El libro de Tenembaum

Ernesto Tenembaum hace la presentación formal de su libro sobre el kirchnerismo. En el primer capítulo, parece abonar la tesis de que el kirchnerismo empezó a extraviar su rumbo después del 2005, cuando en lugar de continuar enfrentando a las estructuras del PJ bonaerense, decidió abrirle las puertas a Mussi, Curto, Cacho Álvarez, y otros «mafiosos».
Son opiniones.
Tenembaum, como buen progresista transversal confeso, le da una valoración fuerte al enfrentamiento que Kirchner propició, más discursiva que efectivamente, con las estructuras de los partidos políticos tradicionales. Sugiere que ese fue el motivo del enamoramiento de la «sociedad» con Kirchner, y le asigna a ese enfrentamiento la épica de «la lucha contra el poder». (Digamos por otra parte que Kirchner no decidió nada, se subió a la ola de opinión reinante post-2001, pero ese es otro tema).

A mí me da un poco de escalofrío que el tipo diga eso desde las páginas del diario La Nación, uno de los centros donde, a mi humilde juicio, se asienta uno de los pilares de las estructuras de poder más firmes, más peligrosas, y contra las cuales sería más épico luchar (y de hecho es más difícil, y más dificultosamente «glorioso»).
Qué le pasó a aquel periodista contestatario al que «la sociedad le creía»? Cuando fue que decidió extraviar el rumbo para convertirse en pluma del diario ultra-conservador La Nación?, pienso y replico sus pensamientos, pero cambiando el sujeto y los circunstanciales.
Un diario que desde hace 150 años viene representando con la fidelidad que nadie alcanzó los intereses de los sectores económicamente más concentrados, más tradicionales. No es el mejor lugar, presumo, desde dónde pontificar con la «lucha contra el poder» y esas tonterías.

38 comentarios en «El libro de Tenembaum»

  1. Quizá haya que entenderlo como en el Congreso, donde desde sectores tan discímiles se termina formando aquello llamado ‘oposición’…
    En el periodismo es maso lo mismo: un caldo de ideas contrapuestas uniéndose en un coro anti-kirchnerista, que se dan espacio el uno al otro (o los mismos de siempre a algunos otros, en todo caso)

  2. Mariano,

    Lo voy a defender a Tenembaum. Y lo voy a hacer partiendo de tu texto. En ese paréntesis decís que en la interpretación de Ernesto, Kirchner no decide nada sino que fue la sociedad la que le marcó la agenda tras la salida de De la Rúa a fines de 2001, ¿no? Das a entender que no coincidís mucho con esta interpretación e incluso que de ser así no te parecería bien que un líder se moviese de ese modo. Pero yo me pregunto, si vos, Tenembaum y yo coincidimos en que la sociedad tenía ese diagnóstico post-2001, ¿qué querés que hiciera el que asuma el gobierno? Una vez que esta sociedad tiene un diagnóstico «sabio», ¿la vas a mover para otro lado? De haber hecho esto después de 2005, fue un grave error, tal como lo dice Tenembaum. Y pensar que tenías la sociedad a favor…
    Otro tema que tratás en tu post es el del diario La Nación y la épica. Bueno, ¿queremos mejorar concretamente la sociedad o aparecer en el cartel de reparto de los libros de historia que les obligamos a leer a los chicos? El diario La Nación tiene ciento y pico de años y no piensa hoy igual que hace 50 ni que hace 20. Sin ir más lejos, hoy en la revista dominical le hacen una simpática entrevista a la mujer del Pepe Mujica. Tal como vos mismos decís, es una estructura de poder muy firme. Le podés tirar bombitas de pintura, hacés quilombito, tenés tus warholianos 15 minutos de fama, pero nada más se consigue apuntándole en tiempo real a la cabeza a una estructura de poder firme. Si en los 70’s no le hicieron ni cosquillas, imaginate ahora cuando el capitalismo ni se discute y cuando el líder de tu movimiento con el ojo visco que tiene no deja de mirar la cotización del dólar… Mientras haya capitalismo en la Argentina, La Nación va a seguir saliendo todos los días. Entonces, hay que dejar de buscar esa épica pelotuda que sólo sirve para levantarse minitas en las facultades de humanidades. Lo que sí podemos hacer, lo que sí es imaginable hoy en día, es una Argentina sin Curto, sin Cacho Álvarez, sin mafia obscena en la política. Sacárnoslos de encima nos mejoraría mucho la vida a todos.

