Romina Manguel, nos cuenta Gerardo Fernández, escribió en su twitter:
«No tenemos los políticos que nos merecemos. Somos mucho mejores».
No. Los políticos no se merecen: se eligen. No sucede lo mismo, para nombrar a otros actores del poder, con empresarios, jueces y, ejem, periodistas. Por otro lado, la lógica antipolítica de la frase vuelve a la división autocomplaciente entre políticos, esa casta de malvados, y la «gente común», sus víctimas eternas.
Yo no me como esa lógica, pero es notable que quien la utiliza no parece darse cuenta de que el sayo, en tanto que miembro del «cuarto poder», le cabe como al que más. Y ustedes, Romina (si hay «ustedes los políticos» hay un ustedes que te incluye con tus cofrades), nos vendieron buzones y se aliaron con lo peor de tus denostados políticos. Lo que pasa es que la autocrítica, como el Infierno, siempre es para los otros.
Título magnífico
Ja. Y artículo mínimo.
Artículo mínimo con título magnífico y esdrújulo, polémico, sobre políticas públicas, con exégesis pírricas.
Jaaa. Agradecidísimo.