Foto |
Además de Presidente, el 5 de octubre Brasil vota para saber quienes serán los gobernadores de los 26 Estados y del Distrito Federal por los próximos cuatro años. En otro Post ya habíamos escrito sobre los aspirantes a ocupar el Palacio del Planalto a partir del primero de enero del 2015.
A diferencia de otros países federales, donde los estados / provincias tienen autonomía para elegir las fechas de las elecciones, en Brasil la Constitución dispone que los comicios para Gobernador (primera y segunda vuelta) se realicen en simultaneo con las de Presidente. Esto nos puede hacer creer que existe algún tipo de efecto arrastre donde el candidato a Presidente aporta votos al candidato a Gobernador del mismo partido o coalición y/o viceversa.
En este nos vamos a dedicar a hablar de las elecciones en los 2 Estados más importantes de Brasil: São Paulo y Rio De Janeiro y vamos a ver si en que medida si se cumple o no este efecto arrastre.
1. El Bastión del Tucán
Cuarenta millones de habitantes, casi un tercio del PBI del Brasil, centro financiero, industrial, comercial y cultural del país. Hace 80 años se forjaba la imagen de un Estado locomotora que impulsaba al resto de los vagones / estados del país. Si bien las economías del resto de los estados se diversificaron, la situación en que se encuentra la economía del Estado de São Paulo es un termómetro fundamental para entender como esta el resto del país. Es esta una de las razones por lo que, probablemente, la elección a Gobernador del Estado sea la segunda en importancia luego de la de Presidente de la República.
A pesar de ser el lugar donde tuvieron origen las luchas sindicales que convertirían a Lula en un líder de carácter nacional, São Paulo tal vez sea uno de los Estados más refractarios al PT a la hora de elegir Gobernador. Ni la popularidad de Lula, ni el crecimiento que tuvo el Estado en los últimos 10 años lograron quebrar la hegemonía del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB, cuyo logo es un Tucan), al que pertenecen (salvo breves interregnos) los gobernadores del Estado desde 1995.
No se prevén sorpresas para la elección a Gobernador del Estado del próximo 5 de Octubre. De acuerdo a las encuestas Geraldo «Picolé de chuchu» Alckmin (llamado así en honor al sabor de un helado que no tiene gusto a nada, es decir que no tiene gracia) lograría la reelección en primera vuelta y de esa forma prolongaría la dominación del PSDB por otros cuatro años. Ni el Presidente de la Federación de Industrias del Estado de São Paulo y candidato del PMDB Paulo Skaf parece capaz de evitar que de nuevo un Tucano ocupe el Palácio dos Bandeirantes
Párrafo aparte merecen el exministro de Salud del Gobierno de Dilma y candidato del PT, Alexandre Padilha. Principal responsable del programa mais médicos, un programa por el cual principalmente doctores extranjeros (mayormente cubanos) llevan atención sanitaria a lugares alejados o carenciados del país, Padilha esta destinado a correr peor suerte que la de sus anteriores compañeros del PT que compitieron por la gobernación ya que estaría la menor cantidad de votos que un candidato petista obtiene desde 1998.
2. Píe Grande vs los Garotinho
Segundo en PBI, tercero en población, la importancia de Rio de Janeiro no se mide sólo en términos económicos sino también simbólicos tanto por el pasado como por los desafíos por venir: por el lado del pasado el hecho de que su capital haya sido la sede del Gobierno Federal hasta la mudanza a Brasilia en 1960 y por el lado de los desafíos esta la realización de los próximos juegos olimpicos de verano en 2016.
Es en este contexto que se realizan las elecciones a Gobernador del Estado. Las cuales, a diferencia de lo que sucede en São Paulo, prometen ser más competitivas. Por un lado tenemos a Luiz Fernando de Souza «Pezão» (Píe Grande, calza 47) del PMDB y actual Gobernador que busca la reelección y por el otro tenemos al evangélico Anthony Garotinho, del PR exgobernador y fundador de una dinastía política la cual ya dio otra Gobernadora al estado (su esposa Rosinha) y una Diputada Estadual (su hija Clarissa). De acuerdo a las encuestas Pezão y Garotinho irían a una segunda vuelta para decidir quien ocupa el Palácio de Guanabara a partir del primero de enero de 2015. El PT lleva como candidato propio al exlider estudiantil Lindberg Farias, el cual figura cuarto en las preferencias con un 12% de intención de voto.
Comentario aparte merece la candidatura a Senador de O Baixinho Romário. Actual Diputado Federal, la elección del Campeón del Mundo en 2010 fue una de las sensaciones (junto con el Payaso Tiririca) debido su alto perfil. Desde la Comisión de Deportes Romário impulso una agenda donde cuestiono las acciones de la Confederación Brasileña de Fútbol, especialmente en un año de mundial. Según las ultimas encuestas, Romário obtiene un 48% de intención de voto por lo que su escaño en el Senado estaría asegurado.
3. La Importancia de los Estados
A diferencia de otros países federales, los Gobernadores de los Estados de Brasil (especialmente los dos mencionados en este post) gozan de mayor autonomía fiscal a la hora de recaudar y dependen menos del Gobierno Federal para su funcionamiento. De hecho en términos fiscales los Estados São Paulo y Rio explican el 60% de la Recaudación Federal y aportan más de lo que reciben de Brasilia.
Autonomía del Poder Central y Peso Especifico de los Estados son algunas de las variables que nos explican porque son tan importantes estas elecciones para Brasil y porque, a pesar de realizarse en la misma fecha que las presidenciales, constituyen una elección aparte. Sólo para tener una idea, las alianzas que se dan a nivel Federal no se respetan a la hora de elegir gobernadores.
En los dos principales Estados de Brasil el Partido de Dilma lleva candidatos sin chances de ganar las elecciones locales. El Partido de Marina Silva directamente no lleva hombre propio y apoya al candidato del PSDB en São Paulo y al del PT en Rio. Partidos que comparten el mismo candidato a Presidente pueden ser rivales en determinado Estado y partidos rivales a nivel Federal pueden ser aliados y apoyar el mismo candidato a Gobernador. Esto puede sorprender a muchos que no están acostumbrados a esta flexibilidad tan común de la política brasileña.