    Saludos

    1. Diego:
      Primero, el paréntesis es de una idea mía, seguramente copiada de alguien a quien hoy no estaría en condiciones de citar.
      Tenembaum no lo dice. Es más, da la impresión de que cree que un proceso histórico es desarrollado por la decisión de un líder, por su voluntad.
      Yo creo, en cambio, que Kirchner no decidió para donde ir. Vio para donde iba la ola de opinión y se subió. Y se comió el amague de la clase media. Que no sé si quería ir tan a la izquierda como Kirchner creyó de entrada. Pero bueno, es complejo, porque primero habría que ver qué es ser de izquierda y todas esas cosas. Y después habría que analizar bien para no caer en generalizaciones inútiles como, justamente, la de «clase media». Creo, aparte, que llegaríamos al mismo punto de desacuerdo en el que estamos ahora, si profundizáramos.

      Lo que me parece es que es justamente al revés de cómo lo planteás vos.
      Lo que sirve para ganarse minitas en las facultades de humanidades es hablar de las mafias pejotistas. Es muy progre esa idea.
      Pero en definitiva depende de cómo quieras construir. Querés construir con la progresía de clase media? Y, por ahí te conviene darle la espalda a los tipos que, con organizaciones punteriles «mafiosas», con miles de defectos, te garantizan asistencia y contención en lugares a los que el estado no llega de muchas otras formas (por ahí la escuela, la salita es atribuible, creo, a los intendentes).
      Llevar agua potable, construir viviendas, caminos, urbanizar esos barrios, para Tenembaum es repartir obra pública entre los intendentes «mafiosos».
      O el Argentina trabaja, lo mismo.
      En cambio, le cae mejor a gente como Tenembaum la asignación por hijo, que está espectacular, porque es la ampliación de un derecho que tenían ya los hijos de los trabajadores registrados, incluídos los de altos ingresos, pero que si toda la política sobre pobreza se reduce a eso, no deja de ser una simple limosna.
      Entonces, no sé cuál es la «lucha contra el poder» que hay que resignar. La de pelearse con Clarín y La Nación, para no ponerse en contra a la «sociedad», sobre todo urbana y de clase media?
      O la de las «mafias» del conurbano para ampliar derechos en donde nadie quiere ampliarlos?
      Yo prefiero repartir obra pública entre los intendentes, o planes Argentina trabaja, antes que pontificar contra las mafias desde el diario La Nación. A ver si nos entendemos: La Nación!!!!!
      No discuto que sea invencible. Puede ser. Pero usarlo como medio para pontificar sobre la pelea contra las mafias. Dejémosnos de joder.
      Saludos

      1. Mariano:
        No podemos hacer una análisis más progre, para lo cual basta no olvidar las enseñanzas que surgen de la tradición del caballo de Troya, muy bien seguidas por Antonio Gramsci en cuanto entendía que: “El Estado no era más que una trinchera avanzada, detrás de la cual había una robusta cadena de fortalezas y casamatas” y en el occidente civilizado esas casamatas no se ocupan por la fuerza.- Siendo “La Nación” una fortaleza, no será que Tenembaun ha clavado una pica en Flandes.-
        Saludos.-

      2. Si Tenembaum ocupara el espacio para decir algo que a los intereses de La Nación le resultara inconveniente, te diría que sí.
        Pero no parece ser el caso, sino que se limita a reproducir el mismo discurso.
        Más parece que Flandes ha clavado una pica en Tenembaum.
        Digamos, Tenembaum va a seguir en Flandes, mientras a las autoridades de Flandes les convenga lo que Tenembaum dice. Cuando por algún motivo, qué se yo, un cambio de Gobierno nacional más afin con la ideología de Flandes, Tenembaum empiece a querer decir cosas «inconvenientes», Tenembaum vuela. Si es, por supuesto, que para aquel momento a Tenembaum le siguen quedando ganas de decir alguna cosa inconveniente.
        Saludos

      3. Cual es el problema de que Tenembaun salga en La Nacion? Que es un diario cuya linea editorial no te gusta?
        Cual es entonces el criterio? Todo aquel que no es entrevistado en Pagina 12 o el Argentino, apoya a un regimen oligarquico?
        Tenembaun y La Nacion coinciden en ser opositores a este gobierno. Y ahi acaban las coincidencias.

