Argentina y su aerolínea de bandera

Hace cuatro años, el país vecino enfrentó una situación similar a la de Pluna, y hoy tiene una línea aérea más competitiva luego de un proceso a través del cual el Estado se hizo cargo de una aerolínea privada que había quebrado, y que ahora funciona mejor, conectando a todo el país a través de un corredor federal, favoreciendo al turismo y haciendo crecer a las economías regionales.
Hernán Reyes Alcaide HACE 7 horas
Archivado en:
Politica
En 2008, el Estado argentino adoptó una decisión histórica y estratégica: recuperar para su patrimonio Aerolíneas Argentinas y Austral Líneas Aéreas, preservando la línea de bandera para la integración federal, y cumpliendo los objetivos de sostener el
servicio público, mantener la fuente laboral de más de 9 mil
trabajadores y potenciar la aeronavegación como instrumento para el desarrollo económico y turístico de la Argentina. Hoy, a 4 años de lo
que parecía una gesta imposible, la compañía aumentó su flota de aviones, maximizó su presencia nacional y regional, y logro mantener
la conectividad con ciudades del interior que las aerolíneas comerciales continúan dejando de lado por considerarlas “no redituables”.
Con la recuperación y la nacionalización, el gobierno de Cristina
Fernández promovió la recuperación de la aerolínea a través de una ley votada por amplia mayoría en el Congreso y que terminó una relación de
conflicto que sólo conducía a la destrucción de las empresas que resultaban esenciales para una correcta prestación del servicio de transporte aerocomercial de pasajeros. De esta manera, se reestableció
la comunicación entre los distintos puntos del país y se mantiene la aerolínea de bandera en una decisión que es de vital importancia ya que,
entre otros beneficios, fomenta el desarrollo estratégico territorial.
Los puntos clave de la nueva gestión, que hoy muestra resultados
concretos, resaltan la necesidad de contar con una línea de bandera nacional con algún grado de participación estatal, que permita al país
conservar las metas fundamentales de control sobre una herramienta estratégica. Si bien, como en el caso de Pluna, las criticas se
enfocan en el déficit que puede tener durante un tiempo una empresa de estas características, lo cierto es que el costo de mantenimiento
diario de la firma regresa al Estado promoviendo las economías regionales y generando un crecimiento del turismo interno.
Por ejemplo, la nueva Aerolíneas firmó con la Empresa Brasilera de
Aeronáutica S.A. un contrato por la adquisición de 20 aeronaves nuevas para la flota de esta última. Esto indica, no sólo una expresa
ratificación de la conveniencia de adquirir nuevas aeronaves, sino además, refleja que la decisión política fue de suma importancia para el Estado Nacional, ya que implica asegurar la continuidad,
regularidad y mejora del servicio público, así como garantizar la
conectividad federal de todas las provincias y el acceso de todos los ciudadanos a este servicio.
Como parte de su proceso de expansión, Aerolíneas Argentinas, suscribió en el mes de noviembre de 2010 el documento de inicio del
proceso de integración futuro a la Alianza SkyTeam. Este proceso durará alrededor de un año en el que se trabajará en diversos aspectos hasta la integración definitiva en 2012 aproximadamente.
En base a estos pilares, el presidente de Aerolíneas Argentinas,Mariano Recalde, afirmó que la compañía ya está nuevamente a la altura de las principales firmas aerocomerciales del mundo, pero sin perder su “prioridad” en el eje de su red de cabotaje y en los vuelos
regionales. Recalde se hizo cargo de la firma con apenas 38 años, secundado por otra camada de jóvenes que ingresó en la gestión pública
en esa experiencia, de la que sobresalen el ahora diputado Eduardo “Wado” de Pedro y el actual viceministro de Economía Axel Kiciloff.
“A partir de la recuperación por el Estado de la línea de bandera, luego de 18 años de distintas gestiones que la dejaron al borde de la
desaparición, hoy Aerolíneas Argentinas tiene una visión completamente distinta, es el cambio de paradigma que ya no tiene al lucro como fin
inmediato sino que enfoca a darle conectividad aérea al país”, dijo Recalde.
También reafirmó que para la actual gestión “es fundamental fortalecer el mercado doméstico y hacer acuerdos con otras líneas que nos abastezcan y que podamos distribuir dentro de la Argentina.
La Aerolínea de bandera incrementó en los últimos dos años en un 41% la cantidad de pasajeros de su red regional, al tiempo que aumentó en un 24% la frecuencia de vuelos a esos destinos en los últimos doce meses.
Recalde, tras presentar el “Plan Operativo 2012≤ hace unas semanas, agregó que los objetivos son promover el turismo doméstico y el
internacional receptivo, y consolidar la presencia en mercados estratégicos mejorando la rentabilidad de su red operativa.
Como parte de esa estrategia, la aerolínea de bandera decidió incrementar este año en un 26% promedio sus frecuencias a destinos domésticos, fortaleciendo su perfil federal con un incremento de conectividad entre las provincias argentinas.
Pero como complemento de esta política se planteó también “priorizar la oferta con los países de América Latina y lograr un mayor turismo
receptivo internacional”, lo que llevó en 2011 a un incremento de las frecuencias del 24% semanal.
De acuerdo a los balances que presentó la nueva gestión en el Congreso, desde el desembarco estatal no sólo se mejoró la capacidad operativa de la firma, sino que el proceso redundó en consistentes mejoras para los trabajadores: se mejoraron los sueldos, vales de almuerzo y viáticos a través de negociaciones con las diferentes entidades gremiales, en medio de una inversión a la fecha de 1.453
millones de dólares que permitió, por ejemplo, un aumento de un 8 por ciento en los puestos de trabajo y hubo un 40 por ciento más de productividad.

Un comentario en «Argentina y su aerolínea de bandera»

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *