Jaime Campos
«Siempre que la ciudadanía vota es un momento de alegría: lo pensamos respecto de la segunda vuelta porteña y lo reiteramos en relación con las primarias del domingo. Cuando perdimos la democracia, perdimos los derechos humanos. De todos modos, habrá que esperar a las elecciones de octubre para saber cómo va a evolucionar la relación del futuro Gobierno con las empresas».
Así lo señaló Jaime Campos, presidente de la AEA (Asociación Empresaria Argentina) en una entrevista con este diario. El lunes, la entidad que encabeza mantuvo una reunión a la que concurrieron casi todos sus miembros. La única excepción fue la de Amalia Lacroze de Fortabat. El encuentro estaba previsto, no así los resultados de la elección del día previo. Allí, en una agitada sesión, se decidió buscar un acercamiento de esa entidad -que el Gobierno considera adversaria por el rol central que tiene en ella el CEO del Grupo Clarín, Héctor Magnetto- y también dar a conocer su postura sobre «los grandes temas nacionales». A continuación, lo más saliente del diálogo entre Campos y Ámbito Financiero:
Periodista: ¿Cuál es su visión de la primaria abierta?
Jaime Campos: Estamos muy contentos de que se haya vuelto a votar, lo mismo que la segunda vuelta de la elección porteña. Creemos que la participación, la democracia y la vocación empresaria van de la mano. Votamos casi 80% de los ciudadanos: cada vez que perdimos la democracia, perdimos los derechos humanos, las libertades y retrocedimos como país.
P.: Pero más allá de lo formal, ¿qué piensan los empresarios del resultado del domingo? ¿Lo esperaban?
J.C. Nos sorprendió, es innegable, lo mismo que -creo- a casi toda la sociedad.
P.: ¿Qué piensan de cómo va a evolucionar la relación Gobierno-empresarios a partir de ese resultado?
J.C.: Mire, es una elección primaria… Sería poco serio aventurar una opinión como la que me pide; habrá que ser responsables y aguardar a las elecciones de octubre, que termine de oficializarse la reelección de la Presidente.
P.: ¿Le preocupa que el gran apoyo que le dio la gente al Gobierno lo tiente a ejercer el poder de manera autoritaria?
J.C.: En AEA siempre fuimos partidarios de una república fuerte, y esto implica una clara división de poderes entre el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial. Veremos cómo se pronuncia la ciudadanía en las elecciones de octubre, que también son para elegir legisladores. En cuanto a la Justicia, siempre hemos expresado nuestro enorme respeto por la actual conformación de la Corte Suprema.
P.: Hoy, además de la política, la preocupación de los empresarios es el posible efecto de la crisis internacional sobre la economía argentina. ¿Qué piensa?
J.C.: La verdad es que no sabemos qué va a pasar. Desde AEA creemos que se deben fortalecer las bases económicas de la Argentina en previsión de que nos alcance la crisis.
P.: ¿Y cuáles son esas bases?
J.C.: Insistir en mejorar la situación fiscal, tratando de incrementar el superávit, y constituir un fondo anticíclico a favor de los altos precios de los commodities. No sabemos si los precios actuales de la soja y otros exportables argentinos van a mantenerse. También acrecentar la relación con el Mercosur.
P.: ¿Cómo creen entonces que va a afectar la crisis a las empresas argentinas?
J.C.: Pensamos que se viene una época de gran volatilidad; hará falta mucho diálogo entre las partes (empresas, Gobierno, políticos, sindicalistas) para acordar en medidas para capear la tormenta. Sabemos poco de cómo va a impactar esta crisis en China, que es uno de nuestros principales compradores.
P.: Usted mencionó al Mercosur como clave para mantener el crecimiento argentino, pero en las últimas semanas el Gobierno dictó medidas muy proteccionistas que podrían complicar el intercambio con ese país. ¿AEA va a hacer algo al respecto?
J.C.: Sabemos que hay ruido en la relación, y celebramos la constitución del grupo binacional de empresarios para explorar la solución a esos problemas (de hecho, varios de sus miembros lo son también de AEA).
P.: Una de las medias más controvertidas es que las empresas brasileñas pueden ofrecer un 25% más que las argentinas y ganar las licitaciones…
J.C.: Por eso nos parece clave que haya reglas claras para la relación recíproca, sobre todo en lo que hace a las compras del Estado (brasileño y argentino). Respecto de la «franquicia» del 25%, vamos a pedir que se revierta o que, al menos, no se aplique a las empresas de los países del Mercosur.
P.: Muchas de las ventajas de que disfrutan los empresarios brasileños derivan de la existencia del BNDES (banco de desarrollo), que les da financiación a tasas preferenciales. ¿Van a sumarse al pedido de la UIA de crear un «BNDES» local?
J.C.: No con ese nombre o esas características: el BNDES es un instrumento para financiar inversiones a mediano y largo plazo; creemos que es fundamental volver a generar ahorro local en pesos para tener un mercado de capitales doméstico.
