La hegemonía de EEUU, no la romperá ni Fidel ni Chavez.
EEUU TIENE COMPETIDORES Y SU HEGEMONÍA VA EN CAÍDA. Varios países con sistemas capitalista siguen su avance. Europa y Japón ya pueden poner algunas condiciones. China ya anda pesando, y un poco detrás la India. También la pelean otros asiáticos como Corea, parte de la indochina y malasia. China, que es el que más aparenta, tiene un gobierno comunista que va adoptando pautas económicas de libre empresa. Muchos años con economía de Estado lograba poco crecimiento. Fueron probando pautas de economía de mercado y les está yendo sorprendentemente bien con crecimientos sostenidos mayores al 10% anual.
LA HEGEMONÍA DE EEUU ES MÁS POLÍTICA QUE ECONÓMICA. Pueden controlar gobiernos pero no a la opinión pública. En porcentaje su poder va en franca caída en ambos aspectos. La necesidad de reformular a la ONU en pos de un mundo no hegemónico se va haciendo posible. El día llegará en que la legislación internacional sea realmente justa y democrática.
A mi me parece que el sistema de propiedad estatal de los medios de producción, TIPO “UNIÓN SOVIÉTICA” ESTÁ SIN PERSPECTIVAS PARA EL FUTURO, TANTO COMO EL ULTRA LIBERALISMO, por abrumadora mayoría de la gente del mundo. No están descartadas ni la intervención del Estado, ni las empresas colectivas dentro de la libertad de mercado. Aún cierta actividad del estado en educación, salud, finanzas, y en menor medida, productivas, creo que tienen futuro. Todo es posible dentro del mercado competitivo. Claro que el Estado debe volver a manos de los ciudadanos, en forma directa, sin nadie en el medio que diga representarnos mucho más de lo que está ahora, pues las empresas mantienen buena parte del poder incluido el político. Para que eso pueda concretarse, la política del consenso real (con tecnología), se irá afianzando. Algunos elementos de democracia directa se irán consolidando a la par del mejoramiento de la Representación.
.
EL CONFLICTO IDEOLÓGICO ENTRE LAS IZQUIERDAS Y DERECHAS SE RESUELVE CON LO MEJOR DE CADA LADO. De esa forma podemos construir un horizonte de aceptación y rechazo, analizando cada aspecto en particular. La disputa continua en este campo: el de las definiciones específicas. Y como las normas sociales nos afectan a todos, debemos ser los ciudadanos los que las decidimos, una por una. Pongamos algunos ejemplos:
LA LIBERTAD: En el nivel del pensamiento hay mucho hilo. Pero hay cosas seguras como que todos queremos la libertad de pensar. Pero ¿queremos al liberalismo? No se: Casi seguro que no queremos que el Estado administre y sea propietario de todo. ¿Queremos que la gente tenga la libertad de producir y vender lo que le venga en gana? ¿Con que limitaciones?. Es muy evidente que no se resuelve nada diciendo que queremos la libertad, así, en general.
EL MERCADO: También hay mucho hilo. ¿queremos el control de precios o no? Y muchas otras cuestiones.
LA MONEDA Y LAS FINANZAS: Ya vemos la diversidad de temas en los cuales debemos resolver.
Seguramente algunos se resolverán según la ideología capitalista y otros según la socialista. Es el público, LOS CIUDADANOS LOS QUE ESTAMOS AFECTADOS POR LAS LEYES, y entonces es por el verdadero consenso que resolveremos.
Jamás los delirios personalistas como los de Fidel o los de Chávez podrán quitarle la hegemonía a potencias que basan su fuerza en la sinergia de los recursos que posee. Mientras que los Chávez se preocupan por conservar el poder en sus países, las naciones hegemónicas prescinden de los caprichos de un solo hombre para construir progresivamente y en una dirección clara.
Está claro que la hegemonía irá definiéndose cada vez más a favor del mercado. Es decir, el mercado casi como un ente vivo que posee un principio de conservación de su existencia. Aquellas naciones que mejor “sintonicen” la portadora del mercado, mayor capacidad tendrá de disponer de éste para influir en sus decisiones en el contexto mundial.
Como dice mi amigo Michael Houellebecq “el capitalismo es el más natural de los sistemas económicos, y por ende, el peor”. Una buena frase para encerrar la paradoja del sistema. Lamentablemente no nos podremos desprender del capitalismo porque SOMOS capitalismo. En tal caso, con este progresivo “prueba y error”, iremos afinando la máquina, con algunas metidas de pata como el ultraliberalismo o, con la infantil ilusión de un socialismo casi religioso.
Por eso está muy bien lo que dice el post. Hay que asumir la mayoría de edad y ser capaces de decidir qué queremos de forma responsable y racional. No se puede decir que no a las privatizaciones “por principio”, sino que hay que ser capaces de ver más allá de las ideologías entendidas como cegadoras de la razón, y poder vislumbrar, libres de cualquier “obstáculo epistemológico”, qué necesitamos para una situación particular en un momento en particular.
Lamentablemente desde muchos sectores se juega muy irresponsablemente con estos temas. Se abrazan banderas que solo distorsionan la realidad, algunas veces por error de apreciación y otras por simple gusto de la jactancia. Sea como sea, los ciudadanos deberán decidir y ser capaces de ir más allá, de superar estas categorías y poner como prioridad sus problemas. La resolución de esos problemas deberá ser una política en sí, y no seguir esperando sentados que los problemas se resuelvan solos por mera práctica de la política.
