Atrás quedaron los tiempos en los que el ex presidente Eduardo Duhalde y el gobernador de Chubut, Mario Das Neves, se tiraban dardos venenosos y se miraban con recelo. Ayer, los dos se regalaron sonrisas y elogios. Juntos, sellaron oficialmente la fórmula presidencial del partido Unión Popular. “Duhalde más Das Neves”, será el eslogan con el que los dos hombres del peronismo disidente recorrerán el país, rumbo a las presidenciales de octubre.
“Algo que viene y que pega y que duele/Algo me tiene que despabilar/La suerte va a cambiar/Hace cuánto no ganás”. Sonaba de fondo la música de “Los Tipitos”. Con letra sugerente, Das Neves y Duhalde subieron al escenario del salón San Telmo, en el hotel Sheraton de la Ciudad de Buenos Aires. Las sillas se dividieron de manera religiosa en dos sectores: derecha para los invitados de Duhalde e izquierda para los del chubutense. De un lado, Miguel Angel Toma; Antonio Arcuri; Martín Redrado; el titular del Sindicato de Peones Rurales, Gerónimo “Momo” Venegas; Luis Barrionuevo; la diputada nacional Graciela Camaño; la senadora Chiche Duhalde; el diputado y ex presidente Ramón Puerta; el ex titular del Banco Central, Martín Redrado; el Beto Alonso y Aldo Rico. Alonso volvió a mostrar su destreza a la hora de las gambetas. Las improvisó para evitar salir en el mismo cuadro de las fotos de Rico que se sentó atrás de él. Muy cerca de ellos, miraba el fiscal y ex ministro de Seguridad de Daniel Scioli, Carlos Stornelli.
Das Neves fue el primero en subir al atril. Sólo eso le sirvió para demostrar el apoyo de su gente.
“Le ganamos dos veces. Le vamos a seguir ganando” , sentenció el gobernador. Acusó al kirchnerismo de “falso progresismo” y se animó a jugar con la famosa frase de Beatriz Sarlo. “‘Conmigo no, Barone’, dijo Sarlo.
Con nosotros, no. Nosotros somos peronistas ”, disparó Das Neves. “Les vamos a explicar como resolver los problemas de la gente”, agregó. También prometió, en caso de ganar las elecciones, el 82% móvil para los jubilados.
El discurso de Duhalde fue menos agresivo y más extenso. El ex presidente mencionó a cada unas de las fuerzas políticas que ya le brindaron su apoyo. “La fórmula es Duhalde más Das Neves, porque dos presidenciales han decidido trabajar juntos”, explicó. Elogió a Alberto Rodríguez Saá, uno de sus ¿rivales? y definió su gestión en San Luis, como uno de “los mejores modelos de gestión administrativa del país”. “Necesitamos un gremialismo que sea parte de la solución y no del problema”, sostuvo Duhalde, además de destacar la presencia de Venegas, Barrionuevo y más de 30 líderes sindicales: “Están acá porque no tienen miedo”. Duhalde habló de tres ejes: plan de hambre cero, combate a la inseguridad y derechos humanos.
“Cerraré las heridas del pasado con verdad y justicia” , aseguró. Habló de “recuperar la confianza en las Fuerzas Armadas”, porque “todavía se las confunde con la dictadura” .
“Nuestro país no ha desarrollado ni el 35% de su capacidad productiva”, afirmó sobre su política económica. Presentó a Graciela Camaño como su candidata a gobernadora en la Provincia. Entre los pocos extrapartidarios estaba el autonomista correntino José Antonio Romero Feris. El cierre fue con marcha peronista y Tula, sin bombo, hacía la “V”.
“Algo que viene y que pega y que duele/Algo me tiene que despabilar/La suerte va a cambiar/Hace cuánto no ganás”. Sonaba de fondo la música de “Los Tipitos”. Con letra sugerente, Das Neves y Duhalde subieron al escenario del salón San Telmo, en el hotel Sheraton de la Ciudad de Buenos Aires. Las sillas se dividieron de manera religiosa en dos sectores: derecha para los invitados de Duhalde e izquierda para los del chubutense. De un lado, Miguel Angel Toma; Antonio Arcuri; Martín Redrado; el titular del Sindicato de Peones Rurales, Gerónimo “Momo” Venegas; Luis Barrionuevo; la diputada nacional Graciela Camaño; la senadora Chiche Duhalde; el diputado y ex presidente Ramón Puerta; el ex titular del Banco Central, Martín Redrado; el Beto Alonso y Aldo Rico. Alonso volvió a mostrar su destreza a la hora de las gambetas. Las improvisó para evitar salir en el mismo cuadro de las fotos de Rico que se sentó atrás de él. Muy cerca de ellos, miraba el fiscal y ex ministro de Seguridad de Daniel Scioli, Carlos Stornelli.
Das Neves fue el primero en subir al atril. Sólo eso le sirvió para demostrar el apoyo de su gente.
“Le ganamos dos veces. Le vamos a seguir ganando” , sentenció el gobernador. Acusó al kirchnerismo de “falso progresismo” y se animó a jugar con la famosa frase de Beatriz Sarlo. “‘Conmigo no, Barone’, dijo Sarlo.
Con nosotros, no. Nosotros somos peronistas ”, disparó Das Neves. “Les vamos a explicar como resolver los problemas de la gente”, agregó. También prometió, en caso de ganar las elecciones, el 82% móvil para los jubilados.
El discurso de Duhalde fue menos agresivo y más extenso. El ex presidente mencionó a cada unas de las fuerzas políticas que ya le brindaron su apoyo. “La fórmula es Duhalde más Das Neves, porque dos presidenciales han decidido trabajar juntos”, explicó. Elogió a Alberto Rodríguez Saá, uno de sus ¿rivales? y definió su gestión en San Luis, como uno de “los mejores modelos de gestión administrativa del país”. “Necesitamos un gremialismo que sea parte de la solución y no del problema”, sostuvo Duhalde, además de destacar la presencia de Venegas, Barrionuevo y más de 30 líderes sindicales: “Están acá porque no tienen miedo”. Duhalde habló de tres ejes: plan de hambre cero, combate a la inseguridad y derechos humanos.
“Cerraré las heridas del pasado con verdad y justicia” , aseguró. Habló de “recuperar la confianza en las Fuerzas Armadas”, porque “todavía se las confunde con la dictadura” .
“Nuestro país no ha desarrollado ni el 35% de su capacidad productiva”, afirmó sobre su política económica. Presentó a Graciela Camaño como su candidata a gobernadora en la Provincia. Entre los pocos extrapartidarios estaba el autonomista correntino José Antonio Romero Feris. El cierre fue con marcha peronista y Tula, sin bombo, hacía la “V”.