      4. Tenembaum puede salir en La Nación o en donde quiera. No es un problema, Eduardo. Digo esto porque me preguntás cuál es el problema.
        No hay problema.
        Tenembaum y La Nación coinciden en que Moyano y los intendentes del conurbano son el gran mal que aqueja a este país. Es bastante más que la coincidencia coyuntural de estar en contra del gobierno.
        Pelear contra el poder es cortar el chorro de la obra pública, no contradecir, aunque sea a veces, a AEA. En eso coinciden Tenembaum y La Nación. O al menos eso deja entrever Tenembaum en el capítulo del libro que presentó en el diario.
        Es su opinión. Muy distinta de la mia.
        Él tiene derecho a expresarla. Calculo que yo también.
        Saludos

    2. Diego: pensalo de esta forma. Cuando en La Nación se habla de «mafias» y de clientelismo, no se distingue mucho entre Ishii y Milagros Sala.
      Se entiende lo que quiero decir?
      Abrazo.

      1. Claro,

        pero eso se puede solucionar técnicamente sin que los últimos beneficiarios de la obra pública, de los planes, o de cualquier acción del Estado en la economía, pierdan volumen de beneficios. No sé, armar un índice de obra pública/ cantidad de habitantes de cada municipio, algo así. No es tan difícil.

        P.D.: Y sí, a Milagros Salas y su épica vamos a tener que sacrificarla por tecnócrata asignado a esa región de Salta.

      2. Lo que queres decir es que «el cambio social esta por encima de las instituciones»? (de un gran pensador politico contemporaneo). Que las organizaciones para-estatales, que nadie voto, son las que finalmente van a garantizar una deseada muerte del Estado?
        No parece muy progresista eso de «es lo que hay» (parafrasis de aquella frase de Roosevelt sobre la dictadura de Somoza «son unos hijos de puta, pero son nuestros hijos de puta») o que una mayor democratizacion de la politica es indeseable.
        Saludos

      3. A los intendentes del conurbano no los votó nadie?
        Cualquiera de ellos tiene muchos más votos que el 90% de los senadores que hoy asumen el rol de garantes de la república y la democracia.
        Cuando se habla de votos: «a Hitler también lo votaban».
        Cuando se habla de organización de base: «nadie los votó, así que no pueden valer más que las instituciones».
        Por qué no decimos directamnte que «las instituciones» son legítimas siempre y cuando funcionen de acuerdo a las expectativas que losd que las invocan tienen de ellas, y listo.
        Saludos

      4. Sinceramente, es dificil seguirte. Creo que no tenes, o al menos planteas mal, ideales de organizacion social para el futuro cercano y mas lejano. Vos queres cambiar o no la cultura politica prebendaria y feudal de los intendentes del conurbano o de los cuadillos de provincia? Queres que haya instituciones de Estado sirviendo a la sociedad o que la guita del Estado se reparta entre agrupaciones para-estatales, muy mayoritariamente oficialistas, que no fueron votadas por nadie? Coincidis con Cristina y D’Elia en que los intendentes son mafiosos veletas y con Anibal F en que se tienen que hacer un enema de marchita peronista?
        Me parece que como buen kirchnerista, sos un bilardista politico, te gusta demasiado el statu quo ahora que conviene, pero ya pegaras grititos de indignacion cuando tengas que ver el partido desde atras del alambrado.
        Saludos.