JK la causa de que la hegemonía no se la va a quitar Fidel o Chávez no es por culpa de supuestos «delirios personalistas». Pone objetividad, la hegemonía no puede pasar nunca a un país de segundo orden (sea una islita del caribe o una nación selvática costera con petróleo).
La diferencia en población y territorio con un país de los realmente grandes, y que sí pueden disputar hegemonía es visible. O sea, China si tuviese un presidente con tus supuestos «delirios personalistas», igualmente podría disputarle la hegemonía a USA por sus más de mil millones de habitantes y su enorme masa continental. El tema de la disputa por el poder global se apoya en puntos geoestratégicos, por lo cual incluso cualquier país de Europa en solitario no mueve nada (y en cambio como continente son muy poderosos). De ahí que por ejemplo, la comunidad europea ya fue escindida desde dentro por USA que ahora cuenta con sus países pro-EEUU (Inglaterra, Italia, los países del este) y el resto; desunión que les hace perder su peso de poder en conjunto.
Rusia, la India, China, Europa, son los que mueven piezas del tablero mundial… lo que no quita que una Latinoamérica UNIDA (y un medio-oriente unido) también lo haga. Pero repito UNIDA, porque cualquier nación de las nuestras por separado no mueve demasiado (salvo obviamente Brasil).
En cuanto a tu noción del mercado, «las naciones que mejor «sintonicen» con él mejor lo influirás», creo que se podría decir que las naciones que mejor manipulen el mercado mundial más lo influenciarán (manipulen con los organismos como FMI, Banco Mundial, Organización Mundial de Comercio, Grupo Davos, Grupo de los 8, BRIC, etc).
Los que mueven el mercado no lo hacen por su «buena onda» con éste, sino porque manejan los hilos políticos del poder e imponen condiciones al resto.
Tal como el FMI que es manejado por un anglosajón y el Banco Mundial que le toca a un «europeo continental» cada vez que se hace el reparto.
Criticar a Cuba porque no le puede quitar la hegemonía a USA, es como criticar a Uruguay que no le pueda quitar la hegemonía del Mercosur a Brasil.
Ningún país puede apuntar a eso siquiera a mediano plazo, no importa la buena o mala política que lleven.
J.K.
Si. Veo al mercado como algo muy natural y asociado al derecho de propiedad. El hecho de que ese mercado, que nace tan humildemente, llegue a originar grandes o enormes empresas manejadas por unos pocos o sólo uno, puede ser cuestionable y evitable. No tiene nada de malo que las empresas sean grandes porque casi siempre eso significa eficiencia.
En principio me parece que las grandes empresas deberían ser SA perfeccionadas de tal manera de lograr democracia interna, manteniendo el principio de una acción, un voto. Lo que no veo claro es como se relaciona la eficiencia con la distribución de las acciones. También, dentro de las reglas del buen mercado, deben tener cabida las empresas colectivas como las cooperativas.
Hay mucho por pensar y resolver. Creo que el conocimiento y la cultura política harán a esta nueva situación, posible. Me parece que la tecnología informática tiende a permitir mejor la competencia de empresas pequeñas frente a las grandes. Lo importante es la libertad de desarrollar la creatividad humana ya sea mediante empresas pequeñas grandes.
J.K. tu nota me resulta muy potable por el estilo, que no hace uso de esas palabras que la política usa en demasía. Me paso diciendo a los amigos de artepolítica de concentrarse en las problemas y no usar tanto palabras como socialismo, progresismo, liberalismo, y muchos ismos porque cada uno tiene una definición muy distinta.
Fran:
Quise hacer notar la posibilidad muy cierta y deseable que EEUU vaya perdiendo hegemonía, no por el desarrollo de economías que desprecian al mercado sino por las que saben hacerlo funcionar bien. Me parece que esta idea tiene mucha fuerza y que nos sugiere a los latinoamericanos un camino que pasaría por un mercado común. Por eso me parece que si fortalecernos nuestro concepto de mercado similar para todos, los latinos también podemos integrar y medir en un futuro mundo más democrático. De esa forma podremos evitar otras hegemonías, e integrar un mundo más democrático.
JK, ¿»somos» el capitalismo? No generalices. Vos serás un entero burgués, digamos una especie de distorsión de la naturaleza humana, el fracaso del proyecto del hombre. Y por favor, no hables de racionalidad, no tenés idea de qué estás diciendo. Andá a leer a Houellebecq, ese escritor penoso del que parecés haber aprendido a ser cínico.
Por otro lado, el título de este post es de una sorprendente locura.
Reverso:
Quise decir que la hegemonía de EEUU no caerá por la oposición a su imperialiso económico y político de las izquierdas, sino por el desarrollo de otros sistemas de libre mercado. Mal dicho, claro. Pero lo importante es saber ubicarnos dentro de esa lucha oponiendo una latinoamérica funcionando bien en un Mercosur por ejemplo.
Lo màs probable es que la hegemonìa norteamericana caiga por su proverbial incompetencia (su mejor sìmbolo està por irse en pocos dìas) que por la acciòn de algùn otro paìs o bloque.
Pero bueno, asì caen los imperios, dicen.
Supongo que lo del título es un chiste, porque más que disputarle hegemonìa, los Castro o los Chávez se darían por satisfechos con que los EUA los dejen en paz.
Saludos.
Ram
Si es un chiste, o un enganche para despertar interés en la nota. Espero que tengas razón y que Obama sepa ubicar a su país en el lugar que le corresponde sin abuzar de su poder económico y militar.