Salta. Especial – 20/07/12
Cinco policías fueron detenidos por torturar a dos jóvenes en una comisaría de la ciudad de General Güemes, unos 55 kilómetros al este de la capital salteña. Fue el propio ministro de Seguridad de la provincia, Eduardo Sylvester, quien realizó la denuncia penal en contra de los agentes, a quienes se los ve cuando atormentan a los detenidos mientras uno filma con un celular las tremendas escenas .
“El Gobierno de la provincia está convencido de que estos hombres no representan a la fuerza policial salteña”, dijo el ministro. Y fue más allá: “Estas personas son delincuentes vestidos de policías . Se ordenó la detención de las cinco personas porque no estamos dispuestos a tolerar este tipo de cosas”, remarcó Sylvester.
Los policías registraron las imágenes y las subieron a Internet, donde según la versión oficial fueron detectadas por sus propios compañeros , quienes dieron aviso a sus superiores. Las imágenes muestran el momento en que dos jóvenes, presuntamente detenidos por el robo a un domicilio particular, son torturados en el patio trasero de la seccional. Uno de los policías, vestido de civil pero bien abrigado para el frío, se para frente a uno de ellos –que apenas tiene puesto un slip–, le coloca una bolsa en la cabeza mientras le pregunta por los objetos robados.
“No sé nada, te lo juro Gordito”, le responde el detenido al policía, casi al borde del llanto . El agente entonces le ajusta la bolsa en la base del cuello para impedir por completo la entrada de oxígeno, en lo que se conoce como “submarino seco”. Allí el torturado no da más, cae al suelo y, entre sollozos, le pide que por favor lo deje de maltratar. “Bastaaaaa”, grita.
Al fondo se observa al otro detenido, arrodillado, mientras un policía le sostiene ambos brazos hacia arriba para producirle dolor. Luego otro agente la arroja agua en la cabeza. No se escuchan sus voces, aunque sí se nota en el rostro de los torturadores cierto placer.
Lo que no queda del todo claro es si los involucrados sabían que se los estaba filmando . En un momento, quien tiene el celular que filma va a buscar agua con un balde y da la sensación de que el teléfono está escondido entre su ropa.
Algunos voceros especulaban ayer con una interna entre los propios policías, que decidió a uno de ellos a poner al descubierto esta clase de torturas y vejámenes.
Si se toma en cuenta que el detenido lo trataba de “Gordito” a quien lo torturaba, también existe la presunción de que no es la primera vez que se usaban estos métodos ilegales de interrogatorio..
Según pudo averiguar Clarín , en los próximos días se presentarían más denuncias contra personal de la comisaría de Güemes, como así también de otras dependencias del interior provincial. El video que salió a la luz, y la posterior denuncia del propio ministro de Seguridad, quizás les den las garantías a quienes podrían haber sufrido este tipo de abusos en otras comisarías.
Sylvester aseguró ayer que tras investigar lo ocurrido solicitó una audiencia con el juez de turno, Pablo Farah ( el mismo que investiga la muerte de las amigas Luján Peñalva y Yanina Nüesch ). “Me presenté personalmente junto al jefe de Policía por orden expresa del gobernador (Juan Manuel Urtubey, del FPV) y realizamos una denuncia contra de los efectivos policiales que habrían cometido estos hechos ilícitos de agresiones físicas a detenidos ”, dijo.
Cinco policías fueron detenidos por torturar a dos jóvenes en una comisaría de la ciudad de General Güemes, unos 55 kilómetros al este de la capital salteña. Fue el propio ministro de Seguridad de la provincia, Eduardo Sylvester, quien realizó la denuncia penal en contra de los agentes, a quienes se los ve cuando atormentan a los detenidos mientras uno filma con un celular las tremendas escenas .
“El Gobierno de la provincia está convencido de que estos hombres no representan a la fuerza policial salteña”, dijo el ministro. Y fue más allá: “Estas personas son delincuentes vestidos de policías . Se ordenó la detención de las cinco personas porque no estamos dispuestos a tolerar este tipo de cosas”, remarcó Sylvester.
Los policías registraron las imágenes y las subieron a Internet, donde según la versión oficial fueron detectadas por sus propios compañeros , quienes dieron aviso a sus superiores. Las imágenes muestran el momento en que dos jóvenes, presuntamente detenidos por el robo a un domicilio particular, son torturados en el patio trasero de la seccional. Uno de los policías, vestido de civil pero bien abrigado para el frío, se para frente a uno de ellos –que apenas tiene puesto un slip–, le coloca una bolsa en la cabeza mientras le pregunta por los objetos robados.
“No sé nada, te lo juro Gordito”, le responde el detenido al policía, casi al borde del llanto . El agente entonces le ajusta la bolsa en la base del cuello para impedir por completo la entrada de oxígeno, en lo que se conoce como “submarino seco”. Allí el torturado no da más, cae al suelo y, entre sollozos, le pide que por favor lo deje de maltratar. “Bastaaaaa”, grita.
Al fondo se observa al otro detenido, arrodillado, mientras un policía le sostiene ambos brazos hacia arriba para producirle dolor. Luego otro agente la arroja agua en la cabeza. No se escuchan sus voces, aunque sí se nota en el rostro de los torturadores cierto placer.
Lo que no queda del todo claro es si los involucrados sabían que se los estaba filmando . En un momento, quien tiene el celular que filma va a buscar agua con un balde y da la sensación de que el teléfono está escondido entre su ropa.
Algunos voceros especulaban ayer con una interna entre los propios policías, que decidió a uno de ellos a poner al descubierto esta clase de torturas y vejámenes.
Si se toma en cuenta que el detenido lo trataba de “Gordito” a quien lo torturaba, también existe la presunción de que no es la primera vez que se usaban estos métodos ilegales de interrogatorio..
Según pudo averiguar Clarín , en los próximos días se presentarían más denuncias contra personal de la comisaría de Güemes, como así también de otras dependencias del interior provincial. El video que salió a la luz, y la posterior denuncia del propio ministro de Seguridad, quizás les den las garantías a quienes podrían haber sufrido este tipo de abusos en otras comisarías.
Sylvester aseguró ayer que tras investigar lo ocurrido solicitó una audiencia con el juez de turno, Pablo Farah ( el mismo que investiga la muerte de las amigas Luján Peñalva y Yanina Nüesch ). “Me presenté personalmente junto al jefe de Policía por orden expresa del gobernador (Juan Manuel Urtubey, del FPV) y realizamos una denuncia contra de los efectivos policiales que habrían cometido estos hechos ilícitos de agresiones físicas a detenidos ”, dijo.
