Conversaciones con un amigo kirchnerista, Jorge Fernández Díaz, La Nación.
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Acerca de Patricio
Patricio es profesor universitario de sociología. Trabaja sobre desigualdad y movimientos sociales. Se crió en un conventillo de la calle Olavarría, pero toda su vida ha sido hincha de River.
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Esta nota puede ser una señal: no hay que discutir más. Que se discuta en los cafés. Hay que seguir y sumar.
Bueno, no le voy a hacer caso al Escriba.
Es un tema tan complejo, y que necesita de un análisis tan profundo, que resulta una gran injusticia que se instale la idea de que en estos 7 años aumentó la brecha entre ricos y pobres. Dicho así es absolutamente falso.
Otra: identificar los problemas fiscales del período convertible (Menem) con los que se pueden estar empezando a dar ahora es una falacia.
Menem no endeudaba al estado porque no quería dejar de gastar. El tema era que la convertibilidad asfixió tanto el aparato productivo nacional, promovió tanto la importación de bienes de consumo, que el ingreso de dólares especulativos no alcanzaba a tapar el agujero. Primero se disimuló con la guita de las privatizaciones, pero después si el estado no pedía dólares prestados a los organismos de crédito, se generaba un agujero de balanza de pagos que iba a terminar con pérdida de reservas y pérdida de liquidez de la economía (que fue lo que pasó cuando a De La Rúa le dijeron ya te presté demasiado, no te puedo prestar más).
El problema de la Argentina no era fiscal, era de balanza de pagos. Si el estado no se endeudaba en dólares no entraba un dólar por nada.
Nada que ver con el período actual.
Tenemos razón en todo, Mariano. El tema es si tenemos que seguir discutiendo o hay que hacer otra cosa.
Me parece que el punto está en la visión de futuro que pueda dar este proyecto.
Un abrazo
Acertada su ùltima frase, pero…
«tenemos razòn en todo», no convendrìa revisarlo? O la autocrìtica quedò desterrada para siempre?
saludos
La autocrítica la dejamos para los Pro, que son racionales.
Otra cosa: me llama la atención que ningún grupo dedicado a las cuestiones de género no critique la tonería repetida de que el gobierno usa a las Madres y las Abuelas.Es difícil encontrar una militancia mas coherente y sostenida. Sin embargo algunos las tratan como viejas boludas que no se dan cuenta de las maldades del kirchnerismo. Seguramente la verdad es la inversa: boludos y de mala leche son los que opinan así de las Madres.
Juan a que te referis on cuestiones de género. O acaso crees que se las critica por ser minas?
Si Evo de Bonafini, Padre de Plaza de Mayo, hiciera lo que hace y dijera lo que dice Hebe se lo criticaría igual.
Desde ya me disculpo si te entedó mal.
Que yo sepa el seudònimo pro me involucra exclusivamente, de manera que el plural, pretendidamente despectivo, està demàs, salvo que te hayas referido al partido del niño Mauricio.
En cuanto a las Madres y Abuelas y otras tambièn respetables y luchadoras organizaciones de derechos humanos -que tambièn existen por si no lo sabès-, a quienes acompañè como pude desde sus comienzos heròicos(como muchìsimos militantes y no de distintas extracciones), ignoro de donde sacàs semejantes inferencias. Las considero a todos sin excepciòn gente maravillosa, falible como todos los humanos, y elegì siempre respetuoso silencio en relaciòn a mis divergencias,-que tambièn existen entre las diferentes agrupaciones-de manera que tus imputaciones no me llegan.
Sì en cambio afirmo que NK ha pretendido,-con cierto èxito-inventarse actuaciones que no tuvo en los tiempos en que las papas quemaban, y tuvo la desvergonzada amnesia de pretender en aquella històrica congregaciòn en la Esma, que la gènesis de la lucha contra los genocidas comenzaba con su gestiòn.
Todo esto no quita el sincero reconocimiento que muchìsimos como yo tenemos hacia la polìtica que implementò en la materia.
Pero eso no le basta a su soberbia.
Pro2003, en términos generales, digamos.
Juan: Es un buen punto.
Saludos
Disculpe Escriba. En lo que a mi respecta no entiendo el alcance de su acotaciòn.
saludos
Esta nota muestra varias cosas:
1- que atrsados estan hoy los diarios con respecto a internet. Estas discusiones estan en AP hace meses, años te diria.
2- La nota se basa casi completamente es una situacion que se da muy seguido y me llama la atencion: personas de derecha, o liberales o socialdemocratas moderados le «reclaman» al gobierno que no es verdaderamente de izquierda. Estaria el autor de acuerdo en no pagar la deuda y «darle ese dinero a los pobres» con todas las implicaciones que eso tiene?. La brecha entre ricos y pobres se menciona, desde algunos lugares liberales, como si no se estuviese en contra de casi todas las formas de acortarla. Porque diganme una forma de acortar la brecha que no sea sacandoles a unos y dandoles a los otros, o beneficiando a a los pobres «con la plata de todos». Bajar el IVA me diran, ok. ERAN AMIGOS DEL ESTABLISHMENT ANTES. O sea que los liberales prefieren que sean revolucionarios desde el comienzo.
Todo esto deviene de la acusacion de que son «falsos» progresistas, revolucionarios, militantes,etc. Osea que preferirian un verdadero revolucionario…
¿no es una perdida de tiempo? ¿porque no reclaman lo que realmente pienasn?
Porque quedaría muy feo, pepe; mirá si no lo que le pasa al pobre Maurizio cada vez que abre la boca sin preguntarle primero a Durán barba.
pero mas alla de eso.
yO no digo, a lo Sandra Russo, que son sadicos que deben anunciar que quieren matar a los pobres, simplemente que no clamen por algo que a casi ningun liberal le interesa: la desigualdad.
ni hablar de lo demas..
Tiene razón Pepe: los diarios atrasan, en internet discusiones como estas se dan a diario y hace ya varios años. De todos modos la nota alumbra el modo en el que se discute hoy y reconozcamos que las dos posiciones, lejos de fanatismos, son perfectamente posibles. Me molesta un poco el rasgo de escritor frustrado que inunda el texto, poniendo demasiada atención en pequeños detalles que no agregan nada al texto que, de por si, es corto.
De todos modos, en ésta, creo que queda mejor parado el kirchnerista: fundamenta su posición en cuestiones de fondo. Su adversario sólo se limita a criticar a los personajes, no a la trama de sus políticas.