Guarimba es un término acuñado en Venezuela para referirse una especie de refugio, escondite, guarida entre otros, utilizados durante alguna manifestación sin movilización. El gobierno presidido por Nicolas Maduro vincula el término con vandalismo, disturbios violentos y cierres arbitrarios de las calles que desembocan en enfrentamientos.
El término habría surgido en Venezuela durante la dictadura de Marcos Perez Jimenez, cuando los miembros del Partido Comunista de Venezuela trancaban las calles de su ciudad, y se escondían en las iglesias para no ser atrapados y posteriormente torturados por los cuerpos de la Dirección de Seguridad Nacional. En esa época, en Venezuela estaba prohibido cualquier tipo de oposición al gobierno.
Sectores de la oposición Venezolana realizaron diversas acciones de Guarimbas en Caracas en el 2004 en esa ocasión para protestar contra el Gobierno de Hugo Chávez, la mayoría de las acciones se detuvieron con la victoria de Chávez en el referendum revocatorio del 15 de agosto de ese mismo año. Dejaron alrededor de 9 muertos y 193 heridos.1
En 2007 grupos opositores realizaron diversas actividades que se vincularon a las guarimbas esta vez para oponerse a la propuesta de Reforma de la constitución que se planteó ese año y fue rechazada por estrecho margen por los votantes venezolanos. Las acciones se detuvieron tras aceptarse el resultado.
Durante la serie de protestas y disturbios contra el presidente Nicolás Maduro, iniciadas el 4 de febrero en la ciudad de San Cristóbal del estado Táchira —según argumentaba la oposición— por la delincuencia, el nivel de la inflación y la escasez de productos básicos, el líder opositor Leopoldo Lopez hizo un llamado a protestar en las calles hasta derrocar al gobierno de Maduro, en un plan que llamó La Salida.
Los manifestantes, en su mayoría estudiantes universitarios mantuvieron varios enfrentamientos con efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana, estos enfrentamientos consistían en armar «barricadas» del tamaño de una pared en las calles, lanzar bombas molotov, disparar en ocasiones,quemar cauchos, atacar e incendiar unidades de transporte público así como causar destrozos a propiedad pública y privada, como organismos del Estado y bancos, etc1
Los hechos violentos trajeron como consecuencia, la muerte de 43 personas en todo el país, en su mayoría estudiantes. Además hubo más de 800 heridos incluyendo civiles de todos los sectores políticos.
De acuerdo a la constitución de Venezuela se puede realizar manifestaciones que se hagan pacíficamente, sin armas y sin obstruir el paso vehicular y no requiere de algún permiso o autorización. Sin embargo existe una discrepancia, ya que de acuerdo a la ley de manifestaciones públicas, éstas deben ser realizadas con permiso de la autoridad municipal, que puede disolverlas si se producen de forma ilegal o alteran el orden público o los derechos de otros ciudadanos.
El término habría surgido en Venezuela durante la dictadura de Marcos Perez Jimenez, cuando los miembros del Partido Comunista de Venezuela trancaban las calles de su ciudad, y se escondían en las iglesias para no ser atrapados y posteriormente torturados por los cuerpos de la Dirección de Seguridad Nacional. En esa época, en Venezuela estaba prohibido cualquier tipo de oposición al gobierno.
Sectores de la oposición Venezolana realizaron diversas acciones de Guarimbas en Caracas en el 2004 en esa ocasión para protestar contra el Gobierno de Hugo Chávez, la mayoría de las acciones se detuvieron con la victoria de Chávez en el referendum revocatorio del 15 de agosto de ese mismo año. Dejaron alrededor de 9 muertos y 193 heridos.1
En 2007 grupos opositores realizaron diversas actividades que se vincularon a las guarimbas esta vez para oponerse a la propuesta de Reforma de la constitución que se planteó ese año y fue rechazada por estrecho margen por los votantes venezolanos. Las acciones se detuvieron tras aceptarse el resultado.
Durante la serie de protestas y disturbios contra el presidente Nicolás Maduro, iniciadas el 4 de febrero en la ciudad de San Cristóbal del estado Táchira —según argumentaba la oposición— por la delincuencia, el nivel de la inflación y la escasez de productos básicos, el líder opositor Leopoldo Lopez hizo un llamado a protestar en las calles hasta derrocar al gobierno de Maduro, en un plan que llamó La Salida.
Los manifestantes, en su mayoría estudiantes universitarios mantuvieron varios enfrentamientos con efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana, estos enfrentamientos consistían en armar «barricadas» del tamaño de una pared en las calles, lanzar bombas molotov, disparar en ocasiones,quemar cauchos, atacar e incendiar unidades de transporte público así como causar destrozos a propiedad pública y privada, como organismos del Estado y bancos, etc1
Los hechos violentos trajeron como consecuencia, la muerte de 43 personas en todo el país, en su mayoría estudiantes. Además hubo más de 800 heridos incluyendo civiles de todos los sectores políticos.
De acuerdo a la constitución de Venezuela se puede realizar manifestaciones que se hagan pacíficamente, sin armas y sin obstruir el paso vehicular y no requiere de algún permiso o autorización. Sin embargo existe una discrepancia, ya que de acuerdo a la ley de manifestaciones públicas, éstas deben ser realizadas con permiso de la autoridad municipal, que puede disolverlas si se producen de forma ilegal o alteran el orden público o los derechos de otros ciudadanos.