      5. «Queres que haya instituciones de Estado sirviendo a la sociedad»

        Aparte de ser un lugar común, es una frase vacía que no significa nada. A qué sociedad? A los de AEA o a los de los asentamientos de San Martín?
        Y los prejuicios sobre lo que hacen, piensan y dicen otros, llevalos a otros lugar. Yo pienso lo que dije acá, ni más ni menos.
        Los grititos son como los que pegás vos?
        De verdad querés que revisemos todos los «ideales» de organización social? O solamente lo de los morochos que no te gustan?
        Qué hacemos con las organizaciones para-estatales que también usufructúan recursos del Estado, como por ejemplo, la Iglesia Católica? Qué hacemos con las redes de clientelismo que manejan en el conurbano? Y con las ONG´s? Y con las Fundaciones a través de las cuales desgravan impuestos y blanquean guita gente como los dueños de La Nación?
        A vos te preocupa Milagros Sala y los intendentes, solamente. Yo tengo otras prioridades. Ojo, no soy tan marmota como para no darme cuenta de que si desconstruís una red como la que despliega la iglesia católica, u otras iglesias, y no la reemplazás por algo que sea al menos igual de eficiente en la contención que brindan, vas a tener más problemas que soluciones.
        Es lo que no ven los tipos que se quejan de los intendentes y no saben ni cómo hablarle a la gente cuyo único contacto con el estado es a través del puntero.
        El país está hecho mierda, pero sin lugar a dudas podría estar muchísimo peor, gracias a los aires de «suficiencia» de gente que se cree que solamente con buenas intenciones se arreglan las cosas.
        Saludos.

  3. Si lo único malo que hay que decir del libro es que su autor escribió para La Nación (como Barone durante años), no me extraña que termine siendo un best seller.

    1. Mariano: me parece que hay una toma de posición bastante clara con relación a varias cosas que no son solamente que Tenembaum escriba en La Nación, sino qué cosas dice en La Nación, y qué significa La Nación. Cómo acusa de servilismo con los poderes instituidos a Kirchner por hacer obra pública con los intendentes peronistas del conurbano (aunque también ligaron los no peronistas, habría que decirlo, y si no preguntar por Posse, García, Ivoskus, Sabatella), mientras trabaja en un diario que es el vocero de un grupo de instituciones que representan un poder fáctico bastante más añejo que los intendentes, por ejemplo.
      Podés estar en desacuerdo (cosa que pasa siempre, o casi) pero no me acuses de simplista, porque creo que no lo merezco.
      Barone no usó ese espacio, me parece, para abonar la idea implícita de que Milagros Sala, Moyano e Ishii son el gran mal de la Argentina, que es, creo, un resumen bastante fiel de la línea editorial del diario.
      Pero, igual, es problema de Barone ese.
      Y si el libro es un best-seller, qué se yo, hay grandes libros que no lo fueron, y hay otras porquerías que ya nadie recuerda, que en sus tiempos batieron récords de venta.
      Aclaro que lo único que leí del libro es lo que se presentó en La Nación de hoy: el prólogo y un capítulo (que ni siquiera sé si está entero). Por lo que se ve, no va a tener las 500 páginas de el de Majul.
      Saludos

  4. Mariano, te copio un comentario que dejé en tu blog:

    Tengo un libro de 2003, firmado por Tenembaum, llamado «Kirchner es peronista».
    En su Final Abierto, en octubre de 2003, enumeraba los logros de Kirchner y decia:

    «hay señales que llevan a que la mayoria confiemos en la capacidad de decisión y de trabajo del gobierno, puestos al servicio de la justicia y los intereses nacionales y populares».

    Lo que es darse vuelta como una tortilla…

    Y agrego: ¿seguirá hablando desde lo nacional y popular el muchacho éste?
    Aparte de no ser un tipo al que no le leí ni una sola idea brillante, su prosa es horrible.

