Protagonista de la embestida del Gobierno contra las consultoras privadas que miden la inflación, el economista Carlos Melconian respondió el domingo a las preguntas de El Cronista TV en A24.
-¿Se convirtió en el enemigo publico N´ 1 del Gobierno?
-Es demasiado… Yo llevo 20 años en esto y la verdad es que uno tiene una personalidad y he dicho contundentemente las cosas de manera independiente pero siempre con educación y dentro de la ley. Creo que tenemos que bajar los decibeles porque quiero dar mi opinión más concentrado en los detalles técnicos. El primer tema central es que nunca los datos de precios que nosotros presentamos intenta ser sustituto del índice oficial. La economía y la tarea que uno hace es proyectar exportaciones, gasto público, cotización de moneda, inflación internacional y local, etc. Y luego de la proyección lo único que importa para cualquier publicación seria, local o internacional, son los números oficiales.
-¿Lo cuestionaban también en tiempos de hiperinflación?
-En esas épocas te perdías, y ahí había 45 índices y nadie se calentaba. Pasaron 9 presidentes, 20 ministros de Economía y 18 presidentes del Banco Central. No es que ahora hay un Superman que se avivó. Desde 2007, lo que a todos nos daba parecido, a las provincias, a los consultores, empezó a tomar una gran diferencia. Estas mediciones se inscriben dentro de la historia de la economía mundial y de 50 variables donde ésta es una más ¿Por qué se agarraron de esto? Que se yo…
-¿Y qué opina del pedido del juez Alejandro Catania para que los diarios entreguen listas de sus periodistas que informan sobre la inflación?
-Es una zona semi jurídica económica, que es un disparate. No lo del juez Catania, la causa es un disparate. Todo esto arranca con la multa de 500 mil pesos. Porque las causas fueron respondidas a través de lo que pudimos responder ya que hubo que llamar a un abogado para que nos defienda. Lo han visto abogados, ex jueces, el Congreso, constitucionalistas, y todo el mundo sabe que es un disparate. Después está lo de las listas de periodistas, que es una cuestión que yo creo que la Justicia esta trabajando para terminar con todo esto. No quiero opinar si la carta del juez estuvo bien o mal mandada, me quedo con la rectificación de la Justicia y la buena voluntad. Y para mí es un tema terminado.
-¿Lo conoce, lo trató a Guillermo Moreno?
-No lo conozco a Moreno, nunca me llamó y nunca hablé con él. Y con todos los ministros, presidentes de Bancos Central de distintas ideologías me he sentado con todos prácticamente. De este gobierno inclusive y con el expresidente Néstor Kirchner también. Estas cosas muchas veces, tomás un café y, hasta con buena onda, se consulta y se explica porqué a uno la inflación le da 20% y a ellos les da 7%. La verdad es que esto es un problema para la Argentina, porque los organismos internacionales están avivados y yo me doy cuenta que el ministro de Economía quiere sacarlo de la cancha al tema, pero al FMI le pidió que mande una misión. Todo el mundo sabe que lo de la inflación así es incontinuable.
-¿Qué consejo le daría al Gobierno sobre inflación?
-Que le preguntan a la gente en la calle sobre la inflación y creo que las cifras como las medimos nosotros ganan 10 a 0. Porque el índice de construcción da eso, porque la demanda salarial da eso, porque a la gente que va a comprar le da eso. Hay que resolverlo en un mundo sin inflación. Hay 180 países y sólo 11 con una inflación de dos dígitos.
-La inflación en el presupuesto 2012 es del 9,2%.
-No, yo creo que el presupuesto va a ir al Congreso y si quiere ser discutido y salir algo sensato va a tener que cambiar la proyección de variables: si tenés un aumento de precios de 20 puntos y estás pensando en algún plan para aplacar las expectativas inflacionarias, se necesitaría una concertación entre empresarios y sindicatos al 18% para ir bajando la inflación. De repente, el Gobierno usa su caudal político más que para imponer las cosas para discutirlas como corresponde.
