Macri afirma que el kirchnerismo se terminó y pide a las fuerzas la nueva política coordinar la transición hasta la llegada de uno de ellos al poder, supuestamente en 2011.
El gran fiasco argentino reproduce sus palabras:
«El ciclo kirchnerista está terminado, lo importante ahora es cumplir con una transición civilizada, y dejar de inventar agendas paralelas, que no tienen nada que ver con la realidad»
En el blog moronense, hoy, cargué un párrafo de «Los demonios» de Dostoievski que en algún punto parece coincidir con las palabras del alcalde porteño
«Ya he indicado que hicieron su aparición en la ciudad numerosas gentes de medio pelo. En épocas turbias, de incertidumbre y transición, aparecen siempre y por doquiera gentes de medio pelo. No hablo de los llamados «progresistas» […], cuyos propósitos, aunque a menudo descabellados, están más o menos definidos. No. Hablo sólo de la canalla. En todo período de transición surge esa canalla de la que ninguna sociedad está libre, y surge no sólo sin propósito alguno, sino sin ningún asomo de idea, sólo para sembrar con ahínco la inquietud y la impaciencia. Y, sin embargo, esa canalla, sin advertirlo siquiera, cae siempre bajo el caudillaje de un puñado de «progresistas», que esos sí obran con un propósito definido, y son los que llevan a ese hato de truhanes a donde les da la gana, si es que ese puñado de «progresistas» no es también un puñado de necios, lo que, por otra parte, sucede más de una vez.»
Mauricio comunica que no va a haber 2001, por que la oposición va a hacer algo que hasta el momento no pudo que es unirse con algún fin mas allá de la permanente oclusión de los avances sociales y políticos de los gobiernos populares.
Se siente miembro de la liga de la justicia y a ella convoca para salvar al país del nuevo 2001. Convocatoria pensada para lectores de historietas más que para una ciudadnía pensante. En el fondo el le habla al cualunque, y piensa ademas que es canalla que se sentirá atraido por su invocación a lo nuevo y al progresismo.
Esta nueva opereta tiene como velada intención estimular a la «canalla» a creer que se ha iniciado el proceso de «transición» y provocar el gran bandazo (peronista). El bandazo es el único milagro que puede hacer que el peronismo estalle en pedazos y muera como la Alianza en 2001, que una parte de ese peronismo vaya de rodillas a pedirle que lo lidere y el resto pase al olvido. Cádaver exquisito -ese escenario- pintado por ilusos, es lo que ilusiona a el y a varios más a seguir escorchando. desplazado le pelea el rol de pitonisa que hasta ahora tenía Carrió.
Miente sobre un ocaso que es más expresión de deseos que dato concreto, y que si se produjera enterraría sus sueños de ser Presidente de algo más grande que un club de fútbol. Miente, se cree la mentira y se desespera por que ve -otra vez y van…- al horrendo peronismo sentado en la mesa, listo para comer en familia el estofado.
Progresistas de derecha y progresistas de izquierda quieren sentarse a la mesa del poder nacional con solo partiditos provinciales y vecinales. El viejo carismático y zorro de la política del siglo XX solía ironizar las situaciones como esta con el siguiente ejemplo: «me hablaron para poner una estancia a medias, nosotros poníamos las vacas y ellos las gallinas».
A sus pretensiones de bataclana, no se le escapa un pequeñó detalle: el peronismo, sabe que no es «amici» y no está dispuesto a sentarlo a la mesa.
Por el momento la única transición por la que Mauri y Gaby deben velar es el paso del transporte automotor por la ciudad.
Mejor que el vecinalista se encargue de controlar el tránsito de la caótica Buenos Aires y deje de utilizar la técnica del gran bonete («¿Yo Sr?, no Sr, la culpa la tiene…) para transferir su falta de idoneidad en la gestión pública a quienes si demuestran ese capacidad.
Mientras tanto sigue sin dirigir la Ciudad (que por cierto funciona p’al orto, con un preupuesto de ciudad europea y sin el concurso de la corrupción peronista desde hace varios periodos ya) y esperando el milagro del «bandazo» peronista.
nO ME INTERESA OCUPARME DE mACRI.sI DE LA PSICOLOGIA DE LOS PORTEÑOS.