    1. Bueno, dice Tenembaum en La Nación de hoy que tuvo una relación vertiginosa con el kirchnerismo. Que pasó del desconocimiento, a la confianza y la esperanza, y de allí a la desilusión y la bronca, con asombrosa velocidad.
      Como «la sociedad». Salvo los cooptados, que aún hoy siguen defendiéndolos, o los fascistas que se opusieron siempre por cuestiones ideológicas o estéticas. No es una descripción de «sociedad» muy inclusiva respecto de los que piensan distinto a él, no?
      Saludos

      1. La nación y bernesto Nestelbaumn tienen en común que odian, tienen en común un enemigo, el pueblo, los gobiernos populares, aún los gobiernos tibiamente populares, cualquier cosa que ponga en peligro o cuestione sus privilegios. La diferencia es que la Nacion fue así , siempre y TNmbaunm es un traidor, que se alegra cuando nos va mal a los argentinos, que quiere ganar guita pero le da verguenza, porque discute que no existe la concentración de medios desde el corazón del monopolio, y porque los hijos de los verdaderos dueños del país , nacen sabiendo quienes son y se enorgullesen , en cambio los hijos de tenenmbaun van a cambiarse el apellido del traidor, avergonzados del padre que les toco en suerte.

  5. La demonización de La Nación (y, no eludo el debate, lo que el diario representaría) me parece de una simpleza y superficialidad pasmosas, propia de debates de universitarios atropellados, que necesitan entender la realidad en términos maniqueos. La realidad no cabe en compatimentos tan absolutos, y sólo puede ser así presentada sacrificando justeza en el análisis.
    La hipótesis de que La Nación representa el poder permanente de la Argentina, la oligarquía agro exportadora y a la industria, pudo ser cierta a principios de siglo, pero hoy día es una tontería.
    Y lo es porque ni la Argentina hoy se reduce a ese espacio económico, ni los diarios tienen la importancia de otrora. ¿Cuántos ejemplares vende La Nación?
    En definitiva, el propio gobierno, con torpeza memorable, multiplica a niveles infinitos el poder de daño que pueden tener los medios escritos.

    1. Paredes: La Nación nunca fue un diario con muchos lectores.
      La importancia de un diario no es determianda por la cantidad de ejemplares que vende. Pensar así es de «una simpleza y superficialidad pasmosas». La Nación es «la tribuna de doctrina». Lo dicen ellos, no los «universitarios atropellados, que necesitan entender la realidad en términos maniqueos» (entre los cuales supongo que me cuento).
      Quién lee La Nación? Bueno, tiene un alto porcentaje de lectores entre los jueces, por ejemplo. Las columnas de Morales Sola, o de Mariano Grondona son segurmante leídas con avidez por legisladores que encuentran, o creen encontrar allí claves de cómo operar.
      Y otro lugar importante donde se lee y mucho La Nación es la redacción de Clarín (eso también es muy importante).
      Aunque en ese sentido es cierto, lo que diga Tenembaum no les debe importar mucho a ninguno de éstos.
      Y no es una tontería pensar que La Nación representa a los poderes (o a algunos poderes) permanentes de la Argentina.
      Saludos

      1. Mariano: cuales son las pruebas concretas de lo que decis de los lectores de esos diarios? hay algun estudio estadistico serio hecho entre los jueces y legisladores que respalde lo que decis o Artemio Lopez te paso los datos?

      2. No tengo datos estadísticos. Es posible que en los juzgados se lea Crónica o Popular, también.
        Ahora que lo pienso…

      3. estos que discuten ¿nunca escuchan radio ? la radio repite prolijo las editoriales de la nación , siguen prolijamente la linea que baja a la madrugada . Esto, es escuchado en miles de radios, repetido en programas de television por miles de periodistas.( Estos ingenuos piensan que los periodistas de la tele y la radio repiten como un coro los mismos argumentos de casualidad?) ¿ no prestan atencion a que son una única voz, una sola opinion,repetida prolijamente hasta unos segundos antes del hartazgo.
        Hagan el ejecicio de leer la nación tempranito,después prendes la radio, mitre 10 continental, escuchá repetido los mismos chistes del diario , el mismo dibujo de razonamiento repetido por los «originales» conductores de programas que al menos leen los diarios, porque los conductores de tn , el infradotado de bonelli, etc repiten lo que otro les dice , repiten ,lo que les soplan sus directivos, que si leyeron los diarios.

