Tres mujeres adolescentes con uniforme de escuela secundaria viajan a las 10 de la mañana en el Subte y entre su diálogo inmaduro, propio de los 15 o 16 años que podrían tener, logro escuchar el siguiente pasaje:
Adolescente con peinado Flogger: ¿Alguna sabe como terminó la votación?
Adolescente con anteojos: Creo que ganó el negro.
Adolescente con peinado Flogger: ¿Qué negro?
Tercera adolescente con cara de nada: El negro, Osama.
Adolescente con peinado Flogger: No, eso no, respondió. Yo preguntaba por bailando.
Tercera adolescente con cara de nada: Ah! ¿Eso preguntabas?, dijo y agregó: ganó la Tota Santillan con el 50,3 %.
Adolescente con anteojos: Le ganó a Mariana de Melo.
La conversación que antecede me ha provocado alguna que otra reflexión luego de escucharla. Intenté preguntarme cual puede ser la causa de la creciente anemia política de los jóvenes, propia del desinterés crónico por la mayoría de las cosas que no salen en la televisión o en youtube. El mundo ya está planteado así, y no parece que nadie se preocupe demasiado por torcerlo.
Los Floggers, Los Emo, Los Cumbio y cualquier otra manifestación adolescente de caracter asociativo que habitualmente nos topamos por la calle, no son más que esos impulsos de rebelión y cambio que vive dentro de cada joven. Antés se volcaban en la política, hoy se vierten en fotos por internet.
Son los hijos de una generación golpeada y devastada por la dictadura militar, que al tiempo que borraba a la gente, hacía desaparecer los sentimientos partidarios a fuerza de miedo a las represalias. Y ahi están ellos, hombres y mujeres de secundaria, cumpliendo secundarios papeles en los engranajes sociales. Los medios se ocupan de aquellos cuando alguna de sus tribus se pone de moda o cuando 5 o 6 se revientan contra un volquete arriba de un automovil.
No me importa que no sepan quien ganó las elecciones de ayer en Estados Unidos, se los juro. Ni si quiera me importa a mí. Lo que realmente me incomoda y alarma es la despreocupación por la vida política del país. Este sistema necesita un cambio de aire, y solo los jóvenes pueden dárselo. La vieja política solo introduce sangre sucia y contaminada al sistema circulatorio de cualquier nueva tendencia, manchandola y provocando su muerte en la mayoría de los casos. Porque como dice León Gieco «Dicen la juventud no tiene para gobernar la experiencia suficiente. Menos mal, que nunca la tengan, la experiencia de robar. Menos mal, que nunca la tengan, la experiencia de mentir…»
Muy interesante el post para pensar en el tema. Pero hay algo que me parece contradictorio. Coincido en lo bueno que sería ver a más jóvenes interesados por la política. Pero no creo que pueda pensarse en un corte con la política anterior para que llegue la nueva. Si creemos que «La vieja política solo introduce sangre sucia y contaminada» y si León Gieco asimila gobernar con robar y mentir, veo difícil que para los jóvenes sea estimulante dedicarse a la política. Creo que los que estamos a favor de la política tenemos que poder rescatar a una buena porción de políticos, si «todos los políticos son malos», la política también lo es. Creo que el tema de la renovación política es complejo y merece un debate muy amplio, en cualquier caso el post me parece una muy buena iniciativa.
siempre creí que para que la politica le guste a la gente como yo (sin ideologías definidas y en el limbo) tiene que ser bién vendida, por vendida entiendo que comuniquen cosas simples que yo pueda entender e identificarme, si me identifico soy parte y paso a estar incluído en la política y la democracia, ahora tengo que participar si o si por que tengo voz y porque importo. Es algo que estoy haciendo yo ahora, mal o bién es un inicio.
Bien Germán. Yo creo que el desínterés no es sólo de los jóvenes, sino que es un problema de todo el pueblo. Creo que todos somos responsables y en primer lugar los políticos. Por ejemplo, mandé 3 (tres) mails al jefe de gobiernos de Buenos Aires, en un sitio especial para contactarse, y ninguno de los tres me lo contestaron.
Sería, a mi modo de ver, prioritario abrir canales de comunicación entre el pueblo y el gobierno en todos los niveles. Nadie da bola.
Que se comprenda que la solución que promuevo no es borrar intempestivamente la vieja política para introducir de pleno la nueva, sería un necio si así lo hiciera. Lo importante es generar conciencia en todos los jovenes, que sepan y que quieran saber. Que no los obliguen a memorizar las batallas libradas por San Martin, sino que ellos deseen saber cuales fueron. Las nuevas tecnologías no solo han traido aspectos negativos a la formación de las generaciones futuras, y espacios como este son la viva demostración de ello. Por primera vez en la historia, existe un completo acceso a la información, por fuera de los medios tradicionales, a los que hay que explotar y sacar todo el provecho posible. Es preciso generar ámbitos de debate en los que no se controvierta quien bailó mejor o quien insultó a quien por la televisión, sino que se discuta que modelo de país queremos para nosotros.
Esa sangre nueva es la que irá depurando el sistema lentamente, en forma gradual. Borrando por completo algunos signos de la vieja política en algunos casos y complementandolos en otros.
Che, los chicos de 15 son hijos de mi generación y nosotros éramos demasiado jóvenes para que la dictadura nos hiciera algo, pero la edad justa para participar en política con la vuelta a la democracia. Así que si no les importa la política la causa no es la dictadura militar sino lo que vino después.
Vigía: coincido plenamente con tu visión. decime de algún blog o algo más para colaborar entre embos. soy conserj@hotmail.com de Villa Crespo, BsAs. Germán y Ana también. http://horacioac.blogspot.com/
Porque los jovenes no se interesan por la politica?Han dicho bien los anteriores comentaristas:no solo los jovenes no se interesan,tampoco los adultos.Se vive desocializado y por lo tanto despolitizado.Se vive para lo economico,que olvida o somete a lo humano.Postmodernismo:sociedad del entretenimiento y del pasarla bien,del consumo y del presentismo,del musculo mas que del pensamiento,de la reproduccion que de la creacion.Ademas la politica esta desprestigiada.Y soy de quienes piensan que aun padecemos los efectos psicologicos de la dictadura militar:el miedo(sumado al tradicional no te metas9,las culpas andan vueltas (como en Europa todavia pesan las dos guerras mundiales del siglo anterior y las persecusiones judias)y obstaculizan nuestros acuerdos.Pero ademas los politicos posteriores no han ayudado a que se organicen centros y o escuelas de formacion politica.INTERESA MAS LA INFORMATICA QUE EL ANALISIS DE NUESTRA SOCIEDAD.