-¿Se convirtió en el enemigo publico N´ 1 del Gobierno?
-Es demasiado… Yo llevo 20 años en esto y la verdad es que uno tiene una personalidad y he dicho contundentemente las cosas de manera independiente pero siempre con educación y dentro de la ley. Creo que tenemos que bajar los decibeles porque quiero dar mi opinión más concentrado en los detalles técnicos. El primer tema central es que nunca los datos de precios que nosotros presentamos intenta ser sustituto del índice oficial. La economía y la tarea que uno hace es proyectar exportaciones, gasto público, cotización de moneda, inflación internacional y local, etc. Y luego de la proyección lo único que importa para cualquier publicación seria, local o internacional, son los números oficiales.
-¿Lo cuestionaban también en tiempos de hiperinflación?
-En esas épocas te perdías, y ahí había 45 índices y nadie se calentaba. Pasaron 9 presidentes, 20 ministros de Economía y 18 presidentes del Banco Central. No es que ahora hay un Superman que se avivó. Desde 2007, lo que a todos nos daba parecido, a las provincias, a los consultores, empezó a tomar una gran diferencia. Estas mediciones se inscriben dentro de la historia de la economía mundial y de 50 variables donde ésta es una más ¿Por qué se agarraron de esto? Que se yo…
-¿Y qué opina del pedido del juez Alejandro Catania para que los diarios entreguen listas de sus periodistas que informan sobre la inflación?
-Es una zona semi jurídica económica, que es un disparate. No lo del juez Catania, la causa es un disparate. Todo esto arranca con la multa de 500 mil pesos. Porque las causas fueron respondidas a través de lo que pudimos responder ya que hubo que llamar a un abogado para que nos defienda. Lo han visto abogados, ex jueces, el Congreso, constitucionalistas, y todo el mundo sabe que es un disparate. Después está lo de las listas de periodistas, que es una cuestión que yo creo que la Justicia esta trabajando para terminar con todo esto. No quiero opinar si la carta del juez estuvo bien o mal mandada, me quedo con la rectificación de la Justicia y la buena voluntad. Y para mí es un tema terminado.
-¿Lo conoce, lo trató a Guillermo Moreno?
-No lo conozco a Moreno, nunca me llamó y nunca hablé con él. Y con todos los ministros, presidentes de Bancos Central de distintas ideologías me he sentado con todos prácticamente. De este gobierno inclusive y con el expresidente Néstor Kirchner también. Estas cosas muchas veces, tomás un café y, hasta con buena onda, se consulta y se explica porqué a uno la inflación le da 20% y a ellos les da 7%. La verdad es que esto es un problema para la Argentina, porque los organismos internacionales están avivados y yo me doy cuenta que el ministro de Economía quiere sacarlo de la cancha al tema, pero al FMI le pidió que mande una misión. Todo el mundo sabe que lo de la inflación así es incontinuable.
-¿Qué consejo le daría al Gobierno sobre inflación?
-Que le preguntan a la gente en la calle sobre la inflación y creo que las cifras como las medimos nosotros ganan 10 a 0. Porque el índice de construcción da eso, porque la demanda salarial da eso, porque a la gente que va a comprar le da eso. Hay que resolverlo en un mundo sin inflación. Hay 180 países y sólo 11 con una inflación de dos dígitos.
-La inflación en el presupuesto 2012 es del 9,2%.
-No, yo creo que el presupuesto va a ir al Congreso y si quiere ser discutido y salir algo sensato va a tener que cambiar la proyección de variables: si tenés un aumento de precios de 20 puntos y estás pensando en algún plan para aplacar las expectativas inflacionarias, se necesitaría una concertación entre empresarios y sindicatos al 18% para ir bajando la inflación. De repente, el Gobierno usa su caudal político más que para imponer las cosas para discutirlas como corresponde.