      4. Yo me crié leyendo la Nación. Lo único maño es el formato tan grande y que no cambian al tabloid que es mucho más práctico. No sirve para leer en la playa, por ejemplo.

  6. Dime que diario lees y te dire como piensas en politica.Esa es la realidad actual.y cada uno lee lo que elige por su personalidad,con todo derecho.No se cuantos leen»las dos campanas».
    Me permito insistir ante Paredes que el poder psicologico de los medios en la sociedad actual es mayor que antes por la forma acelerada y superficial en que vivimos.

  7. lo siento muchachos,pero tenembaum siempre estuvo contra los gobiernos de turno,antes contra menem ahora contra el kirchnerinato,falta de olfato? HADAD se hizo multimillonario durante los 90′,si a tenembaun solo le interesa el dinero (como muchos jovencitos kirchneristas dan a entender) por q no se hizo menemista? hoy seria un potentado.

    pero bueno,el judio sigue en la vereda de enfrente,y a falta de hadad,a quien tenemos ahora? a los aliverti,barone,verbitzky,etc (y si,danielito marco el camino de la asociacion con el poder estatal de turno,y otros estan siguiendo sus pasos,QUIEN TE HA VISTO Y QUIEN TE VE PERIODISTA PROGRE AMIGO MIO).

    la nacion no es leida por el grueso de la nefasta clase media (para lavarles el cerebrito tenemos a clarin segun la muchachada K) pero bueno,en tren de justificar la paranoia (bipolar) en contra de la prensa,la nacion debe ejercer una especia de «osmosis telepatica» sobre los clasemedieros. (y si che,asi es dificil q el «discurcito revolucionario» prenda en la gente).

    con respecto a los gordos del conurbano,y yo q se,al capone tb daba ingentes donativos a las asociaciones de caridad de chicago,pero no dejaba de ser un mafioso no?.

    aunque siempre q leo AFIRMACIONES sobre el conurbano de la juvenilla idealista,me da la impresion q conoceran mucho del conurbano norte (vicente lopez,olivos etc).

    pero,de «las achiras» en la matanza profunda,barrio carlos gardel y evita en caseros,vucetich en jose c. paz,conoceran algo? viendo las cosas q escriben (escuelitas,salitas,etc)…me temo q no tienen la mas puta idea.

    1. Gabriel: no tener la más puta idea de lo que se habla no es un delito tampoco.
      De hecho, vos seguís escribiendo cualquier cosa sin que nadie te diga nada.
      A ver, contá, che. Faltan escuelas? faltan salitas? Dale, pasanos los datos.

    2. yo soy de caseros gabriel y acá el único que no entiende nada sos vos.
      Aca en el barrio un traidor ignorante mala leche como vos no dura ni diez minutos.

      1. Emilio: En catanpeist esta disponible para vos la ficha de afiliación al ala brainless del kirchnerismo.
        pocas veces se ve un energúmeno con tan bajo nivel de argumentación como el tuyo.

    1. La «historia» del fracaso de la Alianza, renuncias, traiciones, saqueos y otras yerbas, está por escribirse, por lo que no coviene juzgar al «Chacho», por ahora. Su nombramiento en el Mercosur, creo a partir de Duhalde, no debe hacernos prejuzgar.-
      Saludos.-

  8. Está bien, hoy en día es un gran negocio escribir en contra de Kirchner. Sigue la línea de Majul. Yo me parece que me voy a abrir un blog antikirchnerista y le pongo los GoogleAds, y seguro algunos mangos me voy a hacer.

    1. No, mejor segui como defensor ciego y acritico de los K, que parece que es rentable todavia. Los anti-kirchneristas somos muchos y Clarin nos esta pagando cada vez menos. La asociacion protectora de gorilas nos debe la asignacion de Enero y ni hablar de como nos bajaron los auspicios de la oligarquia golpista.

      1. quien le va a pagar algo a alguien tan ignorante, inútil, como vos ? No servis ni para tocar el timbre y queres cobrar como opositor al gobierno? pedile plata a nestor que con opositores como vos gana seguro en 2011.

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