Jane Fraser pone a la Argentina como ejemplo. «Hoy somos 50% más grandes que antes», asegura la CEO del Citi para la región desde mediados de 2015, mientras abre el primer Latam Media Summit en una sala rodeada de rascacielos neoyorquinos.
«Tenemos más capital, tenemos más activos que hace un año atrás, antes de vender la banca de consumo», se explaya.
Es que el banco viene de desprenderse de su negocio retail en más de 30 países en una apuesta por concentrarse ahí donde es más fuerte y tiene la escala para ser eficiente, el mundo institucional.
En la región, la excepción fue México, el segundo mercado más grande después de Estados Unidos. En el universo de los clientes institucionales, América latina tiene un peso del 17% en los ingresos. El banco es el primero en colocaciones de deuda y el segundo en banca de inversión.
En la Argentina fue un período en el que hubo mucha necesidad de financiación tanto de empresas como de gobiernos y provincias y las multinacionales también tuvieron un papel importante», explicó.
Además, no sólo cambió claramente el mix de clientes sino también la actitud. Dejaron de estar tan defensivos y hoy ya son optimistas», reconoció en relación a esta transición.
Desde su base en Miami, Fraser cubre 23 países (el Citi es el banco con presencia más extendida en esta parte del mundo) y tiene bajo su comando un equipo de 54.000 personas.
La venta del negocio minorista, que en la Argentina fue para el banco Santander Río, es parte de una estrategia global que cambió el juego para el banco, hoy enfocado en un intenso proceso de digitalización.
Fraser también mencionó el posible ruido electoral en el segundo semestre con elecciones en Colombia, México y Brasil.
«Ya pasamos por ciclos más duros. Estamos hace 100 años en la región. Reconocemos un creciente sentimiento anti establishment pero tenemos experiencia manejando estos riesgos», comentó Fraser.
«Tenemos más capital, tenemos más activos que hace un año atrás, antes de vender la banca de consumo», se explaya.
Es que el banco viene de desprenderse de su negocio retail en más de 30 países en una apuesta por concentrarse ahí donde es más fuerte y tiene la escala para ser eficiente, el mundo institucional.
En la región, la excepción fue México, el segundo mercado más grande después de Estados Unidos. En el universo de los clientes institucionales, América latina tiene un peso del 17% en los ingresos. El banco es el primero en colocaciones de deuda y el segundo en banca de inversión.
En la Argentina fue un período en el que hubo mucha necesidad de financiación tanto de empresas como de gobiernos y provincias y las multinacionales también tuvieron un papel importante», explicó.
Además, no sólo cambió claramente el mix de clientes sino también la actitud. Dejaron de estar tan defensivos y hoy ya son optimistas», reconoció en relación a esta transición.
Desde su base en Miami, Fraser cubre 23 países (el Citi es el banco con presencia más extendida en esta parte del mundo) y tiene bajo su comando un equipo de 54.000 personas.
La venta del negocio minorista, que en la Argentina fue para el banco Santander Río, es parte de una estrategia global que cambió el juego para el banco, hoy enfocado en un intenso proceso de digitalización.
Fraser también mencionó el posible ruido electoral en el segundo semestre con elecciones en Colombia, México y Brasil.
«Ya pasamos por ciclos más duros. Estamos hace 100 años en la región. Reconocemos un creciente sentimiento anti establishment pero tenemos experiencia manejando estos riesgos», comentó Fraser.