La Casa Rosada aumentó ayer la presión sobre el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, por el traspaso del subterráneo, al enviar un proyecto de ley al Congreso que también incluye la transferencia de las 33 líneas de colectivos que operan en la Capital y el tranvía de Puerto Madero.
Ambos servicios reciben un subsidio del Estado nacional de unos 1000 millones de pesos por año, que la Casa Rosada no mantendría. Por esa razón, Macri se vería obligado a tener que afrontar ese costo o a disponer aumentos de tarifas de modo similar a las de los subterráneos, como hizo cuando aceptó negociar su traspaso.
El proyecto de la Casa Rosada ingresó anoche en el Senado -el oficialismo prevé debatirlo en dos semanas- y tomó por sorpresa a la administración macrista, que no esperaba esa decisión de Cristina Kirchner. La iniciativa establece que le corresponde al gobierno porteño «la competencia y fiscalización de los servicios públicos de transporte de pasajeros a nivel subterráneos y premetro». Y de inmediato incluye «el transporte automotor y de tranvía cuya prestación corresponda al territorio» porteño.
Voceros de la administración macrista afirmaron anoche que se tomarán tiempo para analizar los futuros pasos, aunque sostuvieron que «en el proyecto no queda claro quién se queda con la potestad tarifaria».
Supeditaron el cumplimiento de la norma, motorizada por Cristina Kirchner, a su ratificación por parte de la Legislatura porteña, en la que el macrismo mantiene la primera minoría. Pero insistieron en que el Gobierno busca dañar la imagen de Macri en el electorado de cara a 2015. «Quieren hacer de esto una pelea de unitarios contra federales», se quejaron en el gobierno porteño. Como prueba de este hecho, desde el macrismo recordaron las declaraciones del ministro de Planificación, Julio De Vido, durante la asunción del nuevo secretario de Transporte, Alejandro Ramos.
» Macri no quiere aceptar el subte porque le molesta la gente de pelo negro», afirmó De Vido, una declaración calificada cerca de Macri de «innecesaria y errática». «Es muy claro. No quieren que Macri crezca», afirmó anoche el ex candidato a gobernador de Pro en Santa Fe Miguel del Sel.
El proyecto de ley, firmado por De Vido y el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, y que consta de sólo cuatro artículos, llegó al Senado horas después de que Macri aceptara el desafío de la Presidenta a debatir en el Congreso los términos del traspaso de los subtes. «(La Presidenta) nos convocó a que tengamos un debate en el Congreso y es una posibilidad muy valiosa para que los argentinos discutamos qué federalismo queremos tener, de qué forma nos organizamos y cómo vamos delegando cada vez más responsabilidades a nuestras provincias y a nuestras ciudades», afirmó Macri en el acto de celebración del Día de la Mujer, en el Teatro Colón.
Un rato después, por medio de la red social Twitter y conocedor ya de las declaraciones de De Vido, Macri levantó el tono. «¡Qué bueno que quieran discutir sobre el federalismo! Nunca hubo un gobierno más centralista que éste», se despachó el jefe de gobierno.
Condiciones
Durante toda la tarde, el gobierno macrista aguardó precisiones sobre el proyecto de ley. Luego de desayunarse con la novedad, el titular de la bancada de diputados macristas, Federico Pinedo, advirtió: «El Gobierno busca transferir más servicios violando la Constitución, que establece que deben hacerse con acuerdo de las partes y transferencia de recursos». Según el diputado, la transferencia de fondos hacia la Ciudad debería hacerse «en el caso de que se trate de un servicio deficitario» y tendría dos vías: «O nos suben un porcentaje de la coparticipación que recibe la ciudad o bajan lo que nos quita el Gobierno en ese rubro», afirmó a LA NACION.
La preocupación de Pinedo no es inocente. Según datos de la CNRT, se trata en total de unos 4000 colectivos, lo que equivale, según explica el Gobierno en los fundamentos del proyecto, a un subsidio mensual de $ 87.852.332, incluido el tranvía que recorre la zona de Puerto Madero. Esa erogación de $ 1056 millones supondría un gasto que complicaría los planes presupuestarios de Macri.
Concentrados en el artículo 2, los funcionarios macristas prestaron atención a otro artículo polémico del proyecto. Es el que establece el fin del actual mes de marzo como fecha tope para la transferencia de los subtes a la jurisdicción porteña. «Dispónese que dentro del plazo previsto en el acta acuerdo deberá efectivizarse la culminación del proceso», dice el artículo 3 del proyecto de ley.
De todos modos, en Pro afirmaron que «la transferencia de colectivos es menos riesgosa, porque las unidades necesitan menos mantenimiento» que los subterráneos. Precisamente Macri condicionó el traspaso de esa red a la realización de inversiones nacionales por unos $ 5000 millones, prometidas por el entonces presidente Néstor Kirchner y no efectivizadas hasta el momento.
Por las dudas, en el macrismo dejaron en claro que cualquier medida a tomar en el rubro transporte deberá ser aprobada por los legisladores porteños. «La transferencia de servicios públicos no se puede hacer sin aprobación legislativa», afirmó a LA NACION el legislador porteño Martín Ocampo, titular de la Comisión de Justicia de la Legislatura y espada de Macri en el entuerto judicial por el traspaso de los subterráneos.
El Gobierno justificó el traspaso de los colectivos (al igual que el de los subtes) a los beneficios recibidos por la ciudad en materia de subsidios. «Continuar con esta situación implica mantener a la ciudad en mejor situación con respecto a las provincias», detalla el proyecto.
Las líneas que pasarán a la Ciudad
Línea 4 Liniers-Correo Central
Línea 5 B. Piedrabuena-Retiro
Línea 6 Villa Soldati-H. Ferroviario
Línea 7 Parque Avellaneda-Retiro
Línea 12 Constitución-P. Falucho
Línea 23 Villa Soldati-P. Nuevo
Línea 26 Retiro-Barrio Rivadavia
Línea 28 Retiro-C. Universitaria
Línea 34 Liniers-Palermo
Línea 39 Chacarita-La Boca
Línea 42 Pompeya-Núñez
Línea 44 N. Pompeya-Belgrano
Línea 47 Chacarita-Liniers
Línea 50 Retiro-B. Piedrabuena
Línea 61 Constitución-Constitución
Línea 62 Constitución-Constitución
Línea 64 Belgrano-La Boca
Línea 65 Constitución-Belgrano
Línea 68 Saavedra-Once
Línea 70 Barracas-Retiro
Línea 76 N. Pompeya-Saavedra
Línea 84 V. Parque-Constitución
Línea 99 Liniers-Plaza de Mayo
Línea 101 Villa Soldati-Retiro
Línea 102 Barracas-Palermo Chico
Línea 104 Liniers-Once
Línea 106 Liniers-Retiro
Línea 107 P. Avellaneda-Núñez
Línea 108 Liniers-Retiro
Línea 109 Liniers-Correo Central
Línea 115 Villa Soldati-Retiro
Línea 118 Belgrano-P. Patricios
Línea 132 Flores-Retiromillones
Es el subsidio que aporta el gobierno nacional a las líneas de colectivos en la Capital Federal.
5,5 millones
personas por día
Es la cantidad de gente que se moviliza en las líneas de colectivos en el área urbana. El 34% de los viajes tiene su origen y destino dentro de la ciudad de Buenos Aires.
Más de 140 líneas
En el área metropolitana hay unas 142 líneas de colectivos, que recorren la Capital Federal y el conurbano. De ellas, hay 33 que sólo transitan por calles porteñas.
Los pasajeros
Según datos de la Secretaría de Transporte, el 65% de los pasajeros viaja en colectivo para movilizarse hacia el trabajo y el 7% por razones de estudio. El 59,6% de los que viajan tiene entre 20 y 39 años..