Entrevista de Sergio Dattilo
«Siempre que la ciudadanía vota es un momento de alegría: lo pensamos respecto de la segunda vuelta porteña y lo reiteramos en relación con las primarias del domingo. Cuando perdimos la democracia, perdimos los derechos humanos. De todos modos, habrá que esperar a las elecciones de octubre para saber cómo va a evolucionar la relación del futuro Gobierno con las empresas».
Así lo señaló Jaime Campos, presidente de la AEA (Asociación Empresaria Argentina) en una entrevista con este diario. El lunes, la entidad que encabeza mantuvo una reunión a la que concurrieron casi todos sus miembros. La única excepción fue la de Amalia Lacroze de Fortabat. El encuentro estaba previsto, no así los resultados de la elección del día previo. Allí, en una agitada sesión, se decidió buscar un acercamiento de esa entidad -que el Gobierno considera adversaria por el rol central que tiene en ella el CEO del Grupo Clarín, Héctor Magnetto- y también dar a conocer su postura sobre «los grandes temas nacionales». A continuación, lo más saliente del diálogo entre Campos y Ámbito Financiero:
Periodista: ¿Cuál es su visión de la primaria abierta?
Jaime Campos: Estamos muy contentos de que se haya vuelto a votar, lo mismo que la segunda vuelta de la elección porteña. Creemos que la participación, la democracia y la vocación empresaria van de la mano. Votamos casi 80% de los ciudadanos: cada vez que perdimos la democracia, perdimos los derechos humanos, las libertades y retrocedimos como país.
P.: Pero más allá de lo formal, ¿qué piensan los empresarios del resultado del domingo? ¿Lo esperaban?
J.C. Nos sorprendió, es innegable, lo mismo que -creo- a casi toda la sociedad.
P.: ¿Qué piensan de cómo va a evolucionar la relación Gobierno-empresarios a partir de ese resultado?
J.C.: Mire, es una elección primaria… Sería poco serio aventurar una opinión como la que me pide; habrá que ser responsables y aguardar a las elecciones de octubre, que termine de oficializarse la reelección de la Presidente.
P.: ¿Le preocupa que el gran apoyo que le dio la gente al Gobierno lo tiente a ejercer el poder de manera autoritaria?
J.C.: En AEA siempre fuimos partidarios de una república fuerte, y esto implica una clara división de poderes entre el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial. Veremos cómo se pronuncia la ciudadanía en las elecciones de octubre, que también son para elegir legisladores. En cuanto a la Justicia, siempre hemos expresado nuestro enorme respeto por la actual conformación de la Corte Suprema.
P.: Hoy, además de la política, la preocupación de los empresarios es el posible efecto de la crisis internacional sobre la economía argentina. ¿Qué piensa?
J.C.: La verdad es que no sabemos qué va a pasar. Desde AEA creemos que se deben fortalecer las bases económicas de la Argentina en previsión de que nos alcance la crisis.
P.: ¿Y cuáles son esas bases?
J.C.: Insistir en mejorar la situación fiscal, tratando de incrementar el superávit, y constituir un fondo anticíclico a favor de los altos precios de los commodities. No sabemos si los precios actuales de la soja y otros exportables argentinos van a mantenerse. También acrecentar la relación con el Mercosur.
P.: ¿Cómo creen entonces que va a afectar la crisis a las empresas argentinas?
J.C.: Pensamos que se viene una época de gran volatilidad; hará falta mucho diálogo entre las partes (empresas, Gobierno, políticos, sindicalistas) para acordar en medidas para capear la tormenta. Sabemos poco de cómo va a impactar esta crisis en China, que es uno de nuestros principales compradores.
P.: Usted mencionó al Mercosur como clave para mantener el crecimiento argentino, pero en las últimas semanas el Gobierno dictó medidas muy proteccionistas que podrían complicar el intercambio con ese país. ¿AEA va a hacer algo al respecto?
J.C.: Sabemos que hay ruido en la relación, y celebramos la constitución del grupo binacional de empresarios para explorar la solución a esos problemas (de hecho, varios de sus miembros lo son también de AEA).
P.: Una de las medias más controvertidas es que las empresas brasileñas pueden ofrecer un 25% más que las argentinas y ganar las licitaciones…
J.C.: Por eso nos parece clave que haya reglas claras para la relación recíproca, sobre todo en lo que hace a las compras del Estado (brasileño y argentino). Respecto de la «franquicia» del 25%, vamos a pedir que se revierta o que, al menos, no se aplique a las empresas de los países del Mercosur.
P.: Muchas de las ventajas de que disfrutan los empresarios brasileños derivan de la existencia del BNDES (banco de desarrollo), que les da financiación a tasas preferenciales. ¿Van a sumarse al pedido de la UIA de crear un «BNDES» local?
J.C.: No con ese nombre o esas características: el BNDES es un instrumento para financiar inversiones a mediano y largo plazo; creemos que es fundamental volver a generar ahorro local en pesos para tener un mercado de capitales doméstico.
Entrevista de Sergio Dattilo