Por supuesto, si vos no sólo le crees al INDEC, también militas sus números/mentiras.
Y claro, nuevamente el argumento ‘democrático’ para evaluar cuestiones técnicas, o dicho en criollo, el millón de moscas que tienen razón en que la mierda es nutritiva, o si vamos a evaluar un accidente de avión y sus causas, le preguntamos a ‘lagente’ en la calle a ver si logramos entender qué falló.
Habría que recomendarle a Melconián que en su ‘encuesta’ agregue la preguntita ¿sabe Ud. qué es un índice? o esta otra, ¿sabe Ud. cómo se define y calcula un índice para que sea técnicamente correcto?
Que un técnico apele como defensa al criterio del millón de moscas, señala a las claras cuál es el nivel de defensa de su posición. Patético, una mera puesta en escena que no reconoce sus intereses.
Y esto sin siquiera entrar a ver si es correcto lo del Indec o no, si la percepción social es coherente con los índices, etc.
EL problema es que NO TIENEN DEFENSA estos tipejos con sus índice privados truchos.
Son más fiables que ellos las encuestas on line que figuran en los diarios: ¿piensa Ud. que hoy se termina el mundo?
¿Pero cuál es el problema en que digan lo que quieran? ¿Acaso no es parte de la libertad de expresión?
La respuesta es NO, no soy libre de ponerme en un teatro repleto a gritar ‘¡fuego!, ¡fuego!’.
Mucho menos cuando estoy de acuerdo con el dueño del teatro y con la aseguradora y cuando me importan tres pitos que haya muertos o gente que sufra las consecuencias. SI subo a un avión y me pongo a gritar o simplemente decirle a los pasajeros que ese avión tiene problemas técnicos, sin más va o viene el capitán me hace bajar y me detienen. Y se terminó el terrorismo ‘informativo’.
Si querés vacaciones gratis en Guantánamo, basta con que digas «En Maiami la pasé bomba» en un vuelo de American.
¿Y mi «libertad de expresión»? ¿Sacará un comunicado la SIP?
¿Yo estoy en pedo o el administrador me borró el comentario?
No, no. Es así. Era un comentario pasado de pimienta. A reformular que se acaba el mundo.
Saludos
Ah, bué… Nos falta el Comando Pío XII y pongan los fideos.
ladislalo lo dijo todo.
que le pregunten a la gente…
La «gente» es idiota, obvio (excepto cuando vota).
Por eso creo en el Indec.
Y no a mi mujer que viene del super quejándose del precio de las cosas.
Al final me harté y la tiré por el balcón.
No es idiota. Simplemente, tiene presente los 20 precios habituales, y no los 400 que releva el indec.
Cuando el tomate sube el 200%, no recuerda que está pagando 1,10 el subte o 25 la electricidad. Su mundo se restringe a lo que le llama la atención.
Si fuera por éso, preguntémosle a lagente qué hay que hacer con un violador de niños, para retroceder 4000 años de golpe.
No funcionan así las cosas.
Ja! Porque vos no conociste a mi mujer…
La muy turra no solo relevaba centenares de precios, sino que registraba puntillosamente todos los gastos del mes. Cada fin de mes me presentaba su maldito Excel y me daba un incordio terrible: ¡Contradecía al Indec!
Por eso hice lo que hice. Se lo merecía.
Bueno, cada cual tiene «su» inflación, y es dificilísimo que coincida con cualquier medición, no sólo con el indec. Si sos propietario, te pega de un modo diferente que si sos inquilino. Si mandás los chicos a la escuela, es bien diferente a los que tenemos hijos crecidos, si viajás mucho te beneficiás del transporte subsidiado más que el que no lo hace, y así. Es una nube de puntos, diferente para cada familia, época del año, etc.
Por éso siempre digo que para ser (más) creible debería informarse no un número sino una franja numérica que abarque al menos al 90-95% de la población. El problema es que eventualmente esa franja vaya del -2% al 40%.