos y sabemos que la cultura siempre es política, hacemos política desde la cultura.
Porque todo es política.
Cada decisión es política.
Cada momento en el que interactuamos con otra persona en cualquier estrato, es política y cuando dejamos de hacerlo, también estamos haciendo política.
Porque la política es decisión.
El Vatayón, por otro lado, no decide quién viene y quién no: eso lo decide en primera instancia el interno que se anota en el evento, y luego debe ser autorizado por cada juez en particular, de cada juzgado en especial, analizando cada caso específico y el juez es quien firma esa salida transitoria, que es parte del derecho de la persona privada de su libertad.
Más acá de la cuestión, cada video y cada foto que publican los grandes medios opositores y desestabilizadores, son propiedad de Vatayón, y están publicados tanto en el Facebook de la agrupación, como en el canal de youtube de la misma.
La investigación, entonces, no fue más que una nariz metida en un lugar al que cualquiera puede acceder, desde el día que hacemos cada una de las cosas.
Nada de lo que hacemos está oculto.
Nada de lo que hacemos no se puede mostrar.
Todo es para todos y todas.
Y ese todo, es, siempre y ante todo, político.
«Cambio, es el nombre del futuro»
Néstor Carlos Kirchner
Juan Soriano
Referente del Vatayón
Diana Pinasco
Coordinadora general de Talleres y Actividades Culturales de Vatayón
Todas estas fotos están publicadas desde el día que se realizó el evento, el año pasado, en el Facebook de Vatayón.