RÍO DE JANEIRO.- En una decisión que reavivó el debate sobre los alcances de la libertad de expresión, la policía federal brasileña arrestó brevemente ayer en San Pablo al presidente de Google Brasil, Fabio José Silva Coelho, por no retirar de la plataforma YouTube unos videos en los que se denuncia a un candidato a alcalde para las elecciones municipales del 7 de octubre.
La orden de captura del ejecutivo de la empresa madre de YouTube había sido dictada anteayer por el juez Flavio Saad Perón, de Campo Grande, capital del estado de Mato Grosso do Sul, por «desobediencia» luego de los reclamos que presentó el político Alcides Bernal, candidato a la alcaldía de la ciudad por el Partido Progresista (PP), que había exigido a la justicia el bloqueo de esas imágenes.
En los videos subidos a la plataforma por un individuo particular se acusa a Bernal de enriquecimiento ilícito, de incentivar a una novia a tener un aborto y de golpear a chicos cuando estaba borracho.
Tras el arresto de Silva Coelho ayer por la tarde, sin embargo, la policía federal aclaró que el empresario no permanecería detenido por tratarse de un delito de bajo potencial ofensivo. Se le hizo firmar una declaración en la que se comprometió a presentarse ante la justicia y luego fue liberado.
«Si cada persona pudiese elegir entre cumplir o no una orden judicial que legalmente le fue impuesta, nuestra sociedad se volvería un caos», defendió su postura Saad Perón.
La empresa Google ya había apelado la decisión del magistrado que de todas maneras fue mantenida por el juez del tribunal regional electoral Amaury da Silva Kuklinski, que calificó los videos de «propaganda electoral negativa».
«Al tratarse de una plataforma, Google no es responsable por el contenido subido al sitio», destacó la compañía en un comunicado sobre el tema.
La justicia también había determinado la suspensión, por 24 horas, de Google y YouTube en el estado de Mato Grosso do Sul, y la operadora local Embratel señaló que esperaba indicaciones del tribunal regional electoral para cumplir con la medida ordenada.
Sin embargo, no es la primera vez que sucede en Brasil un caso en que entra en polémica la libertad de expresión en los medios electrónicos.
Dos semanas atrás, otro juez electoral en el estado de Paraíba pidió el arresto del director general de Google Brasil por no quitar de YouTube un video en el que se calificaba de «burro» a otro aspirante a alcalde, Romero Rodrigues.
Google apeló el fallo, la justicia estableció que la empresa no podía ser considerada responsable del contenido del video y la detención fue suspendida.
Por otro lado, el martes pasado, un tribunal en San Pablo ordenó a Google retirar de YouTube cualquier video que contenga escenas de la controvertida película La inocencia de los musulmanes , que en las últimas semanas despertó violentas protestas en los países islámicos.
«Cancelar lo que es ilícito no ofende el valor relevante de la libertad de pensamiento y de comunicación», destacó el juez Gilson Delgado Miranda en su fallo.
La empresa de origen norteamericano tiene un plazo de diez días para bloquear en Brasil todos los videos relacionados con el polémico film o se expone a una multa de unos 5000 dólares por cada día de incumplimiento.
En tanto, en el estado de Santa Catarina, en agosto, la justicia había pedido la suspensión de la red social Facebook en Brasil por 24 horas tras su negativa a eliminar una página en la que se criticaba a un concejal que se postulaba a la reelección.
Facebook finalmente llegó a un acuerdo para evitar la sanción y aceptó retirar la página que había sido cuestionada..
La orden de captura del ejecutivo de la empresa madre de YouTube había sido dictada anteayer por el juez Flavio Saad Perón, de Campo Grande, capital del estado de Mato Grosso do Sul, por «desobediencia» luego de los reclamos que presentó el político Alcides Bernal, candidato a la alcaldía de la ciudad por el Partido Progresista (PP), que había exigido a la justicia el bloqueo de esas imágenes.
En los videos subidos a la plataforma por un individuo particular se acusa a Bernal de enriquecimiento ilícito, de incentivar a una novia a tener un aborto y de golpear a chicos cuando estaba borracho.
Tras el arresto de Silva Coelho ayer por la tarde, sin embargo, la policía federal aclaró que el empresario no permanecería detenido por tratarse de un delito de bajo potencial ofensivo. Se le hizo firmar una declaración en la que se comprometió a presentarse ante la justicia y luego fue liberado.
«Si cada persona pudiese elegir entre cumplir o no una orden judicial que legalmente le fue impuesta, nuestra sociedad se volvería un caos», defendió su postura Saad Perón.
La empresa Google ya había apelado la decisión del magistrado que de todas maneras fue mantenida por el juez del tribunal regional electoral Amaury da Silva Kuklinski, que calificó los videos de «propaganda electoral negativa».
«Al tratarse de una plataforma, Google no es responsable por el contenido subido al sitio», destacó la compañía en un comunicado sobre el tema.
La justicia también había determinado la suspensión, por 24 horas, de Google y YouTube en el estado de Mato Grosso do Sul, y la operadora local Embratel señaló que esperaba indicaciones del tribunal regional electoral para cumplir con la medida ordenada.
Sin embargo, no es la primera vez que sucede en Brasil un caso en que entra en polémica la libertad de expresión en los medios electrónicos.
Dos semanas atrás, otro juez electoral en el estado de Paraíba pidió el arresto del director general de Google Brasil por no quitar de YouTube un video en el que se calificaba de «burro» a otro aspirante a alcalde, Romero Rodrigues.
Google apeló el fallo, la justicia estableció que la empresa no podía ser considerada responsable del contenido del video y la detención fue suspendida.
Por otro lado, el martes pasado, un tribunal en San Pablo ordenó a Google retirar de YouTube cualquier video que contenga escenas de la controvertida película La inocencia de los musulmanes , que en las últimas semanas despertó violentas protestas en los países islámicos.
«Cancelar lo que es ilícito no ofende el valor relevante de la libertad de pensamiento y de comunicación», destacó el juez Gilson Delgado Miranda en su fallo.
La empresa de origen norteamericano tiene un plazo de diez días para bloquear en Brasil todos los videos relacionados con el polémico film o se expone a una multa de unos 5000 dólares por cada día de incumplimiento.
En tanto, en el estado de Santa Catarina, en agosto, la justicia había pedido la suspensión de la red social Facebook en Brasil por 24 horas tras su negativa a eliminar una página en la que se criticaba a un concejal que se postulaba a la reelección.
Facebook finalmente llegó a un acuerdo para evitar la sanción y aceptó retirar la página que había sido cuestionada..